SOS para el legado de Antonio Saura

SOS para el legado de Antonio Saura ABC

ISABEL PACHECO

El director de la Fundación reclama ayuda a las administraciones que se implicaron en la creación de este proyecto en la Casa Zavala de Cuenca. Según sus cálculos, con 200.000 euros el centro cultural estaría abierto todo el año

La Fundación Antonio Saura de ... Cuenca también pide ayuda. Primero lo hizo el Espacio Torner, en la antigua iglesia de San Pablo: después de seis años abierto tuvo que echar el cierre en 2011. La Fundación Antonio Pérez tampoco pasa por su mejor momento y, desde hace unos años, tiene que cobrar entrada para ver sus fondos, desde Andy Warhol al Equipo Crónica.

Por todo ello, desde la Casa Zavala miran de reojo lo que les pasa a sus vecinos. Juntos han formado un gran triángulo de arte contemporáneo que ha atraído a miles de turistas cada año, junto con el Museo de Arte Abstracto Español, al que la crisis ha dejado sin la prometida ampliación en el subsuelo de la Plaza de Ronda de la capital.

Fue en febrero del año 2008 cuando la Fundación Antonio Saura, también en el casco antiguo, abrió -no exenta de polémica legal- para convertirse, no sólo en una exposición de las obras del artista que le da nombre, sino también para ser una referencia en toda la ciudad. Es más, es uno de los pocos centros de la provincia y de Castilla-La Mancha que está homologado; es decir, tiene el «Facility Report» (informe de instalaciones) para acoger grandes obras, según recuerda su director, Miguel López, quien reclama ayuda a esas administraciones que se implicaron en la creación de este proyecto. Su puesta en marcha costó 1, 8 millones de euros pero con los años las aportaciones han ido decreciendo.

Los números

En 2007 el presupuesto de la Fundación era de 380.000 euros y de 280.000 hace dos años. Para este 2013, la Diputación ha mantenido sus 25.000 euros de aportación pero el Consorcio «Ciudad de Cuenca» ha reducido la suya en un 50% y en este 2013 ha destinado un total de 89.000 euros. El Gobierno regional abandonó el Patronato de la Fundación en el año 2011 y desde entonces no hay comprometida partida presupuestaria en este sentido. Hoy sus cuentas no tienen grandes ceros y, según sus cálculos, sus instalaciones podrían mantenerse abiertos 365 días al año con poco más de 200.000 euros.

La Casa Zavala custodia «La Muerte y la Nada», que es propiedad de la Junta de Comunidades, una colección de 27 pinturas sobre papel con textos del escritor suizo Jacques Chessex compradas al editor Pierre Canova a finales de los años 90. También la serie «Moi», serigrafías donadas por el editor Gustavo Pili y obra gráfica y varios libros donados por Hans Meinke, editor principal de Antonio Saura, entre otras muchas «joyas».Durante estos años ha sido escenario de Photoespaña y de conciertos de la Semana de Música Religiosa de Cuenca, el cuarto festival de música más emblemático de España.

Pese a todo, tienen por delante grandes retos, como traer a Cuenca la próxima primavera una muestra sobre el escritor y artista alemán Günter Grass, Premio Nobel de Literatura, que también vendrá a Cuenca. En la exposición se quieren exhibir esculturas, documentos o libros de Grass, sobre quien se programa un seminario en la Universidad Nacional de Educación a Distancia (UNED) de Cuenca y se trabaja en proyectar un documental sobre su vida en el Teatro Auditorio de Cuenca, según López.

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