«Miss Liberty», en 3D, según Andy Warhol
Esta icónica pintura saldrá a subasta el 14 de noviembre en la sala Christie's de Nueva York. Se espera que supere los 35 millones de dólares
N. P.
Warhol suma y sigue. Primero fue la exposición que le dedica el Metropolitan de Nueva York , en la que muestra la enorme huella que ha dejado en el arte contemporáneo; después el homenaje que ha recibido de uno de sus grandes iconos ( ... las sopas Campbell ), con una edición limitada de las famosas sopas en colores pop. Y en el mercado del arte Warhol sigue imparable y al alza, siguiendo la tendencia de los últimos años. Ya sabíamos que la sala Christie's sacará a subasta el 14 de noviembre en Nueva York una importante obra suya, un retrato de Marlon Brando , cuya estimación ronda los 20 millones de dólares.
Pero habrá más. Ese día, la misma sala ofrece otra pieza icónica de Warhol, y uno de los cuadros más importantes de este artista que han salido nunca a subasta. Acostumbrado a apropiarse de mitos e iconos americanos, en este caso lo hace con uno de sus mayores símbolos: la mismísima Estatua de la Libertad . Warhol es hijo de una familia de origen checo que emigró a Estados Unidos. Él nació en Pittsburgh.
Además, esta obra (se espera que supere los 35 millones de dólares) es un ejemplo pionero de la pintura 3-D . Es la única obra que queda en manos privadas de la serie realizada en 1962 en la que Warhol experimentó con técnicas de 3-D. Las otras dos se encuentran en museos: «Crash Car Optical», en el Kunstmuseum de Basilea , y una versión más pequeña de la Estatua de la Libertad, en el Museo Andy Warhol de Pittsburgh .
Iconos «made in USA»
Esta «Miss Liberty» warholiana es un símbolo de esperanza pintado en un momento de crisis en Estados Unidos . Encarnaba, para él, el sueño americano, junto a otros iconos «made in USA» , como la botella de Coca-Cola, las latas de sopas Campbell, sus Marilynes y Elvis... Lo pintó en 1962 , en pleno apogeo de la Guerra Fría . Esta pintura es el preludio de su serie dedicada a los «Desastres» , la otra cara del sueño americano: la pesadilla americana. Warhol pintó accidentes de coche, sillas eléctricas, suicidios...
Warhol llegó a Nueva York en 1949 . Pronto se convirtió en el neoyoquino más neoyorquino. Plantó cara al expresionismo abstracto que predominaba en la escena artística norteamericana de la época apostando fuerte por el po y la cultura de masas . Y qué mejor símbolo de la democratización de la cultura que la Estatua de la Libertad, uno de los iconos más célebres del mundo. Se apropió de su imagen a partir de una tarjeta postal.
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