Funeral de Manuel Peláez Castillo
Emocionado adiós al alicantino de Granada
Centenares de personas –políticos, empresarios, representantes de la sociedad civil y, sobre todo, muchos amigos– se dieron cita ayer en el Monasterio de la Santa Faz de Alicante para rendir un emocionado adiós al que sin duda fue uno de los empresarios más influyentes del último medio siglo en la Comunidad Valenciana y un personaje clave en la historia reciente de la provincia de Alicante, a pesar de haber nacido en Granada. El funeral de Manuel Peláez Castillo, que fallecía el martes a los 76 años de edad víctima de una enfermedad que padecía en los últimos meses, fue oficiado por el exobispo de Orihuela-Alicante Rafael Palmero. Las muestras de cariño de la sociedad alicantina dejaron pequeño el templo, y casi la plaza de Santa Faz, a donde llegaron nada menos que setenta coronas funerarias de familiares, amigos e instituciones en las que Peláez Castillo, fundador de la constructura ECISA y de la Asociación de la Empresa Familiar en Alicante –entre otras muchas iniciativas–, dejó de una u otra manera su huella. De esta forma, centenares de personas transmitieron a la viuda, Carmen Robles, y a sus tres hijos, Manuel, Javier y Enrique, que el legado de Manuel Peláez Castillo permanecerá durante largo tiempo en Alicante.

