El psicólogo Tomás Navarro, sobre el bajón otoñal: «Escucha a tu pereza y atiende al mensaje que tiene para ti»

El autor de 'La senda Kaizen' y 'Tus líneas rojas' revela cómo abordar ese momento del año en el que la mayoría de las personas se dejan llevar por la inactividad y el ocio pasivo

Te interesa: Multiplicar las posibilidades del cerebro es posible con la triada del éxito

Con el otoño llega la pereza

Entramos en otoño la estación de la pereza más absoluta y es que el frío, la lluvia y las pocas horas de luz no nos ayudan nada a estar activos. Es cierto que hay personas más perezosas que otras, sin duda alguna, pero ... quien más o quien menos acaba resintiéndose del bajón otoñal.

El nivel de actividad depende de cada persona y de sus circunstancias. Una persona con anemia será menos activa que una persona que esté bien de hierro y nutrientes, una persona deprimida bajará su nivel de actividad y así podríamos seguir enumerando varias casuísticas ambientales, pero también de personalidad e incluso de metabolismo.

Tampoco podemos olvidar que una misma persona puede pasar por diferentes etapas vitales con más o menos pereza. Cuando hacemos algo que nos gusta la motivación, un proceso psicológico básico e importantísimo, se encarga de darnos energía, de levantarnos del sofá, de impulsarnos a la acción mucho más allá del mal tiempo, de la pereza o de la fatiga. Pero a veces nos vemos haciendo cosas sin sentido, que no nos motivan y es cuando acabamos pasando horas haciendo scroll en toda pantalla que se nos ponga por delante.

Hay momentos, como en otoño, que la vida nos da tanta pereza que incluso dejamos de hacer cosas que sabemos que nos van bien. Ahí, lo siento, si es tu caso, has de saber que te entiendo pero que es mejor que tires de fuerza de voluntad. Tampoco hace falta hacerle tanto caso a lo que sentimos, que a menudo, basta un dolor de tripa para que tomemos decisiones que no nos ayudan.

La pereza es una chivata

No te abandones al otoño. Sí, las tardes de manta y serie están muy bien, pero aspira a algo más. No dejes de cuidarte, tira de complementos nutricionales si hace falta, queda con gente, apúntate a algo nuevo que te resulta inspirador, atrévete a plantarle cara a la pereza.

Sabemos que, si quedas con alguien para ir al gimnasio, siempre que no sea un plasta, es mucho más probable que acabes yendo. No obstante, analiza si te da pereza ir al gimnasio porque realmente no es una actividad que te guste ni te motive. Analiza lo que haces, si te gusta o no y si podrías hacer algo que te gustase más.

En algunos casos la pereza viene a visitarnos para aconsejarnos y ahí es muy importante ver los cambios de tendencia. Si de repente te da pereza hacer cosas que antes te gustaban mucho es posible que tengas anemia, estés desarrollando una depresión o tengas algún problema de origen más biológico o psicológico.

También es posible que ese estímulo que te motivaba haya dejado de hacerlo. Si antes te cruzabas toda la ciudad para ir a ver a tu pareja y ahora ya no te apetece, quizás, el mensaje de esa pereza es que algo pasa con la pareja.

Analiza, investiga, piensa y escucha el mensaje que tiene para ti la pereza. Analiza si es una pereza propia del otoño o una pereza que va más allá. Ah, y no olvides que hay una cosa que provoca una pereza descomunal, desproporcionada e incluso invalidante: la fatiga. Podemos estar tan cansados que seremos incapaces de hacer nada de nada. Podemos estar tan saturados que todo nos dé pereza.

Analiza qué es lo que te cansa. ¿Un trabajo exigente? ¿Una sobreexposición a las redes sociales? ¿Una familia tóxica?

Escucha a tu pereza y atiende al mensaje que tiene para ti sabiendo que si dura mucho, que si te aísla en casa y que si no sabes que hacer durante ese tiempo de pereza, quizá necesites ayuda, tomar algunas decisiones o algún cambio de estilo de vida.

Puedes descubrir otros consejos de Tomás Navarro (@tomasnavarropsi en instagram) para lograr cambios grandes dando pasos pequeños en su libro 'La senda Kaizen' (Neko Books) para poner límites a aquellas personas que nos hacen daño en su obra 'Tus líneas rojas' (Zenith/Planeta), explorar un estilo de pensamiento más creativo, más abierto y más resiliente en 'Piensa bonito' y ayudar a los más pequeños a gestionar las emociones con el libro 'Rita y el caparazón de oro', que ha escrito junto a su mujer, Nuria Pablos (@nuriapablos). Y además, puedes leer aquí otros artículos de Tomás Navarro en ABC Bienestar

Artículo solo para suscriptores

Accede sin límites al mejor periodismo

Tres meses 1 Al mes Sin permanencia Suscribirme ahora
Opción recomendada Un año al 50% Ahorra 60€ Descuento anual Suscribirme ahora
Sobre el autor Tomás Navarro

Psicólogo, consultor y escritor. Es autor de los libros «Fortaleza emocional», «Kintsukuroi, «Wabi-sabi», «Yo soy así» y «Eres más fuerte de lo que crees», publicados en Zenith y traducidos a varios idiomas. Colabora con medios de comunicación y ha impartido conferencias en más de veinte países. Escribe, realiza sus sesiones de empresa y atiende a particulares en la montaña, pedaleando, andando o esquiando en el corazón del Pirineo, donde reside.

Ver comentarios