Graban en vídeo por primera vez a un misterioso «tiburón fantasma»

«Normalmente, la gente no habría estado vigilando esa zona, así que fue todo un golpe de suerte», ha dicho en National Geographic Dave Ebert , director del programa del Centro de Investigación de Tiburones del Pacífico en los laboratorios marinos Moss Landing.

Tal como han publicado investigadores del Centro de Investigación del Acuario de la Bahía de Monterrey (MBARI), en California, Estados Unidos, esta criatura podría ser un ejemplar de la especie Hydrolagus trolli .

« Hydrolagus trolli es una especie de quimera poco conocida, que habitualmente se encuentra en profundidades de entre 610 y 2.000 metros», han indicado los autores en un estudio publicado en Marine Biodiversity Records .

Esta quimera se caracteriza por tener una cabeza protuberante, con círculos negros alrededor de los ojos y por alcanzar una longitud de hasta 120 centímetros. Desde que se le asignó su nombre en 2002, se la suele conocer como quimera de nariz de punta azul.

Hasta ahora se había localizado en las aguas profundas que hay alrededor de Australia, Nueva Zelanda y Nueva Caledonia. Pero en 2009, por primera vez se detectó alrededor del archipiélago de Hawái y frente a la costa central de California.

Desde entonces, los científicos han trabajado en identificar a esta criatura. Pero solo con las imágenes, les ha resultado complicado llegar a una conclusión inequívoca. Tal como han reconocido los investigadores en un comunicado, sería necesario capturar un ejemplar para tomar muestras de ADN de su tejido.

«Eso es más fácil decirlo que hacerlo porque estos peces generalmente son demasiado grandes, rápidos y ágiles como para ser capturados por uno de nuestros vehículos de control remoto», han aclarado los científicos.

Con todo, creen que si ese animal no es una Hydrolagus trolli podría ser una especie desconocida.

Las quimeras son peces extraños, tal como han explicado los investigadores del MBARI en su comunicado. Sus cuerpos no tienen hueso, sino cartílago, al igual que los tiburones. Al igual que las quimeras de la mitología clásica , cuyo cuerpo estaba formado por partes de distintos animales (como una cabeza de león, otra de cabra, garras de águila y una cola de serpiente), las quimeras tienen un cuerpo bastante peculiar.

Al contrario que ocurre con los tiburones, sus dientes tienen aspecto de placas y están diseñados para aplastar a sus presas, que son moluscos, gusanos y otro animales bentónicos (que son aquellos que viven en el fondo del mar). Además de eso, detectan a sus víctimas a través de un sistema de sensores de movimiento (común a otros peces) y que se lama línea lateral. Por último, las quimeras tienen penes retráctiles en la cabeza.

A pesar de su extraño aspecto, son criaturas ampliamente distribuidas por los océanos. En total, se conocen 38 especies de quimeras.