Cómo recomponerse ante la adversidad: tres meditaciones que sirven de guía

Aprender a dejar ir, a no aferrarte a lo que te daña y saber que tienes la capacidad de construir nuevas rutas, nuevas decisiones y nuevas respuestas mucho más saludables.

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Belén Colomina

La psicóloga Belén Colomina, experta en mindfulness, explica en esta sesión de meditación guiada cómo mejorar nuestro discurso interno para poner en valor nuestros puntos fuertes

En estas tres sesiones de meditación te invito a seguir un camino que te lleve a recomponerte ante la adversidad.

El enfado nos hace experimentar una sensación de disgusto y malestar cuando algo no ha sido de nuestro agrado o cuando sentimos que algo nos ha dañado o nos frustra. Es algo común, sin embargo, muchas veces no permitimos que se diluya el malestar sino que lo perpetuamos y enroscamos en nuestra mente en un bucle de pensamientos negativos. Y con ello, inevitablemente, tensamos nuestro cuerpo y permitimos que el residuo de malestar se quede en nosotros.

En esta meditación aprendemos a identificar las necesidades que han quedado insatisfechas y a soltar las tensiones de nuestro cuerpo para desactivar el enfado.

¿Cuántos hábitos ya no son funcionales ni deseados para esta etapa en tu vida? ¿Cuántas situaciones inconclusas sigues rumiando en tu cabeza, dejando que la tensión de estas permanezca en tu cuerpo? O ¿cuántas relaciones que ya no te satisfacen mantienes sin darte cuenta de que ya no te aportan nada?

Identificar todo aquello que te carga, que te pesa y que no tiene la funcionalidad deseada para tu presente, es tan importante como aprender a soltarlo. Y en la meditación guiada de esta semana entrenamos, desde la calma mental, el poder soltar lastre.

Quizá puede parecer un tópico, pero la realidad es que necesitamos establecer nuevos objetivos para sentir que avanzamos en la dirección deseada. A veces, imaginamos que se cumplirán solos, que con el paso del tiempo iremos consiguiendo nuestros sueños y metas pero, tal y como la vida nos va mostrando, la realidad es bien distinta. Cada objetivo que nos marcamos requiere de un tiempo para contemplarlo, definirlo, temporalizarlo y trabajarlo.

A veces no es fácil detectar la necesidad que queremos cubrir con estos propósitos, ni aterrizarlos a nuestro día a día, en esta meditación guiada te invito a contemplarlos, crearlos y sobre todo, sentir que en este nuevo inicio te acompañas, sin exigencias, sino desde el respeto y compromiso por crear tu propio camino.