Nutrición
Qué es la polenta, cuáles son sus beneficios y cómo cocinarla
La polenta es uno de los alimentos que deberíamos priorizar dentro de nuestras elecciones culinarias habituales
Beneficios de la polenta.
¿Has oído hablar de la polenta ? Como ocurre en muchos casos, no es el ingrediente en sí sino que hace referencia a un plato o platos concretos originarios del norte de Italia, pero muy extendidos también en países de Latinoamérica.
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El ingrediente ... de la polenta realmente es la sémola de maíz , es decir, el grano de maíz desprovisto de su capa más externa (el pericardio) y molido, pero con cierto grosor, por lo que no puede ser considerado una harina. Mariana Álvarez, dietista-nutricionista, cuenta que como beneficios podemos hablar de que es «un cereal sin gluten, así que pueden tomarlos las personas con celiaquía o con sensibilidad no celiaca al gluten. Además, es un producto que por tener muy poco procesamiento, estaría dentro de los «alimentos que deberíamos priorizar dentro de nuestras elecciones habituales»; aporta una gran sensación de saciedad y es fuente de energía. También se cocina de forma rápida y es muy versátil así que podemos darle diferentes destinos o aplicaciones culinarias una vez preparada.
Cómo se cocina la polenta
La polenta o sémola de maíz se cocina muy fácilmente según la versión en la que la encontremos, que puede ser natural o precocida/instantánea. «Tardaremos más o menos tiempo respectivamente en función de una u otra. Además, la instantánea o precocida requiere menos agua a la hora de prepararla», dice Mariana Álvarez ( @malvareznutri ).
El procedimiento consiste en poner agua en el fuego. La proporción es más o menos de un litro de agua para unos 400 gramos de cereal, dependiendo de si se quiere más espeso o más jugoso . Otra variante, según la experta, es agregar leche al agua de cocción para darle un sabor más cremoso y agradable. Después, salar el agua o la mezcla de agua y leche cuando rompe el hervor, añadir la sémola poco a poco en forma de lluvia a la vez que removemos la preparación con una cuchara apta para los utensilios que estemos manejando. Bajar el fuego y mantener la cocción hasta que alcance la consistencia deseada sin dejar de remover.
Recuerda Mariana Álvarez que rectifiquemos de sal y agreguemos un rulo de mantequilla o un chorrito de aceite de oliva virgen extra, además de especias o hierbas que sean del agrado de los comensales (esto último es opcional).
A partir de aquí podemos darle muchas utilidades, tal como cuenta la nutricionista:
- Como guarnición.
- Como base de preparación agregando una salsa boloñesa , un rehogado de diferentes verduras con queso fundido o pollo, ternera, cerdo, etc
- Si conseguimos una consistencia más espesa se pueden hacer ñoquis que luego se sirven con diferentes salsas o bases de pizza.
- Podemos, con la polenta en consistencia más liquida, hacer 'palitos' o 'sticks' que los cocinamos luego al horno con aceite de oliva y tu mezcla de especias favorita. Estos. una vez dorados. se vuelven crujientes y muy sabrosos y a partir de allí podemos tomarlos como snacks o utilizarlos para dippear un hummus, etc.
-Se pueden preparar guisos y estofados
- Hay quien la utiliza también como ingrediente para la repostería casera.
Y te estarás preguntando que a qué sabe la polenta, ¿verdad? Al parecer, tiene un sabor muy suave y agradable... «Si agregamos lácteos como he mencionado antes adquiere una consistencia cremosa que admite todo tipo de condimentos, hierbas y especias», concluye Mariana Álvarez.