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11 curiosidades sobre la revista «Blanco y Negro»

Se cumplen hoy 129 años de la aparición de la publicación que fue la hermana mayor de ABC

Madrid, febrero de 1899. Redacción de Blanco y Negro a finales del siglo XIX, presidida por el cuadro de Ángel Díaz Huertas que sirvió de portada durante el primer año. Se publicó el 4/2/1899 identificando a los fotografiados: 1. Gabaldón. 2. Méndez Bringa. 3. Campo Moreno. 4. España 8. Rojas 6. Blanco Coris 7. Huertas. 8. Luca de Tena. 9. Larrocha 10. Royo. 11. Romea. 12. Estevan. 13. Cilla. 14. Arija. 15. Xaudaró 16. Plá 17. Roure+ info
Madrid, febrero de 1899. Redacción de Blanco y Negro a finales del siglo XIX, presidida por el cuadro de Ángel Díaz Huertas que sirvió de portada durante el primer año. Se publicó el 4/2/1899 identificando a los fotografiados: 1. Gabaldón. 2. Méndez Bringa. 3. Campo Moreno. 4. España 8. Rojas 6. Blanco Coris 7. Huertas. 8. Luca de Tena. 9. Larrocha 10. Royo. 11. Romea. 12. Estevan. 13. Cilla. 14. Arija. 15. Xaudaró 16. Plá 17. Roure - Christian Franzen
Federico Ayala Sörenssen
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El 10 de mayo de 1891 apareció el primer número de la revista Blanco y Negro, fundada por Torcuato Luca de Tena 12 años antes que ABC. Es pues nuestra hermana mayor. Una revista fundamental para entender la historia de los últimos 129 años y un referente periodístico que debemos reivindicar, pues está a la altura de las grandes revistas del siglo XX. Explicamos algunas singularidades de esta magnífica publicación, que pueden consultar íntegra en nuestra web.

¿Por qué se llama Blanco y Negro?

La elección del título fue objeto de discusión. Torcuato Luca de Tena quería quedar lejos de la prensa combativa de la época, pretendía hacer una revista de calidad y que tuviera un título que no fuera partidista. Así, en el primer número del 10 de mayo de 1891 se explica: «Nuestro periódico, al presentarse con el título que lo hace, se funda en el perpetuo contraste que por todos lados se observa.

La

Una cabina con publicidad de Blanco y Negro en 1967+ info
Una cabina con publicidad de Blanco y Negro en 1967

risa y el llanto, lo serio y lo festivo, lo formal y lo caricaturesco, lo triste y lo alegre, lo grave y lo baladí, todo ese blanco y negro que nos rodea desde que nacemos, será lo que nuestro semanario refleje, lo mismo en su parte artística que en la literaria».

Como nació Blanco y Negro

Torcuato Luca de Tena murió el 15 de abril de 1929. Pero como acostumbraba, había dejado ya esbozado un número especial de «Blanco y Negro» para conmemorar el número 2.000 de la revista. En él dejó uno de los pocos artículos publicados con su firma, en el que explicaba las razones de la fundación de Blanco y Negro: «Nació Blanco y Negro de un viaje a Alemania. Estuve en Munich, y allí pude admirar y estudiar la organización artística e industrial de la famosa revista Fliegende Blätter. De regreso a Madrid, y conversando con varios pintores jóvenes en el Círculo de Bellas Artes, me lamenté de que no se hiciera en España algo análogo, pues sólo existía entonces, y estampado en litografía, el Madrid Cómico. Me replicaron que aquí sobraban artistas para publicar un gran periódico ilustrado, pero que hacían falta editores. -Pues yo seré ese editor-contesté, y aquel mismo día quedó decidida la publicación de Blanco y Negro. El buen éxito me acompañó desde el primer número, del que llegaron a venderse más de 20.000 ejemplares, fabulosa tirada, en el año 1891, para un semanario».

¿Qué simboliza la portada de Díaz Huertas?

En el 75 aniversario de la revista se explicaba el dibujo de la portada: «Un dibujo ingenuo de Huertas, alegórico, insinuante y frívolo. Una dama, con capota de flores y plumas, conduce con gracioso empaque un carruaje ingrávido, casi volador, de altas ruedas, denominado tílburi, en homenaje a su inventor inglés, vehículo de moda entre los elegantes. El lacayo enchisterado es un negrito. Tiran del vehículo una mariposa blanca y un abejorro negro. En suma, una pirueta pictórica del artista, sobre pie forzado: lo blanco y lo negro».

