Qué hacer con la comida de la nevera si me voy de vacaciones

Así que toma nota porque este año no vas a desperdiciar más comida y no te tocará limpiar a fondo la nevera a la vuelta de las vacaciones porque lo vamos a dejar todo bien organizado.

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Elisa Escorihuela

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En primer lugar debes tener en cuenta que no hace falta tirar todos los alimentos que tienen fecha de consumo preferente y se han pasado de la misma. La fecha de consumo preferente hace referencia a la fecha en la cual los alimentos conservan todas sus propiedades nutricionales y organolépticas, pero eso no significa que no se puedan consumir, a no ser que veas claramente que se han estropeado por que han tomado otra tonalidad, cambiado de olor o el envase esté hinchado o dañado. Estos alimentos son: los yogures, conservas, frutos secos, chocolate, café o la miel. Pero recuerda, siempre deben estar cerrados, no guardes un yogur abierto.

Dependiendo del tipo de fruta y verdura y de su madurez podemos hacer varias cosas, ya que no todas se conservan de la misma manera.

Aquellas verduras que estén más maduras, la mejor alternativa para conservarlas va a ser cocinadas y luego las podemos congelar. Por ejemplo puedes hacer caldos, cremas de verduras sin patata o salteados y posteriormente congelarlos en porciones. Encima lo mejor de todo es que cuando llegues de vacaciones te las encontrarás hechas.

Si las verduras están en mejor estado puedes pelarlas, trocearlas y congelarlas en crudo.

De esta manera no tendrás que desperdiciarlas y te reducirán el tiempo de preparación de próximas recetas.

En cuanto a las frutas, para mi es una gran opción, pelarlas, trocearlas y congelar. Así a la vuelta de tu merecido descanso podrás preparar helados saludables, smoothies y batidos de lo más refrescantes y nutritivos.

Con las hierbas aromáticas puedes congelarlas tal cual, eso sí, que estén limpias. También puedes cortarlas y congelarlas para ir usando posteriormente a tu conveniencia. Pero mi manera favorita de aprovechar las hierbas aromáticas antes de que se estropeen es hacer aceites aromatizados, que una vez hechos, los congelo en una cubitera de hacer hielos y de esta manera luego puedo usar por porciones.

Las patatas y cebollas deben conservarse en un lugar fresco y seco. Si ves que alguna cebolla se está estropeando puedes pelarla y trocearla y congelar, que siempre viene bien tener la cebolla preparada para cualquier guiso, pero nunca congeles la patata.

En cuanto a las carnes y pescados, si algo nos va a quedar en la nevera, la mejor alternativa siempre será el congelado o cocinado y posterior congelado.

Los embutidos pueden durar más en la nevera, a no ser que te vayas a dar la vuelta al mundo y lo mismo va a pasar con los quesos curados.

Si tienes quesos más tiernos, puedes añadirlos a las cremas de verduras que vas a preparar y de esta manera las enriquecerán.

Siempre en nevera y en verano, aunque estés de vacaciones, mejor dejarlos siempre alejados de la puerta para que no sufran cambios de temperatura.

Y aunque no lo creas también puedes congelarlos, aunque luego la yema no queda igual. Eso sí, según la FDA debe de ser sin cáscara porque la yema puede expandirse y romper la cáscara, así que mejor congelarlos batidos.

Recuerda además que lo ideal es no comprar más días antes de irte de viaje, mejor utiliza los alimentos que tienes en la nevera y comprueba que la nevera cierra correctamente y está a la temperatura adecuada.

Siguiendo estos sencillos consejos evitarás desperdiciar alimentos y encima cuando llegues tendrás alguna que otra receta preparada esperándote en el congelador.

Puedes saber más de Elisa Escorihuela a través de su cuenta de Instagram: @eliescorihuela , su labor en el Centro de Nutrición Nutt y en su libro 'Dietoterapia'.