Día del Queso

Los beneficios del queso y cómo elegir el más saludable

El queso de Burgos, el ricotta, la mozzarella, el cottage, el Quark y el queso feta son las opciones menos grasas y con un aporte nutricional interesante de calcio y proteínas

El queso es uno de esos alimentos que levanta pasiones y que no acepta medias tintas. O lo amas o lo odias. Con más de 2.000 variedades en todo el mundo y 26 denominaciones de origen protegidas en España, no solo es ... apreciado por su sabor, sus diferentes texturas y sus posibilidades culinarias, sino también por su calidad nutricional.

Contiene proteínas de alto valor biológico y además su aporte es superior al de su materia prima, ques la leche. También destaca por su calcio, un mineral que ayuda a mantener sanos lo dientes y los huesos y al buen funcionamiento del sistema nervioso y muscular, según los expertos del Comité Científico de la Organización Interprofesional Láctea ( INLAC ). De hecho, una porción de 100 gramos de queso equivale al requerimiento diario de calcio de un adulto.

Rico en vitaminas A y D, que ayudan precisamente a absorber el calcio y con un buen aporte de vitaminas del grupo B, entre las que destaca la B12 , la B9 (ácido fólico), la B1 (tiamina) y la B2 (riboflavina).

En el otro lado de la balanza estarían los consejos en torno a su consumo moderado debido a su contenido de grasa o el hecho de que sea un alimento que se estropea con una cierta facilidad.

Queso fresco de Burgos.

Cómo elegir el queso más saludable

Lo primero que debemos tener en cuenta a la hora de elegir el queso más saludable es cómo interpretar su etiqueta nutricional. Los ingredientes del queso son la leche, el cuajo, los fermentos lácteos y la sal. Y si lo que buscamos es que el queso forme parte de nuestro día a día conviene optar, como aconseja la nutricionista y colaboradora de ABC Bienestar, Elisa Escorihuela, por los que contienen menos grasa, que son: el queso de Burgos (que aporta 15 gramos de grasa por cada 100 gramos de producto), el queso ricotta o requesón , la mozzarella , el cottage (que aporta 5 gramos de grasa por cada 100 gramos, es rico en proteínas y probióticos) y el queso feta .

También son opciones ligeras el queso batido y el queso tipo Quark.

Queso tipo Quark.

En cuanto a los quesos semicurados y curados, es cierto que destacan por su aporte de calcio (100 gramos de queso curado contiene unos 848 mg de calcio frente a, por ejemplo, el aporte de 112 mg de calcio que aportan 100 ml de leche desnatada) y de proteínas, pero también contienen una mayor cantidad de grasa que el resto por lo que se aconseja un consumo moderado.

Los llamados quesos veganos son alternativas a los quesos tradicionales y se caracterizan por no usar derivados de origen animal para su elaboración. Pero la palabra «vegano» no es exactamente un sinónimo de saludable pues aunque estén elaborados a base de ingredientes de origen vegetal también podemos encontrar, según explica Laura Llorente, dietista-nutricionista del Centro Aleris, los que son más industriales, que tienen peor calidad nutricional, pues se preparan a base de grasas de mala calidad y almidón y los «formulados», que se pueden encontrar en tiendas especializadas y que son nutricionalmente más interesantes pues se elaboran a base de grasas saludables.

Su aporte de grasa incluye menor cantidad de ácidos grasos saturados, no aporta colesterol y contiene más fibra que los tradicionales. Pero en el otro lado de la balanza cabría destacar que los quesos veganos tienen un menor contenido de calcio, no tienen vitamina D o B12 (a no ser que se incluya específicamente).

¿Y qué pasa con el queso en crema?

Lo fundamental es revisar los ingredientes que contiene un queso untable que, según explica la dietista-nutricionista Ana Amengual, del centro Julia Farré, deberían ser leche, nata, sal y fermentos lácteos que ayudan a cuajar el producto y darle esa textura cremosa, aunque también podemos encontrar variedades que incluyen complementos con frutas, frutos secos, hierbas aromáticas o especias, para darle sabor.

Para elegir el más saludable debemos comprobar también su cantidad de sal, que no debe superar los 1,25 gramos de sal por cada 100 de producto.

En cuanto a la denominación light la experta alerta del hecho de que lo único que indica esa palabra es que se le han reducido en un 30% sus calorías en función de un producto de referencia pero que eso no es una garantía de que sea más saludable pues lo que se hace cuando se le quita la nata o esa grasa es añadir harinas o féculas que son las que le dan textura y eso implica que ha pedido calidad tanto en los ingredientes como en los nutrientes.

Una alternativa más saludable puede ser el skyr , un producto que aunque consumamos con cuchara como un yogur, en realidad se asemeja más a un queso fresco. Se elabora con leche desnatada y las bacterias típicas del yogur. La diferencia, apunta Amengual es que también se le añade cuajo, lo que le confiere una textura cremosa, siendo un producto bajo en grasas y lactosa y rico en proteína. Eso sí, lo que tenemos que tener en cuenta a la hora de consumir skyr es elegir aquella opción que no contenga azúcares añadidos.

Artículo solo para suscriptores
Tu suscripción al mejor periodismo
Anual
Un año por 15€
110€ 15€ Después de 1 año, 110€/año
Mensual
5 meses por 1€/mes
10'99€ 1€ Después de 5 meses, 10,99€/mes

Renovación a precio de tarifa vigente | Cancela cuando quieras

Ver comentarios