«Las emociones son un río: si frenas su flujo se forma un pantano»
La psicóloga Raquel López publica 'Guía de gestión emocional', un manual con ejercicios prácticos para entender lo que sientes
«Hay que conocer las emociones para gestionarlas con inteligencia y normalidad»
Qué importante es conocernos e identificar nuestras emociones. Y en identificar incluimos el reconocerlas y no oprimirlas. Sabemos que estar triste, por ejemplo, no gusta, pero mucho peor es fingir estar bien y que ese sentimiento se vaya haciendo una bola cada vez ... más grande que llegue un momento que explote en un problema aún mayor.
La psicóloga Raquel López, especialista en gestión emocional, trauma, autoestima y compasión, ha publicado 'Guía de gestión emocional. Cómo sentir todo lo que no nos han enseñado a sentir'. A lo largo de 300 páginas la autora cuenta todo lo que hay que saber sobre las emociones y ofrece ejercicios para mejorar la relación con las emociones y aprender de ellas.
-¿Es importante la gestión emocional en consulta? Has dedicado todo un libro a ello...
Todos los procesos terapéuticos empiezan por enseñar a las personas a gestionar sus emociones. Asumimos que tener emociones es básico pero no se nos enseña a entenderlas; nos dicen que hay emociones buenas y otras que no gustan tanto y las racionalizamos y ya está, pero no funcionamos así en absoluto. La gestión emocional es la base de la salud mental. No puede haber una persona con una vida acorde a sí misma si no sabe lo que está sintiendo. Las emociones son el sistema de evaluación que nos dice lo que nos hace bien y lo que nos hace mal, es decir, nos guía.
Reconocer lo que nos pasa y saber sentirlo es importante, no solo de manera racional, al igual que es primordial expresarlo y saber qué hacer con ello. Muchas personas, como mucho, muestran las emociones muy intensas en picos muy elevados y para el resto no podemos forzar a nuestro cuerpo a que tenga que desarrollar respuesta emocionales sin poder fluir.
- ¿Cómo se aprende la gestión emocional?
Se aprende con práctica y a la gente eso es lo que no les gusta (risas). No es algo que lo leas y ya lo has aprendido, sino que hay que practicarlo. En mi libro tengo ejercicios prácticos que a algunos da pereza pero esto es como ir al gimnasio: para levantar 20 kg primero tienes que aprender a levantar 10.
A efectos generales, primero reconoces que sientes algo y ves dónde sientes en tu cuerpo esa emoción; cómo la sientes, por ejemplo sientes presión, energía, etc. y conectar con la parte física. Hay que preguntarse: ¿cómo se manifiesta en mi cuerpo esta emoción y qué emoción es? Hay que intentar reconocerla. ¿Qué me pide esta emoción? Porque ella nos dice lo que necesitamos. Si tenemos ira o enfado hay que plantearse unas cosas, como 'oye, pon limites', o 'vete de aquí'. Si tenemos tristeza, por poner otro ejemplo, seguramente nos pida hacer introspección porque algo de nuestra vida debe ser modificado.
A nivel físico puedes necesitar acurrucarte en el sofá y en otra ocasión necesitarás hacer ejercicio o gritar (no gritarle a alguien). Las emociones tienen una tendencia a la acción, y gritar a alguien puede no ser lo mejor. ¿Cómo lo expresas? ¿Se lo cuentas a alguien? Hay quienes la respiran y la dejan existir, otros se ponen a escribir cómo se sienten... De forma automática ya llegará ese aprendizaje y nos daremos cuenta de muchas cosas.
- He leído varias veces que somos lo que sentimos y tú, en cambio, defiendes que esta idea no es así...
Desde una perspectiva psicológica, no somos lo que sentimos ni lo que pensamos, si no la persona que mira detrás y observa. Si en un momento de enfado con alguien tú piensas 'ojalá y le atropelle un tren', no significa que seas una asesina sino que sientes cosas. No hay fusión entre la persona y sus emociones porque si pasas a fundirte con eso que sientes, pierdes todo el resto de ti. Hay que aceptar esas emociones moralmente mal vistas porque eso no te convierte en una mala persona. Somos el contenedor de emociones y de pensamientos y los utilizamos a nuestro favor. No eres lo que sientes y quien lo dice debe saber que es totalmente falso y hace daño porque hace que la gente tenga miedo de sentir lo que sienten. Muchos creen que por estar tristes ya van a entrar en depresión, y si no te permites estas emociones es cuando llegan los problemas.