Cuadro original de Ángel Díaz Huertas que sirvió para hacer la primera portada+ info
Cuadro original de Ángel Díaz Huertas que sirvió para hacer la primera portada

El cuadro fue grabado por Arturo Carretero y fue la portada durante los 52 primeros números, cambiando sólo la fecha del almanaque. Inmaculada Corcho, directora del Museo ABC de Dibujo e ilustración, analizó el alcance de la obra. Todo en ella es simbolismo, mezcla de modernidad y actualidad. La mujer joven que conduce el carruaje guiado por una mariposa y una libélula, fantasía, renacer y porvenir, el cambio y lo que está por venir. Al fondo la luz del sol que contrasta con el color de la piel del lacayo. Delante, hojas de periódico con alguno de los nombres de las secciones que tendría la revista. Y en el espacio del almanaque, casi como si fueran las armas de un escudo heráldico, un pincel y un plumín, haciendo ver el carácter de la revista y la importancia de la creación artística y literaria. A Díaz Huertas, sin embargo, se le debió decir que se publicaba los sábados (o lo entendió así), y en la parte inferior del cuadro original –que preside todavía la sala del consejo de administración de ABC- escribió la leyenda: «Se publica todos los sábados».

Transformar el lienzo en la portada de la revista fue un proceso gráfico complejo. Primero hubo que reproducirlo fotográficamente, positivando sobre cristal la imagen. Los retocadores hubieron de transformar sustancialmente el contenido, sustituyendo la leyenda de «se publica todo los sábados» por «se publica todos los domingos». Además transformó el escudo que rodea el almanaque y añadió Madrid como leyenda. Finalmente se introdujo el nombre del grabador final, Arturo Carretero.

Los mejores ilustradores

Sin duda, la Colección de Dibujo e Ilustración que custodia actualmente el Museo ABC es posiblemente la mejor del mundo en su género, y utilizamos el adverbio por modestia. Sus fondos son imprescindibles para conocer la historia de la ilustración, el dibujo, la caricatura, el humor gráfico. Son más de dos mil autores representantes del modernismo, naturalismo, impresionismo, de las vanguardias de más de un siglo. La nómina es impresionante, pero podemos destacar algunos hitos como los primeros dibujos que realizó Juan Gris para la prensa, algún rareza de Dalí, obras de Maruja Mallo, Benjamín Palencia, Ramón Gaya, Penagos o Bartolozzi; el humor gráfico de Joaquín Xaudaró, Tono, K-Hito, Antonio Mingote, Chumy Chúmez, Máximo o Sancha.

Joaquín Xaudaró en su despacho dispuesto al trabajo+ info
Joaquín Xaudaró en su despacho dispuesto al trabajo

Autores naturalistas como Día Huertas, Ventura Álvarez Sala, Serafín Avendaño, José García Ramos, Manuel García y Rodríguez, Adolfo Lozano Sidro, Juan Martínez Abades, Narciso Méndez Bringa, Santiago Regidor y junto a ellos, escultores como Mariano Benlliure o Lorenzo Coullaut Valera. Hay autores influidos por el impresionismo como Cecilio Plá o Emilio Sala.

Visiten el Museo ABC de Dibujo e Ilustración – ahora pueden hacerlo de manera virtual- y admiren la riqueza de una colección única.

Y los mejores escritores

Junto a los mejores ilustradores se buscó a los mejores autores. La revista tenía que tener un carácter artístico y literario. Se buscaba la excelencia y se encontró en la firma de los autores que han publicado en Blanco y Negro. Podríamos empezar a citar nombres y llegaríamos a varios miles.

En el número especial del 75 aniversario, publicábamos: «Al lado de la noticia, la crónica y el comentario de la fugaz actualidad, nuestra revista, a lo largo de su vida, ha venido dejando constancia de la colaboración de los nombres que con el tiempo saltarían a las antologías, las Academias y los manuales de literatura. Nombres, algunos entonces oscuros, otros ya ilustres, pero todos a la larga consagrados en las Letras españolas, desfilan por las ya viejas páginas de Blanco y Negro: Azorín, Baroja, Camba, Valle Inclán, Benavente, Blasco Ibáñez, D'Ors, Fernández Flórez, Gómez de la Serna, Ortega Gasset, Pemán, Sánchez Mazas, Montes, Giménez Caballero, forman constelaciones ascendentes por aquellas calendas, mientras que otras brillaban ya en plenitud de gloria, como la formada por Rubén Darío, Valera, Pérez Galdós, Castelar, Palacio Valdés, Maragall... Puede decirse, sin exageración, que todos los escritores españoles se asomaron a las páginas de esta revista, cuya nómina de colaboradores incluye más de doscientas cincuenta firmas de considerable entidad, aunque algunas no hayan llegado a esa "inmortalidad" de los que no sólo resisten el paso del tiempo, sino que con él están cada día más vivos, más presentes, más actuales». Y desde 1966 siguieron publicando muchos otros.

