Así es vivir con diabetes y ser deportista de élite

Entrevista a Víctor Vázquez, campeón de España de powerlifting y paciente con diabetes tipo 1

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Desconozco si existe una fecha concreta en la que eso del 'día mundial de…' se puso tan de moda. Los hay de todo tipo, desde los absurdos a los realmente importantes. El 14 de noviembre se celebra uno de los que merece la pena ocuparse: ... el día mundial de la diabetes, una enfermedad cuya prevalencia en España tiene la segunda tasa más alta de Europa y afecta ya a uno de cada siete adultos. El gasto sanitario relacionado con ella supera los 15.000 millones de Euros. Una auténtica fortuna y un dato estremecedor cuando, además, se estima que casi un tercio de los pacientes que la sufren no la tienen diagnosticada, lo cual puede causar complicaciones graves y potencialmente mortales al no ser tratada adecuadamente.

Pero dentro de este universo de malas noticias hay historias que llaman a la esperanza y al optimismo, como la de Víctor Vázquez, granadino nacido el 10 de junio de 1995, seis veces campeón de España de powerlifting a pesar de su diabetes tipo I diagnosticada cuando tenía tan solo 14 años. La pasión de Víctor por su deporte trasciende la competición ya que intenta divulgar siempre que puede sobre su enfermedad y es docente y formador de futuros entrenadores en la academia Fit Generation. Este es su testimonio, si conoces a alguien con diabetes, esto te interesa:

Alfonso M. Arce: Víctor, supongo que esto nadie se lo espera ¿no?

Víctor Vázquez: Pues no. Yo no tenía ningún antecedente en mi familia, la diabetes era totalmente desconocida en mi casa y a los 14 años me la diagnosticaron de repente al hacerme una analítica tras una mononucleosis que acababa de pasar. Así, sin más.

Alfonso M. Arce: ¿Te cambió mucho la vida?

Víctor Vázquez: Yo soñaba con ser profesor de educación física, pero mi deporte en un primer momento fue el baloncesto. Al irrumpir la diabetes en mi vida al principio el descontrol fue total porque estás en un territorio desconocido, te empiezan a dar hipoglucemias, tardas en habituarte, más en el caso del baloncesto cuyos entrenamientos un día son mucho más exigentes físicamente y otros pasan a tener un componente más técnico y a duras penas trotas un poco. Con esas diferencias yo notaba que era muy difícil ajustar mi vida.

Alfonso M. Arce: ¿En ningún momento te planteaste parar de hacer ejercicio?

Víctor Vázquez: No, como te decía ya tenía claro que quería dedicarme al deporte y de hecho ya estudiaba sobre el tema acudiendo a cualquier fuente que tenía a mi alcance e intentando aplicarlo a mis preparaciones físicas para el baloncesto. Recuerdo un verano en bachillerato que me decidí a apuntarme a un gimnasio para hacer entrenamiento más específico. Tuve que ir con mi padre porque me tenía que autorizar él para poder acceder.

Alfonso M. Arce: ¿A nadie de tu familia le asustaba?

Víctor Vázquez: La verdad que no, que siempre me apoyaban porque mi madre al ser deporte lo veía como algo sano. Ahí tuve suerte.

Alfonso M. Arce: ¿Y los médicos?

Víctor Vázquez: Ahí fue distinto porque poco a poco fui tomando conciencia de la importancia de la proteína de cara a ganar masa muscular, así que fui a hablar con mi endocrina, que era quien llevaba el control de mi dieta y demás. Recuerdo que tenía revisión con ella y le comenté que quería aumentar mi consumo de proteína porque había empezado a ir al gimnasio. Su respuesta fue tajante, me dijo que yo era diabético y que me olvidara de eso de ganar masa muscular, que eso no era para mí, que lo que tenía que hacer era salir a trotar, o hacer algo de natación, pero que eso del deporte de fuerza no era para mí. Salí de allí impactado porque además me dijo una frase que no se me olvidará nunca y fue «a ver si tú te crees que eres Schwarzenegger».

