El ocio infantil, un negocio rentable y con futuro
Si hay un sector de la población en constante demanda de innovación ese es el familiar. Por eso, emprender un negocio enfocado a los niños y jóvenes siempre resulta atractivo

La maternidad y la paternidad se han convertido en fuentes de negocio al alza porque si hay un sector de la población en constante demanda de innovación ese es el infantil. Emprender un negocio enfocado a los niños siempre resulta atractivo. Dentro de este amplio nicho, el ocio infantil, juvenil y familiar se erige como una excelente elección. Los padres quieren compartir y ofrecer a sus hijos alternativas distintas (y alejadas de las pantallas) para disfrutar de su tiempo libre y de las fechas especiales. No hay nada más que echar un vistazo a la cartelera de las grandes ciudades: la oferta de películas, obras de teatro, musicales, cuentacuentos y conciertos infantiles y familiares crece sin parar con un plus de calidad y modernidad que quizás nosotros no tuvimos la suerte de disfrutar cuando éramos pequeños.
No obstante, aunque el ocio infantil y juvenil tiene muchas opciones de negocio viables y rentables, con los niños no todo vale. Por eso, es fundamental conocer bien un sector que si se caracteriza por algo es por la exigencia y la calidad. ¿Cuántas veces has oído a un niño decir que algo les gusta o les aburre sin ningún tapujo ni miramiento? ¿O a un adulto pedir consejo a conocidos para celebrar el cumpleaños de su hijo de una forma original y que sea un acierto seguro? Por eso, los negocios consolidados que combinan las ventajas de las atracciones más tradicionales (y que encantan a los niños) con las nuevas tendencias de ocio infantil y juvenil son una apuesta segura como padres y como empresarios.

El mercado de ocio y eventos es, sin duda, uno de los ámbitos más destacados de los últimos años y uno de los sectores al alza en España. Por otro lado, las franquicias son siempre un valor seguro para apostar por una idea de negocio que ya ha demostrado ser rentable y estar consolidada. Solo hay que mirar los datos: en España las franquicias crecieron por cuarto año consecutivo en 2017. El sistema facturó 27.592 millones de euros el pasado año, registrando una subida del 2,2%, según la Asociación Española de Franquiciadores (AEF). Además, el número de redes creció un 3,8%, el de locales un 5,4% y los empleos generados un 3,7%. Datos, explicaba Eduardo Abadía, director gerente de la AEF, que muestran "que ya no hay ningún síntoma de crisis, reflejando la buena salud de la franquicia hoy en día en España".
Emoción e innovación
Moda sostenible y un poco gamberra para los peques. Juguetes artesanales, ecológicos y educativos. ¿Por qué no un concierto de rock o punk para los niños en vez de tanto tallarín? ¿O llevar a los peques a un taller de cocina? El mundo infantil está ávido de ideas nuevas en un entorno cada vez más family friendly y con unos padres que tienen clara la importancia de fomentar el espíritu creativo de sus retoños. Si, además, pueden compartir sus intereses, gustos y pasiones con sus hijos, el acierto es total.

Los eventos, los cumpleaños y los talleres son otra de las ideas de negocio más exitosas donde aplicar ambos conceptos. Siempre hay fiestas y celebraciones que necesitan un plus de originalidad. A ello se dedica Bichobola, un negocio que aúna desde el tradicional parque de bolas hasta la celebración de cumpleaños, fiestas y talleres personalizados en su local de Las Tablas (Madrid) y a domicilio. Una oferta 360º que se adapta a cada niño, a cada adolescente (esos grandes olvidados entre el limbo infantil y el adulto) y padre. "Nuestro formato de negocio va más allá de un simple parque infantil. Después de varios años de intensa actividad, hemos desarrollado un modelo de negocio versátil con una marca asentada y un valor diferencial que queremos compartir", aseguran sus creadores.
Tras ocho años de trayectoria, Bichobola es un buen ejemplo de un negocio infantil solvente y creado pensando en ofrecer a pequeños y adultos todo lo que necesitan para vivir una celebración única. Además, el negocio se distingue por su simplicidad a la hora de gestionar el personal, partiendo de la experiencia de esta empresa y adaptándolo a las necesidades de cada centro y su facturación, y de la gestión de compras, ya que se manejan referencias de calidad pero de bajo coste. Otra de las ventajas es la flexibilidad horaria: al hablar de un negocio que se concentra en franjas horarias determinadas y bajo agenda, priman la organización y optimización del tiempo del franquiciado.
De igual modo, la inversión para crear el negocio se ha ajustado al máximo pero siempre con la calidad como principal valor de Bichobola, desde el producto que ofrecen hasta la atención al cliente y los proveedores. En definitiva, se trata de invertir en un negocio ya consolidado, rentable, divertido y de fácil gestión, pero que además ofrece un amplio abanico de opciones para poder así proporcionar estabilidad económica durante todo el año al franquiciado porque se organizan actividades en el propio local pero también a demanda en domicilios, salas, hoteles, restaurantes... Y todo ello en un sector como el infantil en continuo desarrollo que cada año crece y que supone que, según datos del Instituto Nacional de Estadística, el gasto de los hogares españoles en cultura y ocio fue de 718,3 euros de media durante el año pasado.