#YoMeQuedo: un viaje por la España que se resiste a vaciarse
No se quedan en el pueblo porque no les quede más remedio. Se quedan porque no se imaginan un lugar mejor para vivir
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Ana García NovoEspaña Vaciada es mucho más que una expresión. Es una realidad en miles de pueblos de España que ven cómo sus vecinos abandonan sus calles. ¿Todos? No. Todavía hay algunos que se resisten a marcharse. Y lo hacen a base de creatividad y valentía. Promueven negocios que les permiten sacar partido a los materiales que les ofrece su tierra, desarrollar una vida acorde con sus valores y continuar con tradiciones que, de otro modo, estarían condenadas a desaparecer.
En la España rural quedan lugares con la inmensa suerte de que algunos de sus vecinos han decidido ir a contracorriente. A base de orgullo y esfuerzo, apuestan por estas localidades para desarrollar su modo de vida y sacar adelante proyectos que ayuden a reactivar la economía local. Así es el viaje por la España que se resiste a vaciarse.
Belchite (Zaragoza)
Población: 1.528 habitantes
Variación población 2008-2018: -10%
“Pueblo viejo de Belchite, ya no te rondan zagales. Ya no se oirán las jotas que cantaban nuestros padres”. Así rezaba una inscripción que realizó Natalio, el último habitante del casco antiguo de esta localidad, en una de sus paredes antes de marcharse.
Hoy quedan algo más de 1.500 personas en este ayuntamiento y lo hacen fuera del casco histórico que quedó en ruinas desde la Guerra Civil. Las hermanas Sandra y Nuria Jaime, junto a su hermano y su madre, son algunas de esas personas que han dicho “yo me quedo” en Belchite. Lo han hecho al frente de Almazara de Jaime, de donde sale su aceite de oliva virgen extra, reconocido con más de 15 premios internacionales, cardiosaludable y que da continuidad a la que en su día fue la mayor industria de Belchite.
Calamocha (Teruel)
Población: 4.319
Variación población 1998-2018: -10%
Casi todas las palabras en Calamocha van precedidas del adjetivo “antiguo”. Antiguo lavadero de lanas, antiguo molino o antigua fábrica de mantas son algunos testigos del carácter emprendedor de los habitantes de esta zona.
Una tradición que ha decidido seguir Ángel Marzo, un joven ebanista de la localidad que impulsó su propio negocio de creación artesanal de muebles a base de maderas nobles y materiales como el metal o el cristal. En su proyecto Woodmad ha encontrado la manera de continuar con su vida en el pueblo y contribuir a la dinamización de su entorno.
Samper de Calanda (Teruel)
Población: 783
Variación población 2008-2018= -18%
Ermitas, iglesias y fuentes rodeadas de montañas y parajes naturales. ¿Quién querría alejarse de un lugar así? Los miembros de la familia Fandos y Barriuso, desde luego, no. Por eso hoy continúan con la aventura empresarial familiar que comenzó hace 45 años en Samper de Calanda como un proyecto ganadero y agroalimentario, centrada ahora en la elaboración artesanal de quesos y vinos tradicionales con la uva de sus propias fincas.
Seis hermanos trabajan actualmente en la quesería, la bodega y las fincas, aunque reciben ayuda puntual de otros miembros de la familia cuando la necesitan. Todo queda en casa en el proyecto FanBar. Incluso variedades autóctonas de uva prácticamente desaparecidas y que la familia ha decidido recuperar en sus 80 hectáreas de viña.
Cercedilla (Madrid)
Población: 6.948
Variación población 1998-2018: -0,3%
Parece mentira que a poco más de 50 kilómetros de la excesiva Madrid haya valles rodeados de robles y pinos en los que solo se oyen el rumor de un riachuelo y algún que otro mugido. Este es el caso de la finca Río Pradillo, en la Sierra de Guadarrama. Forma parte de una granja ecológica biodinámica junto con otra finca situada en Tierra de Campos (Palencia), Castilla Verde, donde se cultivan cereales, legumbres y forrajes para alimentar al ganado.
Fernanda Freitas y su pareja están hoy al frente de esta iniciativa, denominada Castilla Verde & Río Pradillo. En la granja de la Sierra de Guadarrama se encuentran los pastos donde viven sus vacas y caballos, la quesería donde elaboran quesos y yogures a partir de la leche de nuestras vacas, así como el molino y tahona que les permiten elaborar pan y bollería a partir de sus propios cereales.
Sigüenza (Guadalajara)
Población: 4.356
Variación población 1998-2018: -13%
Poner en valor una agricultura sostenible que ayude a transformar el lugar donde se cultiva, a generar puestos de trabajo y a que los valores de la zona permanezcan en ella. Estos son los principales objetivos de DeSpelta, el proyecto que Francisco Jubería y Carlos Moreno lideran en Sigüenza, la localidad del Doncel conocida por su patrimonio histórico.
Para ello, cultivan cereales a 1.000 metros de altitud, que luego se transforman artesanalmente en harinas molidas a la piedra con grano entero, así como en pastas alimenticias. DeSpelta también envasa las legumbres que utiliza como partes de su rotación de cultivos.
Talavera de la Reina (Toledo)
Población: 83.009
Variación población 1998-2018: -5%
La crisis económica tuvo consecuencias notables en Talavera de la Reina, un municipio que llegó a superar el 40% de paro en 2012 y que en solo diez años perdió más de 3.700 habitantes. Una zona conocida por su tradición artesana, que todavía algunos jóvenes luchan por mantener.
Artesanos y productores apuestan por la España rural para vivir y sacar adelante proyectos que reactivan la economía local
Este es el caso de David Correa, profesor de la Escuela de Herreros de la cercana localidad de Las Vegas de San Antonio. Este artesano investiga y elabora trabajos en metal según los métodos tradicionales de la zona. Se inició en el oficio con 17 años y se enamoró de la forja gracias a internet: los vídeos y foros online encendieron la chispa que hoy lucha por mantener viva en el entorno de Talavera de la Reina.
Queserías, forjas, ebanisterías, panaderías, bodegas o granjas biodinámicas son algunas de las iniciativas de esa parte de España que lucha por retener población. Las personas detrás de ellas son las que evitan que todo ese patrimonio artístico y tradicional del medio rural se convierta en un recuerdo lejano.
Correos Market, el apoyo para los artesanos rurales
Hacer llegar sus productos a cualquier parte es uno de los grandes retos que enfrentan los artesanos rurales. Para colaborar con estas iniciativas que ayudan a fijar población en estos entornos, Correos ha puesto en marcha Correos Market, una iniciativa que proporciona la capilaridad de la compañía, su potencia logística y que acerca la oferta de los productores a su público objetivo a través del comercio online y de un sello certificador de la calidad de sus productos.
Así, este servicio certifica la calidad de los productos y los integra con la plataforma de paquetería de Correos. De esta manera, los artesanos y productores locales pueden enviarlos a sus clientes, que los recibirán sin coste para ellos.