SU PRIMERA ENDOCRINA

«Me dijo una frase que no se me olvidará nunca y fue ‘a ver si tú te crees que eres Schwarzenegger’».

Víctor Vázquez

Seis veces campeón nacional de powerlifting

Pese a ser muy joven aquello no me encajó para nada y pedí a mi madre cambiar de médico. Así hicimos y el nuevo me dijo «mira Víctor, tienes que hacerte a la idea de que vas a ser diabético toda la vida, así que tienes que aprender a adaptar tu vida a la diabetes y que te limite lo menos posible». Y eso es lo que hice. Empecé a comer más y adapté mis necesidades a la insulina. Pronto descubrí que, a diferencia del baloncesto, en el gimnasio sí podía llevar un control total de mis entrenamientos.

Alfonso M. Arce: Pero ¿habías empezado con el powerlifting?

Víctor Vázquez: ¡Qué va! Si me hubieses preguntado en ese momento ni sabría a qué te referías. Yo hacía el típico entrenamiento de gimnasio como el de cualquier persona que quiere ganar algo de masa muscular, de hecho yo mantenía mi idea inicial de entrenar para mejorar en el baloncesto. La cuestión es que pronto empecé a ver que controlaba muy bien la diabetes y encima se me daba bien, por lo que decidí que dejaba el baloncesto y le dije a mi madre que iba a entrenar en el gimnasio. Y ahí empezó todo, descubrí un mundo que me encantaba, se me daba bien y disfrutaba aprendiendo y formándome sobre todo lo que tenía relación. Cuando empecé la carrera recuerdo que yo ya hacía de entrenador de algunos compañeros, ya sabía que me quería dedicar a ello. Siempre digo que la diabetes ha sido quien me ha llevado donde estoy.

Alfonso M. Arce: Los powerlifters sois gente grande, que necesita comer mucho y bien ¿Ha supuesto esto alguna dificultad?

Víctor Vázquez: Soy muy disciplinado en general y eso es el mayor aliado contra la diabetes. En el caso del deporte todavía más, tengo un control enorme sobre mi glucemia y precisamente cuando tengo una semana de vacaciones y altero esa rutina es cuando vienen los problemas, pero mientras me ciña a sota caballo y rey, la glucemia está controlada. Siempre he estado muy abierto a analizar lo que pasaba con mi cuerpo y tengo muy claro que ciertos gramos de comida requieren cierta cantidad de insulina para estar estabilizado, eso me ha permitido ir ganando masa muscular poco a poco. Yo debuto en competición en 2015 pesando 88 kilos, actualmente peso 120. Me preguntan muchas veces si la diabetes me limita, mira, no lo sé, pero es que no quiero pararme a pensarlo, porque tampoco me va a servir de nada. Mi realidad es que la progresión ha sido buena deportivamente y mi salud y mi diabetes están bajo control.

Víctor en plena competición

Alfonso M. Arce: ¿Cómo es una semana normal en tu vida?

Víctor Vázquez: A nivel de entrenamiento depende mucho del momento de la temporada en el que esté, a nivel alimentación sin embargo soy siempre muy constante y sin variaciones. Ahora mismo que estoy empezando a preparar el campeonato de Europa de la temporada que viene y empiezo a incorporar sesiones dobles diarias. Para empezar, cuando me levanto, salgo a dar un paseo tranquilo y hago una sesión de movilidad que no la cuento dentro del programa de entrenamiento, porque esa es básica para mí. Durante el día hago cuatro o cinco comidas en las que distribuyo entre cuatro y cinco mil calorías. Mis entrenamientos son de lunes a sábado, el domingo siempre descanso. Si entreno dos veces, los días de doble sesión suelen ser lunes, miércoles y viernes y los martes jueves y sábado de una. Justo ahora mismo estamos hablando en una semana en la que solo voy a hacer una sesión todos los días de lunes a sábado. La duración del entrenamiento suele ser de dos horas mínimo a cuatro máximo los días de doble sesión

Alfonso M. Arce: No sé si sigues con el mismo médico ¿Qué te dice cuanto entra por la puerta un tipo de 120kilos? ¿Está cambiando la relación de la medicina con el deporte?

