Londres 2012: El curioso factor Spice Girls

Ancladas al rol que un día le encomendaron en un experimento de laboratorio, la materia prima de cada una de ellas permanecía intacta. Emma Bunton viajaba en un taxi de color rosa chicle, el de Mel C estaba maqueado con rayas deportivas, lujosos diamantes adornaban el de Victoria Beckham , la reminiscencia del famoso traje Halliwell Brit Awards inspiraba el de Geri y un print animal customizaba el de Mel B. Nada había cambiado.

La resurrección de aquellas chicas picantes que alcanzaron el éxito gracias a una explosiva puesta en escena, unas coreografías extravagantes y un vestuario en la fina linde entre lo provocador y lo chabacano no dejaron a nadie indiferente. Ayudadas por la cortesía de sus respectivos taxistas se encaramaron a lo más alto de sus coches convertidos en plataformas móviles y como cinco gogós de antaño desentumecieron sus caderas, se desmelenaron y brincaron mientras entonaban la facilona y hueca letra de su «Spice Up Your Life».

Visto y no visto. En tres minutos de actuación, se quitaron quince años de encima y consiguieron que el alcalde, Boris Johnson, se entregara en cuerpo y alma al ritmo de «Wannabe» y que el primer ministro, David Cameron, y su esposa Samantha , bailaran como adolescentes desde sus asientos como si no hubiera mañana.

Dejaron poco margen para el factor sorpresa en cuanto a atuendo y peinados concierne. La cursilería de Emma hallaba su máxima expresión en un vestido rosa chicle y su rubia melena impoluta de niña buena. El sofisticado traje de cola negro de Victoria daba buena cuenta de su glamour sosaina.

El patriotismo de Geri se evidenciaba en un chusco vestido rojo con dos volantes laterales con la bandera británica y una tiara sobre su cabeza.

Quizá más refinada emergió Mel B, que ha cambiado los estampados en leopardo por la pedrería —con los que se daba un cierto aire a Rihanna— y su pelo a lo afro por una melena rizada más cuidada. Y sin duda, la gran novedad del vestuario “power girl” la protagonizó Mel C, que por fin relegó el chándal para ir al gimnasio y optó por un acampanado mono blanco. A lo que no renunció fue a la coleta tirante que confiere esa sensación de cara de pocos amigos.

Guste o no, la resurrección de las Spice era sin duda uno de los momentos más esperados en esta ceremonia de clausura que auspiciaba los valores del pop rock británico en formato comprimido. Era un secreto a voces. El quinteto británico estaría en la gala, pero muchos se resistían a aceptarlo, hasta que salieron las pruebas del delito a la luz.

El diario británico Daily Mail adelantaba algunas fotografías de los ensayos de esta actuación. Como en sus mejores años y luciendo looks similares a los que las hicieron famosas se captó, a Victoria Beckham, en un look «total black'» con unos pantalones de cuero ajustados acompañados por unos vertiginosos tacones y unas gafas de sol.

El movimiento de caderas de la spice pija era minuciosamente examinado durante la gala desde la grada por su marido David Beckham . En la ceremonia inaugural se cambiaban las tornas. Beckham surcaba las aguas del Támesis en una lancha en una de las últimas etapas de la antorcha olímpica hacia el pebetero.

Posh, Scary, Baby, Sporty y Ginger , que no se habían reunido públicamente desde 2008, volvieron a recordar que aunque nadie se lo crea vendieron 35 millones de discos y que su primer trabajo Wannabe escaló hasta lo más alto de las lista de ventas, donde permaneció quince semanas consecutivas.

Ha llovido mucho y copiosamente desde entonces. Todas han rehecho sus vidas por separado con mejor o peor suerte, y para una vez que las juntan, se desencadenan los rumores que acechan el buen rollo y la amistad que aglutinaba al grupo.

Victoria Beckham, a la que le va de maravilla en su faceta como diseñadora, al parecer, puso como condición para actuar en las Olimpiadas que las Spice Girls no se vuelvan a reagrupar nunca más en la vida . Geri Halliwell tampoco veía muy claro eso de volver a compartir escenario. «Después de los Juegos Olímpicos no me imagino ni siquiera hablando con Victoria, y mucho menos cantando con ella declaraba la primera spice en abandonar la expedición y hacer su carrera por su cuenta», según el Daily Mail . Pues eso, cada una a lo suyo.