Contaba Azorin como los primeros redactores tabajaban en pupitres individuales+ info
Contaba Azorin como los primeros redactores tabajaban en pupitres individuales

Los logros técnicos de Blanco y Negro

Los primeros números se imprimieron en la imprenta de Rivadeneira. La sede de la revista estaba en Claudio Coello, 104 y albergó la primera imprenta propia, tres máquinas planas sistema Alauzet, que comenzó a montarse en noviembre de 1892 y que sacó el primer número el 27 de mayo de 1893.

El 29 de mayo de 1892 publicó sus primeras fotografías, en un reportaje sobre la romería de San Isidro y el 11 de febrero de 1912 publicó la primera fotografía obtenida de un negativo en color, una campesina de Fungariño.

Torcuato Luca de Tena recordaba: «Contraté en Alemania al obrero tipógrafo, especialista en la impresión de cuatromías, José Blass (Sic). Compré también en Alemania lo necesario para la fabricación de papel couché, papel indispensable para imprimir bien el color, e instalé la maquinaria en la fábrica La Vasco Belga de Rentería, lanzando el primer número con páginas en colores». Blass llegaría a ser dueño de los talleres de imprimir más calificados por su perfección y calidad.

El 2 de enero de 1897 comenzaron a utilizarse tintas de color en algunos titulares y elementos decorativos. El 29 de junio de ese mismo año se publica la portada en color, utilizando la tricomía. Posteriormente llegará la cuatricomía. El color se instala definitivamente en la revista. Seguirán otros muchos avances como la telegrafía, la utilización de la telefoto, etc.

Blanco y Negro publicó el 11 de febrero la primera fotografía obtenida de un negativo en color. Sin embargo, el 15 de mayo de 1912 publicó esta diciendo que era la primera.+ info
Blanco y Negro publicó el 11 de febrero la primera fotografía obtenida de un negativo en color. Sin embargo, el 15 de mayo de 1912 publicó esta diciendo que era la primera. - Fungariño

La censura y Blanco y Negro

El 10 de mayo de 1931 –curiosamente el día del cuarenta aniversario de Blanco y Negro-, el gobierno de la República suspendió la publicación de ABC y Blanco y Negro. La excusa fue la inauguración de un Círculo Monárquico en la calle de Alcalá de Madrid. Tras un intento de agresión contra los allí reunidos, la Policía detiene a los atacados, entre ellos el marqués de Luca de Tena, que es encarcelado. El mismo día, la Casa de ABC sufre un intento de asalto e incendio. El Gobierno ordena entonces la incautación del periódico y suspende la publicación del diario y de Blanco y Negro, que no pueden volver a publicarse hasta el 5 y el 4 de junio respectivamente.

El edificio incautado por el Gobierno de la República+ info
El edificio incautado por el Gobierno de la República

Durante los siguientes cinco años, se repiten a menudo las suspensiones (128) y la censura se ensaña con Blanco y Negro y ABC. La más larga fue la de 1932, cuando en aplicación de la autoritaria Ley de Defensa de la República, se cierran más de cien publicaciones en toda España. La etapa de más días suspendido fue desde el 10 de agosto al 30 de noviembre, 112 días en los que se continuó pagando todas las nóminas.

El Franquismo también se ensañó con Blanco y Negro, al que se le impidió poder volver a salir durante casi veinte años.

Las sedes

La sede de Claudio Coello+ info
La sede de Claudio Coello

La primera sede estuvo en Claudio Coello 104. En agosto de 1896, cinco años después de su fundación, se colocó la primera piedra de la mítica sede de la calle Serrano, con fachada también al paseo de la Castellana, Un enorme edificio diseñado por José López Salaberry, con toques andaluces, a petición de Torcuato Luca de Tena. «En el proyecto la nave ocuparía mil quinientos metros cuadrados, con una altura de treinta metros. Enorme nave, en la que podrían caber todas las imprentas de los periódicos de Madrid. ¿A dónde va este hombre con tan desorbitados y faraónicos planes?, se preguntan los escépticos, que no agotan su asombro ante los desmesurados planes en relación con una industria tan inestable y difícil como la periodística». En 1989 se trasladó la sede de la calle Juan Ignacio Luca de Tena, donde permaneció hasta su desaparición.

