La discoteca 'healthy' en la que se pueden quemar hasta 700 calorías por sesión
La fusión del 'indoor cycling' con los ejercicios de fuerza y el coach motivacional que proponen en Lapso Studios pretende aportar un paréntesis de fitness en la frenética vida urbana
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Iniciar sesiónSe buscan fórmulas imaginativas, enriquecidas, originales y energizantes para enganchar a todas aquellas personas dispuestas a convertir la práctica de ejercicio en un hábito. Los aficionados al fitness urbano son cada vez más exigentes y ya no solo importa lo que se hace, ... sino cómo, en qué contexto, para qué y de qué manera puede contribuir a ser un paréntesis en la frenética vida de la ciudad. Por eso, consciente de esta necesidad y de las dinámicas imperantes en la búsqueda de nuevos estímulos, la experta en fitness, Eugenia Llopart, fundó en 2021 en Barcelona junto a otros tres socios Lapso Studios, una modalidad deportiva 'indoor cycling' que combina la actividad física de alta intensidad en la bicicleta con el baile, la fuerza (con ejercicios de tronco superior que se realizan con mancuernas), la resistencia y el coaching. «Hemos querido crear con ello una experiencia 360º en la que la música sea una de las grandes protagonistas pues la práctica de los distintos estímulos físicos también se sincroniza con la música", revela. Así, con cada una de las 12 canciones que forman parte de cada clase de unos 45 minutos se trabaja una dinámica que conecta con la velocidad y los ritmos de la música, desde el 'warm up' o calentamiento hasta la recuperación activa, pasando por la activación intensa y después moderada. Esto, según explica Llopart, ayuda a conectar a nivel emocional y a despertar el potencial de los participantes en la clase.
Otra de las claves de esta disciplina reside en crear un entorno atractivo con una sala insonorizada en la que no hay mediciones ni pantallas ni relojes. «Lo que perseguimos con esto es que los participantes se centren en su cuerpo y en sus sensaciones. Si mides constantemente cuestiones relacionadas con la práctica es probable que todos nos situemos en el mismo lugar y lo que queremos es que cada uno se marque sus mínimos y sus metas. Puedes contagiarte con la energía de la persona de al lado o incluso de la de todo el grupo, pero no necesitas comparar tus números», aclara la CEO de Lapso Studios.
La idea, además, según comenta Llopart, es que los participantes se sientan en algo así como una «discoteca healthy« en la que puedan disfrutar de un ambiente de festividad y ocio que les aporte el impulso necesario para concentrarse en el esfuerzo que requiere la práctica. »Buscamos ofrecer una alternativa al típico espacio deportivo, con un coach que te marca y una música cañera que te acompaña. Queremos ser sinónimo de bienestar, desconexión y gestión emocional. Somos la vía de escape y lo que necesitas para pasártelo bien mientras haces deporte«, explica Llopart. Y para ello no sólo se trabaja con la música, sino también con los cambios en la iluminación y con la motivación a través de las diferentes energías que va transmitiendo el coach de cada sesión.
Además de ofrecer ese componente festivo la cofundadora de Lapso Studios asegura que también han medido su eficacia pues en cada clase, según calcula, se pueden llegar a quemar hasta 700 calorías por sesión, dependiendo de las características del usuario.
La sesión de Lapso, de unos 45 minutos, se divide en un total de doce canciones, pero el climax se alcanza en la undécima (eleven song). Es el momento del 'rider' o participante para parar y reflexionar sobre lo que le haya aportado valor en el día.
Tal como explica la cofundadora, a través de estas dinámicas creen que se puede impulsar un cambio de mentalidad en el tipo de consumo de fitness en España que, según manifiesta, está cada vez más enfocado a disfrutar de una experiencia individualizada y especializada, en un entorno acogedor, sin incurrir en «cuotas». No en vano aseguran que les gustaría convertirse en el primer «no-gym» que viva de la pasión y las ganas de la gente que asiste.
El nombre de esta dinámica viene precisamente de ese concepto, de ese paréntesis o ese lapso, en la ajetreada vida urbana. Tanto es así que la cofundadora del concepto explica que todo aquel que acuda al centro puede ir «ligero de equipaje» pues allí se les proporciona gran parte de las cosas que necesitarán tras la práctica como son las toallas, las amenities (champú, gel, crema...) o las zapatillas. «Queremos ser un 'break' en esta vida de locos que llevamos todos para desconectar del ruido urbano y conectar con uno mismo y con la comunidad que intentamos generar», confiesa Llopart.
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