«La interpretación de la etiqueta de un suplemento de proteína es la misma que cualquier otro alimento, cuantos menos ingredientes mejor»
Entrevista al divulgador y formulador de suplementos Adrián Díaz Rúa
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Iniciar sesiónPese a que ya se pueden considerar como productos de gran consumo, los batidos de proteínas siguen teniendo mala fama, especialmente entre aquellas personas que los asocian a la práctica del culturismo y a unos efectos y daños colaterales que son más propios de productos ... farmacológicos prohibidos que de cualquier suplemento. Para desmitificar el contenido de la proteína en polvo hoy contamos con un experto en la materia, Adrián Díaz Rúa (@adriandiazrua), licenciado en Ciencias del Mar y Doctor en fisiología animal, formulador de suplementos para la compañía Big Suplementación, profesor en la academia Fit Generation y divulgador en redes sobre la materia. Esto es lo que nos contó:
¿Cómo acaba alguien dedicándose a la formulación de suplementos? ¿Fue algo accidental o deseado?
Pues como casi todo el mundo, cuando empecé a hacer ejercicio de jovencito buscaba la píldora mágica y eso no existe. Me encantaba leer y estudiar todo aquello que se publicaba sobre suplementación, al final te pueden ayudar en uno u otro sentido pero no hacen milagros. Yo estudié Ciencias del Mar y no paraba de hacer comentarios y anotaciones a mi profesor de la asignatura de alimentación y nutrición animal, así que me ofreció hacer con él el doctorado.
A finales de 2019 entraron las redes sociales en mi vida porque un conocido me dijo que debería empezar a divulgar mis conocimientos. Decidí ponerme un poco más serio y comunicar pensando en dar la información tal y como a mí me gustaba encontrarla, con datos referenciados y contrastados, no porque lo digo yo. En 2020 empecé a colaborar con Cultura de Gym. Justo por esa época el YouTuber Pico de Oro pidió ayuda para interpretar los resultados de unas analíticas que hizo, yo lo hice desinteresadamente y empecé a hacer reviews de sus vídeos ampliando la información que daba, o matizando cosas. Esto provocó que otras personas me escribiesen pidiéndome revisiones de los suplementos que tomaban. Poco a poco fui aumentando mi alcance pasé de tener en enero seiscientos seguidores a diez mil en septiembre.
¿No surgió la tentación de acabar como 'influencer'?
Varias empresas se pusieron en contacto conmigo para colaborar con ellos de esta manera, pero yo quería trabajar desde dentro del sector, ser formulador de suplementos. Surgió la oportunidad de trabajar en Big Suplementación. En un primer momento mi colaboración iba a ser en dos o tres suplementos, pero ya llevo formulados a mi nombre unos veinte. Durante un tiempo combiné todo, la docencia y la investigación en mi facultad, llevar mis redes sociales y mi tarea como formulador de Big. Literalmente no me daba la vida, en noviembre de 2021 finalicé mi tesis y me dediqué de lleno a mis redes y a mi labor como formulador en Big.
Vale, te voy a describir una situación bastante típica. Soy padre de un chaval que entra un día por la puerta de casa con un bote lleno de polvo y un culturista en la etiqueta, por supuesto ya tengo la sensación de que mi hijo está dando sus primeros pasos en el consumo de anabolizantes ¿Cómo puedes quitarme esa idea de la cabeza?
Esto es una situación real que se vive en muchas casas. Lo primero que hay que entender es que ninguna empresa quiere arruinarse, ni por la multa tremenda a la que se expone ni por incluir en un bote de proteínas cualquier sustancia dopante cuyo coste puede rondar entre los mil y dos mil Euros el kilo, frente a una materia prima, el suero de leche, que en origen te puede costar entre quince y veinte Euros el kilo. La práctica que sí que ocurre es la contraria, la de abaratar incluyendo ingredientes como los hidratos, o hacer lo que se denomina el el Amino-Spiking, que es añadir aminoácidos baratos en forma libre con el fin de aumentar el ratio de proteína total pero disminuyendo la cantidad de proteína de suero de leche.
También hay que tener en cuenta que la mayoría de las sustancias dopantes no tienen efectividad por vía oral. Si por ejemplo te tomas testosterona por vía oral el efecto será prácticamente nulo, por eso la mayoría de los anabolizantes se consumen por vía intravenosa. Aunque existan ciertos esteroides de consumo oral, sería inviable económicamente introducirlos en un bote de proteínas con un precio normal.
A pesar de estos argumentos estos botes se siguen viendo como algo muy artificial. Un ataque típico es decir eso de que 'es química pura'
Creo que esto es algo que ha ocurrido por las fotos de culturistas de gran volumen que muchas marcas han utilizado durante años. Esto te lleva a pensar en fármacos porque evidentemente son físicos que no son alcanzables de manera natural. La mayoría de la proteína del mercado, la proteína de suero de leche o 'whey', no es otra cosa que eso un polvo extraído del suero de la leche que es un líquido que se obtiene cuando se fabrica el queso. Tiene un color amarillo, un olor un poco desagradable y sabor amargo. El supuesto proceso químico del que se habla es simplemente filtrarlo y secarlo para obtener un polvo como cualquier sustancia que podamos liofilizar. Añadimos un aroma y sabor y ya tenemos nuestro batido de proteína en polvo. Sería lo mismo que decir que hay química en sacar el aceite a la aceituna o en la fermentación para hacer yogures.
