Yanukóvich gana las elecciones en Ucrania pero sin mayoría absoluta

Todo eso suponiendo que las encuestas a la salida de los colegios no se equivoquen y que no se repita un pucherazo como el que desató la Revolución Naranja tras la segunda vuelta de las presidenciales aquel 21 de noviembre de 2004.

Según la Fundación Kúcheriv ( Iniciativa Democrática ), la formación más votada ha sido el oficialista Partido de las Regiones, encabezado por actual presidente del país, Víctor Yanukóvich , pero muy lejos de la mayoría absoluta. Habría obtenido el 28,1% de los votos. El mismo sondeo asigna a la coalición Batkívshina (Patria), que dirige Arseni Yatseniuk , pero cuya líder carismática es Timoshenko, el 24,7% de los sufragios.

En tercer lugar habría quedado la recién creada Alianza Democrática Ucraniana por las Reformas (UDAR) , también adversaria de Yanukóvich y con el campeón de boxeo, Vitali Klichkó , al frente, con un 15,1%, y a continuación los ultranacionalistas del partido “Svoboda” (Libertad) con un 12,3%. Los comunistas habían cosechado tan sólo un 11,8% de los votos. El resto de los partidos podrán tener representación en la Rada solo en el caso de que sus candidatos se impongan en las circunscripciones uninominales, ya que las listas de partidos que no hayan superado la barrera del 5% no entrarán en el reparto de escaños.

Este panorama deja abierta la posibilidad de que Timoshenko, Klichkó, tal vez los ultranacionalistas y los candidatos afines que salgan del escrutinio mayoritario sellen una alianza para hacerse con el Gobierno. En cualquier caso habrá que esperar a que se culmine el recuento de votos y ver qué candidatos obtuvieron la victoria en esa mitad de la Rada (Parlamento) que se elige por circunscripciones.

También hay que dar por hecho que las autoridades ucranianas jugarán limpio. Sin embargo, ya se han producido numerosas denuncias de prácticas fraudulentas e irregularidades el mismo día de la votación. Los interventores de Batkívshina y el Partido Comunista daban ayer cuenta del uso de autobuses con “centenares” de electores que votaron repetidamente en Kiev y en ciudades como Jersón, Poltava y Donetsk, ésta última feudo de Yanukóvich. Esta forma de manipulación es conocida con el nombre de “carrusel”. Se produjeron también, según la agencia rusa Interfax, expulsiones de interventores de sus colegios, propaganda electoral ilícita e intentos de comprar votos.

Hubo además quejas en la ciudad portuaria de Odessa, en algunos de cuyos colegios, al parecer, se habían dejado bolígrafos para marcar las papeletas con tinta que desaparece. En cuanto al desarrollo de la campaña electoral, Klichkó afirmó que fue “muy sucia, con presiones e intimidaciones a muchos candidatos”.

Timoshenko, que votó en una urna itinerante en la Clínica número 5 de la ciudad de Járkov, en donde se encuentra hospitalizada a causa de su hernia discal, lanzó un mensaje a través de su página web al comienzo de la jornada electoral pidiendo a la ciudadanía que acudieran a votar para disminuir así el riesgo de falsificación de los resultados.

El 21 de noviembre de 2004, en la segunda vuelta de los comicios presidenciales, se enfrentaban Yanukóvich y Víctor Yúshenko . Los sondeos a pie de urna dieron la victoria a Yúshenko, pero la Comisión Electoral proclamó que el ganador había sido Yanukóvich. El pucherazo hizo que miles de personas salieran a la calle con banderas naranjas. Tras tres semanas de movilizaciones, obligaron al poder a repetir la votación el 26 de diciembre. Esa vez las elecciones fueron limpias y venció Yúshenko, cuya presidencia se prolongó hasta 2010.