Motherwell, Paz y Alberti; admiración y genio en pequeño formato

Las piezas que componen «Motherwell y los poetas» proceden de los fondos propios de la institución –de su archivo histórico y su biblioteca– y de algunos préstamos de particulares, y escenifican la tradicional relación entre pintura y poesía.

El visitante comprobará cómo Motherwell, una de las principales figuras del expresionismo abstracto junto a Jackson Pollock o Mark Rothko, trató de «escribir» con pintura los poemas de Octavio Paz , y Alberti «esbozó» con palabras la abstracción del pintor en su poema «Negro Motherwell». «Algunos poemas de Octavio parecen escritos esperando los dibujos de Motherwell, hablaban de la tinta, del impacto de las manchas...», señaló el director de exposiciones.

La exposición se divide en tres partes. La primera de ellas, «Robert Motherwell: tres poemas de Octavio Paz», se compone de 27 litografías del artista que ilustran parcialmente tres textos del escritor mexicano: «Nocturno de San Ildefonso», «Vuelta» y «Piel/Sonido del mundo». El Premio Nobel concibió este último en 1971, después de descubrir la obra del estadounidense.

«Negro Motherwell: Rafael Alberti» , la segunda parte de la muestra, gira en torno al poema que el gaditano dedicó al pintor con motivo de la primera exposición monográfica dedicada a Motherwell en España en 1980. Una grabación original permite oír al poeta recitando sus propios versos –«El negro motherwell/el profundo compacto entrado de la noche»– mientras una proyección muestra un libro página por página.

Se trata de «El negro» , un volumen de gran formato que Motherwell elaboró tiempo después sobre el poema de Alberti. «Es ese color –o más bien la ausencia de color que supone el negro– lo que caracteriza los trazos gruesos y violentos de este artista», explicó el comisario de la muestra en declaraciones a Efe.

La segunda sección del recorrido recoge también fotografías de la muestra de 1980 y de l a visita que Motherwell hizo a Antoni Tàpies aprovechando su estancia en España.

«Cero Como Colmo Como Cifra Como Calma Como Cero Como Colmo Como Cifra...». Este «Topoema» infinito de Octavio Paz es una de las piezas más conocidas que componen la tercera parte de la exposición. «Octavio Paz y el libro de creación» es un espacio dedicado a los libros del mexicano que se encontraban en la biblioteca de Julio Cortázar. La viuda de Cortázar donó el fondo de su marido (casi 4.000 títulos entre libros, revistas y recortes) a la Fundación en 1993. Entre ellos, muchos ejemplares dedicados por Octavio al argentino.

«Se han seleccionado obras de carácter visual», señala el comisario. Volúmenes en los que la frontera entre texto e imagen se diluye: los citados «Topoemas», los «Discos visuales», el estuche «Marcel Duchamp o el castillo de la pureza» o «Vrindaban», una caja triangular con un cuadernillo ondulado en su interior.