Diez consejos para ponerse moreno y no acabar sufriendo un cáncer de piel
Utilizar fotoprotectores biológicos, evitar las horas centrales del día y las lámparas de rayos UVA y comer tomates y zanahorias ayuda a conseguir un bronceado saludable
cristina garrido
Con la llegada del calor, la ropa ligera se abre paso en nuestro armario y deja al descubierto nuestra piel blanca. A muchos les entran entonces las prisas por ponerse morenos y se dan baños de sol brutales y «a pelo» pensando que ... aceleran el proceso. Nada más lejos de la realidad. Lo único que consiguen es dañar su piel con una estupenda quemadura y acumular papeletas para un futuro cáncer de piel .
Ponerse moreno protegiéndose del daño del sol es posible, para eso existen las cremas solares, aunque algunos hagan como que no las conocen, y otras pautas que nos ayudarán a conseguir un color bonito sin poner en peligro nuestra salud. Atentos:
1.-Ponte el protector solar, factor mínimo 30 , media hora antes de la exposición al sol. Hay que aplicarlo con generosidad y reponerlo cada dos horas y justo después de bañarnos o haber practicado ejercicio.
2.-Exponte al sol poco a poco y evita las horas centrales del día (entre las 12.00 y las 17.00), ya que en ese momento los rayos son más oblicuos y la radiación infrarroja y ultravioleta es mayor.
3.-Elige fotoprotectores biológicos , que, además de bloquear los rayos solares, reparan el ADN dañado por la radiación ultravioleta que haya pasado a la piel. Aunque todavía hay pocos en el mercado, el doctor Julián Conejo-Mir, presidente de honor de la Academia Española de Dermatología (AEDV) explica a ABC.es cómo fabricar nuestro propio protector solar biológico en casa: «Por la mañana podemos aplicar una crema o serum de alta concentración de vitamina C y, sobre ella, cualquier protector solar factor 50. Los protectores reducen un 50% los radicales libres producidos por el sol, pero cuando lo asociamos a vitamina C a altas concentraciones, estos se reducen más del 90%».
4.-Potencia la ingesta de alimentos con betacarotenos y alfacarotenos, que protegen la piel de los daños solares e incrementan la formación de melanina. Para conseguir un bonito bronceado es más eficaz comer de forma habitual tomates , espinacas, lechuga, mango, calabaza o zanahoria que pasarse horas bajo el sol.
5.-Cuando vayas a la playa o a la piscina no te olvides la sombrilla , el sombrero y las gafas de sol con cristales homologados capaces de filtrar los rayos UVA y UVB. A los niños, además, protégelos con una camiseta seca y opaca porque si está mojada dejará pasar los rayos UV. No expongas directamente al sol a los menores de tres años.
6.-Sécate bien después de cada baño. El efecto lupa de las gotas de agua favorece las quemaduras solares y disminuye la eficacia de los protectores solares, aunque sean resistentes al agua .
7.-No solo hay que protegerse en la playa o la piscina, también puedes quemarte practicando actividades al aire libre. Aplícate la crema protectora cuando vayas en bici, a la montaña, pasees, hagas deporte o estés en el jardín.
8.-No te confíes porque el día esté nublado o ventoso, los rayos UV siguen ahí, por lo que hay que protegerse con la misma intensidad. Tampoco dejes de echarte crema porque estés moreno , la radiación solar continúa dañando tus células aunque no te quemes.
9.-Evita las lámparas de rayos UVA. Contribuyen a la aparición de cánceres cutáneos y aceleran el envejecimiento de la piel, advierten desde Hospitales Nisa .
10.-En caso de detectar alguna peca o lunar que pique, crezca, sangre o cambie de color, acude a la consulta de tu dermatólogo para que evalúe la lesión. En el cáncer de piel , el diagnóstico precoz es de vital importancia ya que se puede curar hasta el 95% de los casos.
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para registrados
Iniciar sesiónEsta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete