De la Antigua Roma al Circo del Sol, la historia «del mayor espectáculo del mundo»
Acróbatas, payasos y animales exóticos elevaron a su máximo esplendor al circo, que hoy lidia con una realidad cambiante
pablo pazos
El circo, el espectáculo más grande del mundo . Al menos, lo fue durante siglos. «Ahora hay otros rivales, fundamentalmente tecnológicos. Las perspectivas son buenas pero no volverá a ser el mayor espectáculo. En la actualidad es más modesto, distinto». Lo asegura Raúl ... Eguizábal , catedrático y profesor de Historia de la Publicidad en la Universidad Complutense de Madrid, y autor de varios libros sobre la materia, como «El gran salto. La asombrosa historia del circo» .
Una historia cuyo inicio, intuitivamente, situaríamos en la Antigua Roma . El diccionario de la Real Academia de la Lengua, en su definición de circo , incluye como acepción «lugar destinado entre los antiguos romanos para algunos espectáculos, especialmente para la carrera de carros o caballos». El «circus». Con las competiciones de cuádrigas y peleas de gladiadores, entre ellos y en ocasiones con animales salvajes, que han inspirado las escenas más famosas de películas como «Ben-Hur» y «Gladiador».
Pero aquellos espectáculos, donde el emperador de turno determinaba la suerte de los luchadores según la dirección de su pulgar, poco tienen que ver con los actuales. Eguizábal prefiere saltar a la Inglaterra de finales del siglo XVIII para rastrear el origen del circo tal y como hoy lo conocemos. «Sus costumbres procedían de compañías ambulantes que recorrían Europa desde la Edad Media. Muchos elementos (animales amaestrados, acróbatas, magia) ya estaban presentes entonces», describe.
Un invento inglés llevado a su máxima expresión por franceses que artistas de ambas nacionalidades trajeron a España, a Madrid y Barcelona, todavía de forma artesanal. Barracones de madera y lona, nada que ver con las carpas actuales.
Tallas y grabados
Siglos antes, explica el catedrático, se detectan los primeros rastros de la presencia del circo en España. «En Santa María del Naranco hay una talla en piedra con escenas del período visigótico. También existen grabados de la época del Renacimiento: en Madrid se conserva el anuncio de un espectáculo de una compañía, Buratines, que por el nombre debía de ser italiana».
Del panorama actual, Eguizábal destaca la labor del Teatro Circo Price , que acaba de perder a su director . «Tiene un programa heterogéneo, retoma la idea del gran circo artístico». Sin embargo, este autor de varios volúmenes sobre la materia señala que «fuera del pequeño circuito de aficionados, en España hay indiferencia . Cuando se ven espectadores es por Navidad, llevando a los niños». Son los que más agradecen los números de payasos, acróbatas y animales exóticos.
En el circuito mundial, el gran aglutinador es el Circo del Sol , una macro-compañía con la capacidad para desarrollar varios espectáculos de éxito, de forma simultánea en varios puntos distintos del planeta. Su estilo de circo es puramente artístico, basado en la acrobacia. Números de riesgo que en más de una ocasión causan disgustos. Recientemente uno de sus artistas tuvo que ser hospitalizado , apenas horas después de que la compañía fuera sancionada por la muerte de otra de sus integrantes . Ambos accidentes tuvieron lugar en Las Vegas, la ciudad-espectáculo por excelencia.
La situación, para Eguizábal, es desigual. De un lado el éxito del Circo del Sol. De otro, las dificultades de compañías modestas. Desigualdades que también son geográficas. China, por ejemplo, mima de forma especial el circo. En el gigante asiático la tradición de los acróbatas y malabaristas es milenaria. En cualquier caso, afirma el catedrático, «la supervivencia está asegurada».
El circo y los animales
Un elemento distintivo y emblemático del circo es el uso de animales. No en vano los recintos tienen forma circular es porque se inspiran en los picaderos de caballos. Los artistas llevaban a cabo sus números subidos a los caballos, realizando saltos, siempre siguiendo una trayectoria circular.
Además de caballos, otros especímenes más fieros, como tigres y leones, forman parte del imaginario colectivo como parte sustancial del circo. «En el siglo XIX se buscaba que los animales estuvieran enfadados , ofrecer la sensación de peligro», relata Eguizábal. «Eso ha pasado de moda. Ahora se muestran animales que no estamos acostumbrados a ver, que impresiona tener a 2 o 3 metros de ti».
Una tradición, la de utilizar animales, que en Cataluña tiene los días contados, tras anunciarse su prohibición . Para este experto, un acto de «puritanismo», teniendo en cuenta que por lo general están bien cuidados y son ejemplares nacidos en cautividad.
De la Antigua Roma al Circo del Sol, la historia «del mayor espectáculo del mundo»
Noticias relacionadas
- Muere Pere Pinyol, director del Teatro Circo Price de Madrid
- Sigue el maleficio: un acróbata herido durante un espectáculo del Circo del Sol
- Burt Lancaster, el acróbata de Hollywood que alcanzó la eternidad
- Teatro Circo de Albacete, único en España
- Cataluña, primer gobierno autonómico que prohíbe utilizar animales en los circos
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para registrados
Iniciar sesiónEsta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete