Isabel II, la Reina de España que acabó en el exilio

Vivió en en el palacio de Castilla, en París, hasta su muerte en 1904

Isabel II, heredera al trono desde los 3 años, vivió uno de los momentos más convulsos de la historia de España: la Revolución de 1868, conocida como La Gloriosa.

Tuvo que abandonar el país y exiliarse en París, donde vivió hasta su muerte en el palacio de Castilla. En 1902, la revista «Blanco y negro» realizó un reportaje fotográfico de esta residencia, que definió como: «Grande y ostentoso para casa de un particular, pero pequeño y modesto para mansión de una reina».