El suero de leche se utiliza en la industria de la alimentación para dar textura a muchos alimentos. Por ejemplo en pastelería se usa bastante. No hablamos más que de un deshecho lácteo que hace muchos años no se utilizaba hasta, que se descubrió que contenía una proteína de muy alta calidad a la que se podía dar muchos fines. Realmente no debería entenderse como un suplemento, sino como un alimento más. Al igual que tienes claras de huevo, que es una parte del huevo, pues el suero de leche es una parte de la leche. Nada más.
Hay marcas que incluyen un sello de garantía que indica que el producto no está contaminado con ninguna sustancia dopante ¿no es esto sospechoso?
Hay marcas que tienen ciertas certificaciones que garantizan que están libres de sustancias dopantes. Básicamente esto son estrategias de autocontrol y auditoría. Contratan a empresas externas para que sean ellas las que, tras un análisis, certifiquen que esto es así. Hay diferentes certificados, a mí me parece respetable, pero si un atleta de élite se preocupa hasta ese punto también debería tener el mismo cuidado con la alimentación que consume porque, aunque no es fácil, también puede haber alguna sustancia dopante en la alimentación. Todos recordamos el famoso caso del clembuterol de la carne consumida por Alberto Contador. A ver, realmente es muy muy complicado que puedas contaminarte con cualquier sustancia dopante que se encuentre de manera residual en tu alimentación, es una posibilidad tan sumamente baja que creo que no tiene sentido.
Es verdad que a principios del año 2000 sí había algunos productos que contenían sustancias pro hormonales, en aquel momento estaban autorizados, hoy en día se consideran sustancias dopantes, se prohibieron en 2004. Hace poco Julio Basulto compartió un artículo de 2017 con un análisis que afirmaba que entre el 12 y el 58% de los suplementos contenían sustancias dopantes. Este dato es muy elevado, pero claro eran estudios con datos anteriores al momento en el que las sustancias fueron prohibidas. Al margen de esto, hay algunas anfetaminas cuya venta sí que está permitida en Estados Unidos o Méjico, por poner dos ejemplos, podrías importar estos productos pero darías positivo por consumo de una sustancia que aquí sí que está prohibida.
¿Y los controles del Ministerio de Sanidad?
Eso también. Para tranquilidad de todos hay que decir que los controles de Sanidad con cualquier suplemento son muy rigurosos. Aquí a la mínima que pase algo te paralizan la venta. Si yo por ejemplo formulara un suplemento y una persona acaba en urgencias y dice que le ha sentado mal mi suplemento, antes incluso de analizarlo lo que hacen es emitir una alerta sanitaria paralizando la venta del mismo, hasta que se resuelva y se compruebe si ha tenido algo que ver en el estado del paciente. Si luego corroboran que algo de este producto ha sido el causante del problema, pues viene la retirada del mismo y la multa correspondiente. No es ninguna broma. Ninguna marca seria y legal se va a exponer a estos riesgos.
Cómo intervienen esos controles a la hora de fabricar un suplemento
Aquí en España para sacar un suplemento lo primero es que tienes que tener licencia para hacerlo, luego debes registrar ese producto y para ello todos los ingredientes y las dosis de los mismos tienen que estar bien indicadas, y tienen que estar permitidas. Puede haber legislación que cambie y que algunas sustancias pasen de permitidas a prohibidas o al revés. Por ejemplo el 5HTP (5 hidroxitriptófano) es un suplemento con diferentes estudios que muestran su efectividad a nivel de aumento de serotonina y después de melatonina, provocando un efecto relajante que mejora el estado de ansiedad y bienestar en general. Como tiene bastante efecto comparado con los antidepresivos, pues lo han catalogado como novel food y por desgracia no se puede utilizar.
La agencia del medicamento limita mucho las sustancias que tienen un beneficio potencial importante. Por ejemplo, dentro de los antidepresivos los medicamentos más empleados son los inhibidores de la recaptación de serotonina, los llamados ISRS, que lo que hacen básicamente es inhibir la recaptación de serotonina en tu cerebro lo que hace aumentar sus niveles. El suplemento de 5HTP como decíamos es un precursor que aumenta los niveles de serotonina de manera natural… pues esta sustancia la han capado para que no pueda incluirse. Ahora mismo es tremendamente difícil colar nada que no cumpla con las sustancias ni con las dosis, por ejemplo no puedes meter en un pre entrenamiento ningún producto que contenga más de 300 miligramos de cafeína por servicio, que luego quieres tomarte dos servicios o diez es responsabilidad tuya, pero en la formulación no puedes pasar esos límites. Si lo intentas no te dejan sacarlo a la venta y si lo haces y te pillan van a por todos los intervinientes en la cadena de producción y venta.
