La independencia de Cataluña, fuera de la agenda europea

El lema de estos comicios, «This time is different» (Esta vez es diferente), alude a que, por primera vez, se presentan candidatos a presidir la CE, es decir, que en lugar de presidencias rotatorias, el Parlamento europeo designará al futuro presidente de la CE y del Consejo de Europa. Eso implica, explica el director de medios y portavoz del Parlamenro europeo, Jaume Duch, que el ciudadanos asista a debates televisados entre los candidatos. Otra de las novedades, añade, es el previsible crecimiento, según las encuestas, de partidos de la extrema derecha y la extrema izquierda, así como de los euroescépticos o eurofóbicos. Estos partidos pueden ser determinantes en los resultados, ya que los sondeos arrojan un empate entre las dos grandes familias europeas, el Partido Popular Europeo (PPE) y la Alianza Progresista de Socialistas y Demócratas (S&D), mientras que la Alianza de Liberales y Demócratas por Europa (ALDE), quedaría en tercer lugar.

Sobre la irrupción del nacionalismo excluyente debatieron expertos en la historia de la UE. La profesora de Relaciones Internacionales de la Universidad de Oxford, Kalypso Nicolaïdis, confía en que el nuevo Parlamento no abone la cultura de la “arrogancia” nacionalista a la francesa y puso de manifiesto la dificultad en «cruzar el Rubicón» hacia una Europa federal.

Sobre la cuestión catalana, habló de «falta de imaginación», pues a lo largo de los años, «los países han salido y entrado de la UE». Para Thomas Risse, profesor de Relaciones Internacionales del Instituto Otto-Suhr de Ciencias Políticas de Berlín, la UE no debería ser mediadora y planteó la curiosa situación que puede provocar una Gran Bretaña que decida dejar la UE, mientras una Escocia independiente podría su ingreso . Para Thomas Klau, director de la Oficina en París del think tank European Council on Foreign Relations, Cataluña saldrá de la UE si se independiza, pero «a largo plazo o muy largo plazo, podría volver, depende del veto del resto de los países».

Hay una importante renovación en la lista de eurodiputados catalanes actual. Algunos se van confesando que, en diez años de estancia en Bruselas, han pasado del euroentusiasmo a la eurofrustración. Este es el caso de Raül Romeva, que hasta ahora formaba parte del grupo Verds/ALE y que será sustituido por Ernest Urtason.

El ecosocialista cree necesaria una profunda transformación de las instituciones europeas porque «existe un problema de falta de democracia». No lo ve así Maria Badia (S&D), quien sí admite una falta de credibilidad de la política europea a consecuencia de la crisis. No esconde que su sustitución por Javier López se debe a las diferencias con la dirección actual del PSC , que se ha desmarcado del derecho a decidir que ella sí defendió ante el Parlamento europeo. El también socialista Raimon Obiols elogia la labor de la Cámara europea en esta legislatura, con más de 400 leyes aprobadas. Por su parte, Salvador Sedó (PPE) tampoco comparte el déficit democrático que denuncia Romeva y asegura que «la crisis económica ha sido provocada por los gobiernos nacionales, pero la solución ha venido de Europa». Sedó tampoco repite, pues las diferencias con Ramon Tremosa, cabeza de lista de CDC (los nacionalistas forman parte de la familia liberal europea), provocaron su renuncia y será sustituido por Francesc Gambús.

El popular Santiago Fisas está encantado de repetir como candidato a eurodiputado. Considera que el Parlamento europeo es «el más democrático del mundo» y valora el carácter pactista de esta Cámara. No le preocupa la previsible irrupción de Ciutadans o de Vox. Del primero destaca la paradoja que supone su posible entrada en la familia liberal, donde está CDC, mientras que del segundo, que presenta como candidato a su ex compañero de escaño Alejo Vidal-Quadras , considera que contribuye al PP a centrarse.

Pese a su condición de catalanes, ninguno de ellos cree que la cuestión catalana vaya a ser una prioridad en la agenda europea de los próximos cinco años. Asumen que la campaña electoral, a nivel español y autonómico, abordará la cuestión de la independencia de Cataluña, e incluso que este asunto centra algunas conversaciones privadas entre eurodiputados, pero coinciden en que no debería plantearse como unas elecciones plebiscitarias y que en la agenda europea no figura Cataluña.

Cuestiones como el corredor mediterráneo, la dependencia energética de Europa, la escasa inversión en I+D o la necesidad de una especie de «plan Marshall» europeo para lograr la recuperación europeas, son cuestiones que destaca el , quien augura un aumento de los votos del PSC en estas europeas porque, en su opinión, “el socialismo español está más fuerte en Cataluña que el PSC”.

El derecho a decidir sí es defendido por Izaskun Bilbao, miembro de ALDE y que trabaja por un marco europeo en el que, tal como ocurre con Escocia, se reconozca también ese derecho para Cataluña y el País Vasco. No obstante, la peneuvista afirma que en Europa «se deberían debatir otras cosas, no a lo que estamos acostumbrados».

En la Comisión Europea, la crisis económica ha centrado, obviamente, el quehacer de los comisarios en esta legislatura que ahora acaba. Ha sido un proceso «traumático», admite Amadeu Altafaj, jefe de gabinete adjunto de vicepresidente de la CE y comisario de Asuntos Económicos y Financieros, Oli Rehn. Especialmente en lo que respecta a la seria posibilidad de que Grecia hubiera abandonado la UE , lo que habría provocado un efecto en cadena en países como España o Portugal. Durante esta recesión se ha puesto de manifiesto la insolidaridad entre los países, pero también se han sacado valiosas lecciones.

La directora general de Mercado Interior y Servicios de la CE, Nadia Calvino, es una de las artífices de la unión bancaria y asegura que de haberse aprobado antes “no habríamos tenido esta gran crisis ni la gran fragmentación de los mercados”. Calvino destaca, asimismo, la nueva regulación de las agencias de rating , lo que evitará posibles decisiones arbitrarias que afectaban a la estabilidad de los mercados. El ex jefe de gabinete del comisario de Competencia Joaquín Almunia y asesor de la Dirección General de Presupuestos de la CE, Antoine Quero, subraya que, en estas elecciones, la CE debe «metabolizar» que habrá una mayor politización, es decir, más debate, lo que puede influir en el grado de presión o «intrusismo» que ha tenido hasta ahora a troika (CE, Banco Central Europeo y el Fondo Monetario Internacional) .