«Si no sabes reconocer tus emociones, vives en la inercia»
Raquel López
Psicóloga
- Es mejor dejar que fluyan, ¿verdad?
Las emociones hay que dejarlas estar y prestarles atención. Hoy en día lo más normal es que llores y lo primero que te digan sea 'no estés triste', 'no le des importancia...'. Hay que aceptar que si lo sientes es porque ya es importante para ti. Queremos desconectar rápido de lo desagradable como si el estar bien siempre fuera estar alegre. Una vida realmente plena es cuando fluyes con tus emociones.
Cuanto antes te permites aceptar una emoción, antes desaparece. Si hoy esperabas un gran día y no es así, tu cuerpo te va a traer esas emociones malas todo el rato y va a subir la intensidad emocional cuanto más te resistas a él. En el caso de la ansiedad, hay que permitirla y hablar con ella, entender que hay días de todo tipo de emociones y que no es para siempre. Las emociones son un río: si frenas el flujo del agua se forma un pantano y si las emociones en cambio fluyen, seguirán su curso y tú estarás bien.
- ¿Afecta a la autoestima el no saber gestionar las emociones?
Afecta muchísimo porque es una forma de darse cuenta de que no te has construido a ti misma y por tanto no te quieres. Si tengo mis emociones como guía, me voy a querer y aunque los demás me digan cosas que puedan afectarme, tendré mi propio punto de vista y me puedo fiar de mí. Si unos padres hacen sentir mal a su hijo porque llora, ya que ellos le han enseñado que los hombres no hacen eso, esa persona se va a sentir culpable salvo que conecte con su vulnerabilidad y su punto de vista.
Si perdemos toda la información basaremos nuestra autoestima en la coraza que los demás proyectan sobre nosotros. Es solo un palo en el que apoyarme pero cuando te conoces a ti mismo hay otros palos donde apoyarse. Eres sensible en una cosa, alegre en otras… te vas creando algo real y solido que aunque te digan algo en lo que no estás de acuerdo, tú ya te conoces.
- ¿Existen 'trucos' para dominar nuestras emociones?
El truco está en no pensar en dominar las emociones porque estas no se dominan ni se controlan. Se aceptan y se gestionan. Controlarlas en sí mismo supone un problema en sí mismo. En mi libro ofrezco ejercicios para quienes en un momento determinado las emociones les sobrepasen.
Sí diría que hay que tener mucha autocompasión y no perder tiempo o energía peleando con las emociones. No vale la pena invertirlo. La autocompasión es una parte muy tierna para con nosotros mismos. ¿Qué necesito para pasar esto lo mejor posible? Hay que mirarse con amor y exigirse menos.
- ¿Qué pasa en esos momentos en los que no entendemos nuestras emociones?
Intentemos no encontrar la lógica de todo lo que nos pasa. Si hay una emoción es porque tiene sentido en tu historia y mundo interior y es importante . Puede llegar a ser desquiciaste porque alguien te ha dicho algo en broma y te dan ganas de llorar y es importante que si a ti eso te ha dolido es porque hay una herida o algo fisiológico y hormonal que ha cambiado, pero eliminar la idea de encontrar la lógica a lo que siento si no en lo siento y si vemos un patrón que me detonan ese tipo de sensaciones, indagar ahí. Si sentimos algo en concreto es válido aunque en ese momento no se sepa y luego sí. Siempre es por algo y el cuerpo no se equivoca.
-¿Qué consecuencias tiene no saber gestionarlas?
Implica todo. Si no sabes reconocer tus emociones no sabes construirte ni sabes quién eres ni lo que te hace bien. Vives de la inercia. Quienes salen de fiesta aun sin apetecerles si no gestionas esto vives desconectado de ti mismo siguiendo adelante dando por normales emociones que no son. Estas personas no se tratarán bien, estarán en relaciones que no les hacen bien e incluso vivirán con ansiedad. Si no sabes lo que sientes, no puede conocerte. Si no te conoces, no puedes quererte.
Sobre la autora
Raquel López es psicóloga y especialista en gestión emocional. Actualmente pasa consulta en Madrid y online, y sus redes, desde donde divulga conocimientos para una vida más plena, acumulan más de 115.000 seguidores.
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete