Más que agua: seis bebidas refrescantes para este verano que quitan la sed

Sin embargo, no estamos hablando de refrescos, vinos y cervezas que tanto nos apetecen cuando las temperaturas suben. Lo cierto es que Ana Núñez, dietista-nutricionista, alerta de que estas bebidas aquí mencionadas cuentan con una «alta cantidad de azúcar, por lo que su consumo continuado puede contribuir a aumentar las probabilidades de padecer enfermedades como sobrepeso, obesidad o diabetes tipo 2».

A lo que nos referimos es a esas bebidas saludables que nos quitan la sed y que no son dañinas para nuestra salud. Al contrario: al estar compuestas principalmente por agua, frutas y verduras, lo que hacen es que aportarnos vitaminas y minerales. En verano, que tenemos la sandía, melocotón, paraguaya, ciruela, albaricoque o melón como frutas de temporada, hay que sacarles el máximo provecho posible.

La mejor opción es hacer refrescos caseros y podemos usar como base agua o agua con gas, si nos gustan más las bebidas gaseosas. Para mantenerlas frías tenemos varias opciones: tenerlas en casa en la nevera, añadirles hielo muy picado o hacer hielos de sabores. Esta última opción, que cobra protagonismo a medida que avanzan los meses, es muy sencillo de realizar.

«En una cubitera pon agua y añade trocitos de fruta como frutos rojos, piña o mango, o en lugar de agua puedes poner té o la fruta licuada o triturada (sandía , melón o limón) con alguna hierba aromática fresca como menta , hierbabuena o romero, que le darán un toque muy sabroso a tu refresco», dice la dietista-nutricionista Ana Núñez. Y si te gustan los sabores exóticos, prueba a hacer tus cubitos de agua de coco con trocitos de piña.

Estas bebidas refrescantes además de estar deliciosas, ayudan a mantenernos frescos e hidratados bajo el sol abrasador de los meses de julio y agosto, principalmente. Todas ellas saludables que se pueden hacer en casa t Desde brebajes frutales hasta cócteles clásicos y opciones sin alcohol, nuestra selección de bebidas de verano satisface todos los gustos. La entrenadora personal Crys Dyaz comparte cuáles son sus favoritas:

1. Zumo de sandía. Tan solo tres ingredientes: sandía, limón y hielo. Corta en trozos media sandía, y viértelo en tu triturador junto con varios cubitos de hielo y el zumo de un limón hasta que se cree una mezcla homogénea. Si quieres una bebida antiinflamatoria, con pocas calorías, sabrosa y refrescante, esta es tu opción.

2. Aguas con sabores. La más sencilla de las opciones que te voy a proponer hoy. Tan fácil como preparar varias botellas de agua mineral y trozos de fruta cortada. Se trata de añadir los trozos de fruta al agua, y dejar que «suelte» el sabor. No necesita azúcares ni añadidos, y si eres de las que piensa que beber agua es aburrido, ya no lo será tanto. ¿Cuáles son mis favoritas? Kiwi, fresas, manzana, pepino con hierbabuena… ¡Un placer!

3. Smoothie verde. Hay infinitas recetas sobre este clásico de la salud, el batido verde. Es batido al mezclarse vegetales con frutas, y no lleva leche ni azúcares. Si quieres darle un toque más refrescante, utiliza agua de coco en sustitución del agua, y añádele los siguientes ingredientes: Una manzana verde, un pepino, el zumo de medio limón, un trozo de apio y otro de jengibre. ¡La salud en un vaso!

4. Agua con gas y mucho hielo. Otra propuesta que, aparentemente, simula el gin tonic sin tener que tomar alcohol ni bebidas azucaradas. Elige el agua con gas para esas ocasiones en las que prefieres tomar algo con más «chispa». Llena un vaso con hielo, añádele unas rodajas de limón para darle un toque cítrico y unas hojas de menta, hierbabuena, etc para el punto refrescante.

5. Smoothie de zanahoria. Si eres de las que les gusta broncearse, esta opción no sólo te ayudará a cuidarte sino también a coger ese tono bronceado, al ser rico en betacarotenos. ¿Qué necesitas? Una taza de agua, 3 zanahorias lavadas y peladas, una naranja sin piel, media manzana roja. Mezcla todo y añade más o menos agua si lo necesitas.

Y aunque las infusiones se toman calientes, existe la posibilidad de tomarlas frías gracias a Cupper.

Por ejemplo, bebida fría de limón y jengibre. Esta deliciosa mezcla naturalmente energizante, de limón fresco, el ligero sabor picante del jengibre y la cúrcuma le da un impulso al sistema inmunológico y es el compañero ideal para el calor.

Para ello no es necesario infusionar previamente en caliente. En 500 ml de agua fresca, introduce una bolsita de Cupper Cold y agita. Esperar 8 minutos y disfrutar.

La infusión preparada mantiene todas sus características durante 8 horas. Perfecta para llevarla en una botella reutilizable de cristal o de acero inoxidable para acompañarte en tu día de verano.