La rentabilidad de las empresas periodísticas

Al principio muchos le acusaron de crear una revista solamente como soporte publicitario de los productos de las industrias familiares. No era así, desde luego. De hecho, hasta el número 10 del 12 de julio, no apareció publicidad en Blanco y Negro. Lo que sorprendió a la mayoría de sus competidores es que detrás de Torcuato Luca de Tena no había ningún partido o grupo de presión de cualquier tipo, sólo estaba…Torcuato Luca de Tena, que pretendía convertir en rentable el negocio periodístico. Hay que recordar que el negocio de la prensa era ruinoso. Una España con un índice analfabetismo de más del 60%, unos hábitos de lectura muy bajos y la existencia de numerosas publicaciones de todo tipo hacían muy difícil la rentabilidad.

Pero Torcuato Luca de Tena apostó por la independencia económica como única vía para conseguir la independencia editorial. La tirada de 20.000 ejemplares inicial se quedó pronto corta y a finales de 1891 ya se imprimían más de 70.000. La publicidad y las ventas hicieron posible que se pudiera emprender el reto de editar un periódico diario, ABC, y de atraer a los mejores escritores de periódicos y a los ilustradores más importantes. La calidad literaria y artística se envolvía con una edición impecable y vanguardista.

Las etapas de la revista

Los primeros talleres de Blanco y Negro+ info
Los primeros talleres de Blanco y Negro

Primera etapa: desde el 10 de mayo de 1891 hasta el 19 de julio de 1936 se editó todas las semanas, desde el número 1 al 2.348. La revista se convierte poco a poco en líder indiscutible de las revistas en España. La Guerra Civil interrumpió su edición.

Durante la Guerra Civil se editaron 21 números, muy distintos de los anteriores y sin periodicidad. Su tamaño era mucho mayor y los contenidos bastante diferentes, naturalmente. Las portadas son ejemplos magníficos de ilustración de Guerra.

Segunda etapa: tras el final del conflicto bélico se solicitó volver a publicar Blanco y Negro, pero el régimen de Franco no lo permitió. Pensaba que era suficiente con una cabecera de manifiesto sentido monárquico como ABC. El 11 de mayo de 1957 se volvió a publicar, con el número 2.349. Retoma, con un estilo renovado y muy moderno su brillantez inicial. Y se publica hasta el 31 de diciembre de 1980, con el número 3.583. Se explica, en un suelto editorial, con un «¡Hasta luego!» como titular, que vuelve a cerrar por segunda vez debido a la crisis que azotaba a la prensa de la época, en la que entraron muchas nuevas publicaciones que restaron ventas y publicidad.

Tercera etapa: el 6 de marzo de 1988 reaparece con el número 3.584 pero esta vez como suplemento de ABC, sustituyendo a los Domingos de ABC, que había aparecido en 1968. Sigue así hasta el 29 de octubre de 2000, con el número 4.244.

Cuarta etapa: comienza entonces una sucesión de cambios que hacen que no se pueda considerar lo que viene como Blanco y Negro, más allá de mantener una cabecera. Desde el 5 de noviembre de 2000 al 15 de septiembre de 2002 se publica, con numeración propia. Ya reconocíamos que eso no era Blanco y Negro…

Quinta etapa: Tenemos que reconocerlo, «matamos» mal nuestra ilustre cabecera. Porque desde el 21 de septiembre de 2002 al 23 de abril de 2005, se unió a la cabecera de ABC Cultural. Es decir, nos cargamos dos de nuestras cabeceras más emblemáticas, Blanco y Negro y el suplemento cultural más prestigioso de la prensa española, ABC Cultural. Y para más inri, cuando terminó esto pasamos a cambiar el nombre al segundo, que se llamó ABCD las artes y las letras. Menos mal que esto se corrigió.

Los motivos de la aparición de ABC

El éxito de la revista tiene una curiosa consecuencia. Comienza a acumularse material que por razones de espacio no puede publicarse. Además, aunque se publican noticias de actualidad, Blanco y Negro no puede convertirse en un semanario de información general, pues no es ni lo que solicita el público ni lo que tiene pensado Torcuato Luca de Tena. Es entonces cuando comienza a gestarse la idea de crear un diario de información general nuevo. Y piensa en que sea, sobre todo, un diario con especial interés en la información gráfica.

Automoviles de reparto de Blanco y Negro y ABC en 1911+ info
Automoviles de reparto de Blanco y Negro y ABC en 1911

Nace así, en 1903, ABC. Un periódico innovador que no se entendería sin la existencia previa de Blanco y Negro. Se ve influido por la vocación de ser un periódico ilustrado. Se apuesta por la fotografía para diferenciarse: si Blanco y Negro es artístico y literario, ABC tiene que ser informativo e inmediato. Bien escrito, por supuesto, pero de rabiosa actualidad. Y eso la fotografía lo logra.

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