La obra de arte más cara jamás subastada cuelga en el MoMA

El cuadro que el pintor noruego realizó en 1895 se convirtió el pasado mayo en la obra más cara jamás adquirida en una subasta, cuando superó el récord establecido en 2010 por «Desnudo, hojas verdes y busto» de Pablo Picasso.

Esta es la única de las cuatro versiones de «El Grito» que permanece en manos privadas. Su dueño, un coleccionista privado cuya identidad permanece en secreto , ha cedido al MoMA la pieza para poder compartirla con los miles de interesados que diariamente acuden a dicho museo. «Para nuestros visitantes, está supone una rara oportunidad de ver esta extraordinaria obra de arte», explicó el director del MoMA, Glenn D. Lowry .

La principal razón es que el resto de versiones de esta icónica pintura se encuentran en diversas instituciones culturales noruegas (una en la Galería Nacional de Oslo y las otras dos en el Museo Munch, también en la capital noruega) y no han viajado en muchos años.

«El asombroso poder de la obra original de Munch se mantiene a pesar de la ubicuidad actual de esta imagen», señaló Ann Temkin , la comisaria del MoMA encargada de organizar su instalación. «La sutileza visual y complejidad de esta composición no pueden ser resumidas en un cliché», añadió.

Esta versión en pastel de «El Grito», una obra concebida como parte de la serie «El friso de la vida» , estará acompañada de otras piezas de Munch escogidas de la amplia colección del MoMA.