El FMI destaca la «liquidez y solvencia» ganados por la banca española

Este examen, el tercero que hace el FMI a la banca española, se inscribe en el marco de la supervisión que realiza la «troika» formada por el FMI, la Comisión Europea y el Banco Central Europeo desde que España accedió a una línea de crédito de hasta 100.000 millones de euros en julio del año pasado, de la que hasta ahora solo han utilizado 41.300 millones.

No obstante, el Fondo advierte de que los riesgos que aún presenta la economía «se mantienen elevados» y podrían aumentar la presión sobre el sector financiero. «La corrección de los grandes desequilibrios externos, fiscales y financieros de España está muy avanzada, con acciones políticas tanto a nivel europeo como español, que han ayudado a rebajar la presión sobre los mercados en el último año», declara el informe.

Efectos de los ajustes

Entre los riesgos menciona los efectos de nuevos ajustes, «con una fuerte carga sobre la demanda doméstica» y con elevada tasa de paro. También se refiere a «dinámicas del sector financiero que aún contribuyen a presiones recesionistas, con aceleración de la contracción del crédito, el estrechamiento de las condiciones de los préstamos y el aumento del precio del préstamo a las empresas».

Haciéndose implícitamente eco de la revisión a la baja del crecimiento de la economía española que el propio FMI anunció la semana pasada, el informe advierte que «el crecimiento puede seguir siendo débil por algún tiempo, a menos que se adopten medidas a nivel europeo y español para que el proceso de ajuste sea menos costoso». Con ello, los expertos del organismo internacional repiten su mensaje de rebajar la presión de las políticas de austeridad, aunque sin levantar el pie del acelerador de las reformas.

El informe destaca el «gran progreso» registrado para enderezar los balances bancarios y los avances relativos al «banco malo». En relación a la SAREB, no obstante, recomienda que su plan de negocio se base en «proyecciones más conservadoras sobre los precios de la vivienda, dado que éstos siguen cayendo con fuerza y más correcciones son probables».

Otras recomendaciones son que el Banco de España siga con su iniciativa de una clasificación más coherente y precisa de los préstamos refinanciados, así como restricciones en el reparto de dividendos monetarios y bonus. También apuesta por la aprobación y «potente implementación» de la ley de reforma de las cajas de ahorro enviada al Parlamento, y que el Gobierno «explore reformas fiscales neutrales en ingresos para reducir los impedimentos en disposición de activos». En este sentido, sugiere descansar menos en impuestos sobre transacción de inmuebles.

En cuanto a los créditos refinanciados el FMI recuerda que, como parte del memorandum de entendimiento que firmó España para acceder al rescate, se pidió a los bancos que divulguen los datos de sus créditos refinanciados y, en este sentido, subraya que España es uno de los primeros países de Europa que ha dado este importante paso en aras de la transparencia. A finales de 2012 se recalificó una cantidad importante de créditos que se calificaron como sanos, a pesar de que el uso de esta herramienta podría indicar un mayor riesgo de crédito que justifique su calificación de dudoso.

Completar la unión bancaria

Por lo demás, el FMI insiste en su reiterada petición a los países de la zona euro que aceleren la creación de una completa unión bancaria.

Este informe se publica una semana después del de la Comisión Europea, en el que valoraba de manera positiva los avances realizados por el sector bancario español en materia de reforzamiento de capital y saneamiento, por lo que concluía que los bancos de nuestro país no necesitarán más dinero del rescate europeo, al margen de los 41.300 millones ya utilizados.

Ambas instituciones han coincidido también en la apreciación de que, en todo caso, «garantizar la salud de los bancos en un entorno económico difícil representa un desafío importante en un contexto de bajos tipos de interés y del aumento de créditos morosos».