Cuando se habla del juicio de Nuremberg se olvida que en realidad fueron muchos, en los cuáles se juzgó a 611 personas. Uno de los juicios fue el «Juicio de la Justicia», en el que se imputó a 16 juristas que construyeron el marco legal con el que el régimen nazi llevó a cabo sus políticas raciales y de esterilización, y que desembocó en la «solución final». Pero cuando se menciona el jucio de Nuremberg se suele pensar en uno de ellos, el conocido como «El juicio principal», celebrado entre el 20 de noviembre de 1945 y el 1 de agosto de 1946. Se juzgó a 24 jerarcas nazis, y a seis organizaciones –el Gabinete del Reich, los líderes del NSDAP, SS y SD, SA, Gestapo y el Estado Mayor y Alto Mando. Las sentencias se hicieron públicas el 1 de octubre de 1946. Dos de los líderes nazis ni siquiera pudieron ser juzgados.
ABClo contó así: «El tribunal de Nuremberg ha dictado doce penas de muerte, tres condenas a prisión perpetua, cuatro de diez a veinte años y tres absoluciones». Las sentencias fueron: Hermann Göring, pena de muerte; Karl Dönitz, diez años de prisión; Rudolf Hess, cadena perpetua; Joachim von Ribbentrop, pena de muerte; Wilhelm Keitel, pena de muerte; Alfred Rosenberg, pena de muerte; Hans Frank, pena de muerte; Wilhelm Frick, pena de muerte; Ernst Kaltenbrunner, pena de muerte; Walther Funk, cadena perpetua; Hjalmar Schacht, absuelta; Hans Fritzsche, absuelto, Constantin von Neurath, 15 años de prisión; Albert Speer, 20 años de prisión; Arthur Seyss-Inquart, pena de muerte; Franz von Papen, absuelto; Alfred Jodl, pena de muerte; Fritz Sauckel, pena de muerte; Baldur von Schirach, 20 años de prisión; Erich Raeder, cadena perpetua; Julius Streicher, pena de muerte y Martin Bormann, pena de muerte.
Fueron pocos los que pagaron por los crímenes del nazismo. Pero lo cierto es que inició un cambio muy importante en la aplicación de la justicia, sentando las bases del futuro Tribunal Penal Internacional. Los periodistas de la fotografía que publicamos hoy corrían a anunciar lo que en su momento fue un hecho trascendental, la condena de los principales jerarcas nazis.