Diez miradores para disfrutar de las mejores vistas de Barcelona
Decenas de rincones muestran espectaculares panorámicas de la capital catalana, como los populares Collserola o Montjuïc pero también en pleno Gótico o en las Glòries. Te proponemos diez espacios donde plasmar una Barcelona digna de postal
Actualizado: GuardarDecenas de rincones muestran espectaculares panorámicas de la capital catalana, como los populares Collserola o Montjuïc pero también en pleno Gótico o en las Glòries. Te proponemos diez espacios donde plasmar una Barcelona digna de postal
12345678910La terraza del MNAC
inés baucells Una parada obligatoria. El Museo Nacional de Arte de Cataluña (MNAC) cuenta con dos terrazas-mirador ideales para disfrutar de Barcelona desde una perspectiva diferente. Ubicadas en la azotea del edificio del Palacio Nacional, proporcionan unas vistas en 360º del skyline de la capital catalana. La visita a ambas terrazas-mirador, cuyo acceso es gratuito para los visitantes que compren la entrada al museo y que cuesta 3 euros (o 1, 5 si vas acompañado) al resto de la gente, permite ver la Sagrada Familia, la Torre Agbar, las torres de la Villa Olímpica, el Palacete Albéniz, el puerto, el Anillo Olímpico o la Fuente Mágica de Montjuïc, entre otros monumentos de la ciudad.
Las vistas preferidas de los pequeños
yolanda cardo Las vistas preferidas de Barcelona para los más pequeños y también para los más atrevidos están en el parque de atracciones del Tibidabo, en donde se puede ver casi a vista de pájaro la ciudad mientras das la vuelta en el mítico avión, paseas con el tren o descargas adrenalina en la montaña rusa. Ubicado en la cima de la sierra de Collserola, a más de 500 metros de altura, su ubicación permite descubrir la ciudad, y ver como se expande hacia L'Hospitalet, Badalona o Montgat, como si estuviéramos en una atalaya. Las vistas más imponentes son, sin duda, las que dan a la ciudad pero también es un buen sitio para descubrir la parte interior de Collserola y cómo realmente es un gran pulmón verde para Barcelona.
Baterías del Turó de la Rovira
Muchos ciudadanos, y cada vez más turistas, suben al turó a disfrutar de las vistas - a. c. Cada vez más frecuentados, los miradores de las antiguas baterías antiaéreas del Turó de la Rovira, en lo más alto del barrio del Carmel de Barcelona, se han convertido en unas de las vistas de la ciudad de moda, que incluso han aparecido en anuncios de televisión. La montaña, en donde construyeron baterías de defensa durante la Guerra Civil, acogió después barracas en las que decenas de familias vivieron hasta los años noventa. Ahora, el Ayuntamiento ha recuperado y museizado el espacio y su visita permite descubrir unas vistas imponentes en un entorno rodeado de la historia más reciente de Barcelona.
Desde el corazón de Barcelona
La Sagrada Familia, la Torre Agbar o la Catedral se ven desde lo más alto - a. c. Recientemente abierta al público, la terraza de la iglesia de Santa Maria del Pi, ofrece unas vistas 360ª de la ciudad desde uno de sus barrios más céntricos. Eso sí, para disfrutarlo toca subir 260 peldaños a pie, hasta lo más alto de la basílica (más de 50 metros de altura), por encima de las campanas. La entrada (15 euros, con acceso completo a la iglesia y audioguía) merece la pena: si uno disfruta callejeando por los barrios laberínticos del centro de la ciudad, ahora puede alucinar viendo el entramado de calles del Gótico, Raval, Santa Caterina o Born y ver a vista de pájaro toda la ciudad. Diferenciar La Rambla o plaza Cataluña, por ejemplo, son además, retos a conseguir si estas en lo más alto
Las vistas más modernistas
Ver La Pedrera es toda una experiencia pero descubrirla por dentro y subir a su azotea, todavía más. La obra modernista por excelencia de Antoni Gaudí, uno de los símbolos de Barcelona, tiene una espectacular terraza, con formas y texturas sinuosas desde las que disfrutar de un punto de vista diferente del Eixample. Además, durante las noches de verano la azotea abre también sus puertas y durante esta época los jueves, viernes y sábado programa actuaciones en vivo de jazz. Un hilo musical perfecto para completar la velada.
Tomando una copa
El local se ubica en la calle Doctor Andreu, cerca de Collserola - abc Un clásico de la noche barcelonesa. El Mirablau, ubicado en la ladera del Tibidabo, lleva más de 25 abierto y mostrando u na de las mejores vistas de la ciudad, durante el día pero también cuando cae la noche. El local cuenta con servicio de comidas con tapas y platos más elaborados y también una extensa carta de cócteles para pasar un atardecer diferente en la ciudad. En verano, además, organiza conciertos en vivo y noches temáticas de bachata.
Gastronomía, ocio y «shopping» al lado
Las vistas son tan espectaculares de día como de noche - a. c. El centro comercial Las Arenas de Barcelona, que lleva tres años abierto en una antigua plaza de toros, tiene la perfecta combinación de ocio, "shopping", gastronomía y un mirador 360ª. La terraza, a la que se puede dar la vuelta y gozar de una panorámica espectacular de la ciudad, está abierta todos los días durante toda la jornada y es gratuita (no lo es el ascensor panorámico por el que se puede llegar a la cima del recinto, pero también se puede subir en escaleras automáticas). Cuenta con una docena de locales de restauración donde tomar algo o comer mientras se mira el castillo de Montjuïc, el Eixample o la montaña de Collserola.
Desde un castillo
Desde el castillo se ve perfectamente el Puerto de Barcelona y también toda la ciudad - yolanda cardo El castillo de Montjuïc, en lo más alto de la montaña barcelonesa que también lleva su nombre, es una buena atalaya desde la que gozar de una Barcelona espectacular. Reabierto al público desde 2008, la antigua fortaleza militar se ha convertido en uno de los puntos de la ciudad en los que escaparse para disfrutar de la ciudad. Además, funciona como un equipamiento cultural en el que se programan actividades durante todo el año: en verano, por ejemplo, realizan sesiones de cine al aire libre. Las vistas permiten descubrir otro punto de vista de la ciudad y también del puerto de Barcelona, que queda a los pies del castillo.
Las vistas más altas de la ciudad
El mirador está acristalado y tiene 360ª - abc La Torre de Collserola, inaugurada para mejorar las comunicaciones en la época de los Juegos Olímpicos de Barcelona, tiene las perspectivas de la ciudad a mayor altura, en concreto a 560 metros sobre el nivel del mar. El edificio, diseñado por el prestigioso Norman Foster, tiene en su décima planta un mirador panorámico acristalado. El visitante sube hasta allí en ascensor y puede disfrutar de unas vistas 360º que van mucho más allá de Barcelona. En días soleados se puede llegar a ver hasta unos 70 kilómetros de distancia, con lo que se puede visualizar bien la costa del Maresme o el Vallès. El acceso es de pago pero las entradas merecen la pena.
Desde Glòries
Uno de los ventanales del DHUB, antes de que empezaran las obras en la plaza - inés baucells Como si de una 'zona 0' se tratara, el desmontaje de la plaza de las Glòries está cambiando el paisaje de la zona que tenía que ser el epicentro de Barcelona según el plan Cerdà. El anillo viario, ya casi derribado en su totalidad, ha dejado paso a un amplio descampado desde el que se puede disfrutar de unas vistas únicas de la Sagrada Familia, el Tibidabo y toda la ladera de Collserola, así como de la nueva Barcelona que ha surgido en la zona de Diagonal Mar y de paso, ver la transformación en la zona. Este paisaje se puede disfrutar a pie de calle pero también desde el DHUB, el Museo de Diseño de Barcelona, cuyas plantas tienen impresionantes ventanales desde los que ver panorámicas espectaculares.