Me has convencido, pero ahora quiero asegurarme de que compro una buena proteína ¿en qué debo fijarme?
Primero lo más importante es saber el tipo de proteína que queremos comprar, la más común y de mayor calidad es la de suero de leche como hemos dicho antes o 'whey'. La hay concentrada, aislada e hidrolizada. Con precio ascendente por ese orden. Las tres son perfectamente válidas, la concentrada contiene algo más de hidratos y tiene lactosa, la aislada tiene tan poca lactosa que prácticamente todas las personas que tienen intolerancia a la lactosa pueden consumirla sin problemas.
Lo que debemos mirar son los ingredientes. La interpretación de la etiqueta de un suplemento de proteína es la misma que cualquier otro alimento: cuantos menos ingredientes mejor. Un suplemento de proteína debe tener un tipo de proteína, el aroma y el edulcorante ¿Pueden tener algo más? Es normal que tengan algún espesante que supondría en torno a un 1% del producto, no más. Si es de sabor a chocolate pues es normal que contenga cacao, pero eso sería todo.
A muchas empresas de suplementación para abaratar costes meten como segundos ingredientes algún aminoácido con Glicina, Glutamina, Taurina, BCAAS, Creatina, Citrulina etc. He visto de todo. Cualquier extra de estos que además les valga como excusa para un eslogan comercial del tipo 'enriquecido con…' realmente lo que está haciendo es restar cantidad del ingrediente principal y de más calidad.
Otro tipo de engaño es el de restar proteína y meter maltodextrina que es un hidrato de carbono que le da un toque más dulce a la proteína. Sale un producto de mejor sabor y que es más barato.
Ahora que mencionas el asunto de los sabores ¿afecta la búsqueda de un mejor sabor o textura a la calidad real del producto?
A mayor cantidad de hidratos, más agradable al paladar será ese producto, pero menos porcentaje de proteína por servicio. Eso es así de simple. Otra opción de mejora en términos de sabor es meter un poco más de aroma, el problema aquí es que los buenos aromas son carísimos. Un kilo de aroma dependiendo del que escojas puede valer entre mil y tres mil euros el kilo, de ahí que se añada realmente poco. Hay aromas buenísimos, en Big hemos lanzado proteína con sabor Lacasitos, Cacaolat y a Conguitos que están increíbles y el secreto está en el aroma.
Los edulcorantes también favorecen mucho el sabor pero la cantidad máxima que puedes utilizar también está limitada por ley, no puedes añadir todo lo que quieras.
Si buscas el producto más puro optaría por sabores de vainilla y chocolate blanco porque llevan el producto y un poquito de aroma y el edulcorante mínimo. Los sabores chocolateados al añadir el cacao suelen reducir como mínimo un 5% de proteína. De hecho aquí hay una trampa en algunos etiquetados, hay marcas que utilizan el mismo para todos los sabores de un producto y puede haber diferencias considerables del porcentaje de proteína entre uno u otro sabor.
Tras todas tus explicaciones queda claro que el producto se basa en una buena materia prima y poco más ¿Hay margen para el I+D en suplementos de proteínas?
El mercado crece sobre todo en productos funcionales, es decir productos que estén enriquecidos con proteína. Cualquier supermercado tiene ya una oferta enorme de alimentos enriquecidos con proteína. El gran consumo ha traído una ampliación enorme de la oferta. Yogures, panes, leche, harinas, helados. A nivel de batidos no hay una innovación tremenda desde hace un año y medio o dos, empresas como Big lo que están haciendo es llegar a acuerdos de cobranding con empresas de gran consumo como las mencionadas antes y la empresa de suplementación logra un producto de proteínas con un sabor súper diferenciador.
Hace tres años se me ocurrió una idea para intentar mejorar el perfil de aminoácidos de las proteínas veganas. Comparé dicho perfil con el de la proteína de suero y añadimos los aminoácidos de forma estratégica para que se aproximara lo más posible a la proteína animal. Esto me llevó a formular en 2020 el producto Real Vegan Amino Plus, al que añadí un 10% de los aminoácidos que menos cantidad tenían respecto a la proteína de suero. Este es un ejemplo claro de innovación mejorando la calidad del producto final.
A nivel de formulación ahora están poniéndose de moda, sobre todo de cara a las épocas del año más calurosas, las proteínas denominadas 'Clear' que tienen una textura más acuosa, menos láctea y es agradable para muchas personas por su mayor parecido a un refresco.
Donde más innovación hay es en suplementos enfocados a objetivos muy específicos, como formulaciones que tengan efectos positivos en el descanso, en la concentración, en la recuperación, ansiedad, apetito sexual, en la caída del pelo, pre entrenamientos, intra entrenamiento etc. De cualquier manera debe quedar claro que no hay absolutamente nada que tenga los efectos y los beneficios que se obtienen del ejercicio, eso que lo tenga en cuenta todo el mundo.
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