Fitness y psicología
Por qué ya va siendo hora de que vuelvas al gimnasio
Retomar nuestra rutina deportiva es un vehículo para poder sentir que volvemos a la «normalidad»
Aunque la «nueva normalidad» ya sea tan «normal» que hasta el término nos chirríe un poco, es imposible ignorar el hecho de que, por mucho que nos esforcemos en ello, nuestra vida no es igual que lo era antes. Pero, como ya sabemos que el ... ser humano tiene una fortaleza casi «sobrehumana», aunque con los escollos que nos va poniendo el día a día —que no son pocos este año—, seguimos avanzando contra viento y marea para seguir con nuestra vida, de la mejor manera posible.
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Dentro de esta adquisición de esta normalidad, hay un elemento que juega un papel clave, por no decir «el» papel clave: las rutinas . Y es que, aunque a veces las despreciemos desde el más total de los aburrimientos, son las rutinas los patrones que nos permiten llevar una vida mínimamente ordenada y no tan caótica. Por ello, tras el confinamiento, cuando la vida se paró durante tres meses y tuvimos que crear nuevos hábitos para «sobrevivir», volvimos a salir a la calle, y, enfrentándonos a un nuevo paradigma, adquirir nuevos hábitos, y rutinas.
Recuperar las rutinas
Por ello es tan importante intentar replicar aquello que hacíamos antes son la mayor normalidad posible. Ir a una terraza con amigos, aunque ahora suponga mantener una distancia y tener siempre a mano un bote de gel de hidroalcohol; ir a cine, aunque ahora haya que hacerlo con la mascarilla puesta; o volver al gimnasio , una costumbre que para muchos es imprescindible en su vida. La psicóloga Laia Giménez Jori, colaboradora de David Lloyd Clubs, explica que, volver a actividades que antes nos eran comunes, como ir al gimnasio, es bueno ya que, en un «tiempo de descoloque» como el actual, volver al gimnasio es como «volver a arraigarse»; las personas necesitamos sentirnos seguras, y retomar estas rutinas nos ayuda.
También, la psicóloga habla de los beneficios concretos de elegir el gimnasio como una de las actividades de vuelta a la rutina, pues considera que es una « manera de canalizar emociones que nos ayudan después de la montaña rusa que hemos vivido», así como «una manera de pasar a la acción».
Vencer el miedo
Uno de los problemas que podemos encontrarnos es que sintamos miedo a volver a un lugar como el gimnasio . La psicóloga explica que, aunque el miedo puede tener un generador externo (en este caso, la infinita cantidad de noticias sobre la covid que recibimos a diario), muchas veces lo que sostiene el miedo son nuestras propias creencias y pensamientos. «Si hacemos que el miedo se mantenga, y además lo alimentamos viendo los telediarios, leyendo noticias a todas horas, este pánico va a terminar por limitar nuestra capacidad como personas para gestionar nuestros recursos», indica Gimémez Jori.
«Una manera de gestionar este miedo es apagar el interruptor: reconectar con el bienestar que nos producen las actividades que nos gustan, en este caso el ejercicio», explica. En el caso concreto del gimnasio, la profesional apunta que, la gestión del miedo también tiene que ver con nuestra prudencia. Por ello, es importante seguir todas las medidas de seguridad (mascarillas, lavado de manos...), así como asegurarnos que las instalaciones a las que acudimos cumple todas las medidas de protección y desinfección necesarias. «Después de "pasar a la acción" podemos sentir miedo, las estadísticas incluso dicen que una gran parte de la población va a tener que pasar la enfermedad, pero encerrarnos en casa y no salir es crear una ilusión de control que es falsa; eso alimenta el miedo», indica.
Las ventajas de entrenar en grupo
Por último, la psicóloga aborda la idea de entrenar, pero desde casa: «Cuando estamos solos, nos aislamos, y puede que hayamos pasado demasiado tiempo aislados; si vamos al gimnasio, participamos en clases , hay movimiento y buena energía ». Comenta la profesional que estar en grupo ayuda a nuestro estado de ánimo, y por ello hacer clases conjuntas (siempre con las medidas de seguridad necesarias) siempre es beneficioso, pero especialmente en una situación como esta.
Para terminar, Giménez Jori habla sobre el «daño» que puede hacernos quedarnos en casa: «Si normalmente nuestras zonas de comfort son nuestra casa, la casa de algún amigo, el gimnasio, nuestros lugares de ocio... durante la cuarentena esta se acotó únicamente a nuestra casa. Es normal que nos sintamos inseguros fuera pero, si seguimos en casa aumentamos nuestra sensación de miedo: estamos más seguros, pero también más aislados».