Nutrición
¿Es más sano tomar una naranja o un zumo de naranja cada día?
Al exprimir una naranja, perdemos la fibra de esta fruta, parte esencial para saciarnos y controlar nuestro colesterol
El zumo de naranja natural cumple una función de complemento
Un zumo de naranja recién exprimido es una de esas cosas que pocas veces se rechazan: ya sea desayunando, o para tomar entre comidas, es una bebida fresca y rica. Pero la oferta de zumos de naranja es amplísima, y hay que conocer ... las diferencias entre cada uno para poder elegir el más saludable.
La doctora Montse Folch, especialista en nutrición y dietética en Centro Médico Teknon y miembro de Top Doctors explica que, si hablamos de un zumo natural, hecho por nosotros, estamos ante frutas frescas, que son fuente de vitaminas, minerales y fibra . Por tanto, hablamos de un refresco muy nutritivo para el organismo.
Por otro lado, la profesional se refiere a lo zumos envasados, que podemos comprar en el súper: «Los zumos que se comercializan en botellas de cristal o en tetrabrik se elaboran con zumo concentrado. Este método consiste en evaporar el agua por medio del calor y añadirle de nuevo agua antes de su envasado. Todo ello comporta que las frutas con las que se elaboran estos zumos aporten menos vitaminas , eliminando por tanto un de sus principales nutrientes».
¿Zumos «100% natural»?
Aunque en el envase de un zumo veamos que es «natural 100%», la doctora advierte que estos no son lo mismo que un zumo que preparemos en casa. «Sí, estos zumos están hechos con frutas recién exprimidas, también con concentrados de frutas», dice, y continúa para explicar que, al extraer el zumo de la fruta, se evita que entre en contacto con el aire y se evapora parte del agua de dicho zumo. «Se envasa para preservarlo de la luz y evitar el contacto con el aire, pero, normalmente, también se le añaden azúcares », dice.
Por otro lado, deja un mensaje claro: «Un zumo de naranja natural nunca puede substituir a una fruta» . Esto es porque el zumo no aporta la fibra de la fruta, tan importante para nuestro organismo y que nos ayuda a controlar el nivel de colesterol en sangre, a prevenir el estreñimiento e incluso a sentirnos más saciados. «La función del zumo de naranja natural es más bien de tentempié o aperitivo», recuerda.
¿Sustituto de una naranja?
Asimismo, comenta que la diferencia clave entre el zumo y la pieza de fruta entera reside en el azúcar. «Al exprimir una naranja, el azúcar que aporta se transforma en azúcar de absorción rápida , por tanto no nos sentimos saciados. Si tomamos la fruta entera la fibra que aporta ayuda a mantener estable el nivel de azúcar en sangre durante más tiempo y nos cala el apetito», apunta la profesional.
Por último, menciona una buena opción si nos apetece tomar zumo, pero no queremos perder las propiedades de la fruta : preparar un batido o smoothie . «Este se elabora mezclando todos los ingredientes enteros en la batidora hasta convertirlos en pulpa y conservando la fibra», explica. Recomienda, si queremos que sea más cremoso, añadirle un yogur o leche, fuente esencial de proteínas. «El batido tiene una función de desayuno completo o postre», dice, y concluye con un recordatorio: «En cualquiera de los casos (zumo o smoothie ), no debemos abusar de las cantidades».