Rosa Maria Sardà es la alcahueta de «El caballero de Olmedo»

Este montaje es fruto de la fusión de la Kompañia Lliure y la Joven Compañía Nacional de Teatro. Dos grupos de jóvenes talentos que unieron fuerzas para subir a escena este espectáculo que se estrenó en el Teatro Pavón de Madrid donde funcionó tan bien que colgaron cada noche el cartel de no hay entradas. Tras el éxito de Madrid estrenan mañana en el Lliure de Montjuic, donde se instalarán hasta el 13 de abril.

«Hacer un clásico del Siglo de Oro es mucho trabajo», destaca Lluís Pasqual, que define a Lope de Vega como un poeta popular para todos los públicos. «El caballero de Olmedo» es la historia de una rivalidad entre dos pueblos y la matanza de un caballero noble y cristiano. «El caballero sufre una herida de amor y sin pensar las consecuencias va directo a la muerte; Lope utiliza el amor como excusa», añade Pasqual. Precisamente, en las cuestiones de amoríos, es donde interviene la alcahueta.

«Pasqual ha hecho de director pero también de maestro», declara la Sardà que interpreta a la alcahueta de la obra. «Hay muy buena sintonía entre el equipo porque todos tenemos en común nuestra fe en el teatro y la mayoría de nosotros no habíamos hecho una obra en verso en castellano -desvela la actriz -. Por problemas de salud en Madrid sólo hice nueve funciones y el resto las hizo Carmen Machi y aquí me turno con la fantástica Francesca Piñón».

La Sardà define su papel como una celestina bruja y simpática que trata muy bien a sus clientes. «Es un homenaje a la Celestina de Fernando de Rojas», subraya Pasqual que ya dirigió en 1992 «El Caballero de Olmedo» en Aviñón. No falta un toque flamenco de la mano de Pepe Moros y la supervisión de Dani Espasa en la dirección musical.