Víctor Vázquez: Sigo con mi médico y cada vez que me ve se sorprende, pero tengo la suerte de que me da una libertad total, por supuesto que lleva mis analíticas, mi controles, vemos que todo está bajo control pero poco más. Yo soy una persona que me ofrezco siempre a ayudar a cualquiera que lo necesite con el problema de la diabetes, he participado en congresos y hago todo lo que yo puedo contando mi experiencia. Nunca he querido especializar mi formación ni hacer negocio basado en la diabetes, yo me dedico a otra cosa, pero sí que siento cierto deber de ayudar con mi experiencia. Mucha gente me escribe para preguntarme y siempre les cuento lo que yo he vivido. Veo que todavía sigue pasando que se le habla al diabético como si su relación con la actividad física debe estar entre algodones, afortunadamente pasa cada vez menos. Me parece un poco loco que a día de hoy todavía tengamos que estar peleando para dar a conocer los beneficios del entrenamiento de intensidad a la hora de vivir con la diabetes. Ser diabético no significa que no puedas llegar a algo, hay deportistas de altísimo nivel y grandes logros en disciplinas muy diferentes, no soy un caso aislado. Yo en ningún momento lo he victimizado, me ha tocado esto como me podría haber tocado otra cosa.

Alfonso M. Arce: Es importante eso que has dicho, que te ha tocado, eso es así con la diabetes tipo I, pero la diabetes tipo II suele ser algo que no te toca, sino que más bien se la gana uno con sus hábitos. Tú, que no has podido elegir, ¿no alucinas con esto?

Víctor Vázquez: Siempre que hablo de diabetes de manera inconsciente hablo de la de tipo uno porque es la que tengo yo, y es sobre la que me suelen preguntar también. Es la más frustrante porque te viene de un día para otro sin haber hecho nada para ganártela. Con la diabetes tipo dos a mí me explota la cabeza. Mi mujer ha trabajado en un supermercado y muchos días llegaba a casa asustada tras haber visto el contenido de los carros de la compra y la cantidad tan enorme de comida basura que se consume. Eso para nosotros, como te puedes imaginar, es inconcebible, además en mi casa siempre se ha comido bien, antes y después de ser diabético. Hay hábitos alimenticios que son una barbaridad, sobre todo cuando se sabe perfectamente las consecuencias que tienen.

Con el tema del deporte, pues lo mismo. El deporte de fuerza es un gran aliado para luchar contra la diabetes, contra problemas cardiovasculares, contra problemas de densidad ósea entre muchos otros. Se sabe que es una medicina que está al acceso de todo el mundo y todavía tenemos que escuchar a gente que le tiene miedo, o que le pone pegas, o que si este mito, o aquel otro. Me parece absolutamente sorprendente.

Alfonso M. Arce: Para acabar ¿te has puesto algún límite o alguna meta concreta a conseguir?

Víctor Vázquez: Entrenar me encanta. Cojo cada entrenamiento con muchas ganas, lo disfruto, así que no me pongo ningún límite porque amo lo que hago. Yo me veo compitiendo en edades master, por encima de cuarenta o cincuenta, creo que seguiré siendo competitivo y es que me encanta, me encuentro muy bien físicamente. Obviamente me pongo objetivos, este año hemos estado en el top 5 mundial y quiero estar ahí la próxima temporada e intentar renovar el campeonato de España. Tengo 28 años y las edades buenas para mi deporte son los treinta y tantos así que queda Víctor para rato.

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