Veinticuatro horas después de que Salvamento Marítimo encontrara semihundida la patera que buscaba desde el día anterior, el rastreo continúa en la zona. Se rescató a 18 inmigrantes subsaharianos con vida y 14 cadáveres, pero a tenor de la información recibida, vía telefónica, la noche anterior, otras 39 personas habrían desaparecido, tragadas por el Mediterráneo. La Guardia Civil da por muertas a estas personas, dadas las horas transcurridas.
La confusión ha rodeado desde el principio lo ocurrido en esta travesía hacia la muerte. En la noche del miércoles al jueves se activó un dispositivo de búsqueda tras una llamada telefónica de un familiar que informó de que una embarcación se dirigía a las costas andaluzas con 71 personas. Un avión maltés de la operación «Indalo», coordinado por Frontex, localizó la embarcación a la 1.20 de la madrugada a 60 millas al sur de Granada, en aguas marroquíes (ver imágenes). Se dirigía a España navegando lentamente.
Cuatro horas después, a las 5.40 de la madrugada, Marruecos informó de que sus patrulleras habían interceptado una patera con 60 personas en la misma zona. Aunque se sospechó que podía tratarse de la misma embarcación, Salvamento Marítimo y la Guardia Civil mantuvieron desplegado el dispositivo de búsqueda. Ayer por la mañana, partieron un helicóptero y una Salvamar hacia la zona y a las 14.30 horas, esta última embarcación localizó la patera semihundida, a unas 20 millas del avistamiento del avión maltés pero contra viento y contra marea, es decir, en dirección a Marruecos.
La duda está sobre la mesa. ¿La patera que naufragó y de la que faltan 39 inmigrantes en teoría es la misma que la avistada por el avión de Frontex que tuvo problemas y dio la vuelta o bien la avistada es la que interceptaron los marroquíes cuatro horas después? Rabat no ha aclarado, de momento, esta confusión y tampoco ha solicitado ayuda a España. Sí rechazó el jueves por la noche tanto a los supervivientes como los cadáveres que Salvamento Marítimo había trasladado a Alhucemas. Solo un herido muy grave permanece hospitalizado allí. El resto tuvieron que ser llevados de nuevo a Motril (Granada).