El Papa dice a las familias que su amor «es la única fuerza que puede transformar el mundo»

En la homilía de la misa de clausura del VII Encuentro Mundial de las Familias, el Papa les dijo que el amor entre los miembros de la familia -“fundada en el matrimonio entre un hombre y una mujer” y abierta a los hijos- la lleva a ser imagen del Dios uno y también de la Trinidad, cuya fiesta se celebraba ayer.

El Santo Padre les invitó a proteger ese tesoro del amor familiar aprendiendo a “ser pacientes con los defectos de los demás, saber perdonar y pedir perdón”, así como “superar con inteligencia y humildad los posibles conflictos”. El Papa se refirió también a quienes han sufrido experiencias dolorosas de “fracaso y separación” matrimonial, recordando que “el Papa y la Iglesia os sostienen en vuestro esfuerzo . Os animo a permanecer unidos a vuestras comunidades y pido a las diócesis que emprendan iniciativas adecuadas de acogida y acercamiento”.

El sábado por la noche, durante el encuentro con unas 350.000 personas Benedicto XVI había sido aún más claro: “debemos decir a los divorciados vueltos a casar que la Iglesia les ama . Deben ver y sentir que realmente hacemos lo posible por ayudarles. No están fuera de la Iglesia. Si bien no pueden recibir la absolución y la eucaristía, viven plenamente dentro de la Iglesia”.

El Papa reconoció que “el problema de los divorciados vueltos a casar es uno de los grandes problemas de la Iglesia de hoy. Su sufrimiento es grande. Debemos ayudarles y esforzarnos también en la prevención, enseñando a los jóvenes a vivir el enamoramiento”. En algunos casos, “la psicoterapia es muy necesaria a las familias en dificultades”.

El Santo Padre puso en guardia a las familias de todo el mundo frente al avance del utilitarismo en el mundo económico , que se infiltra también dentro de los muros del hogar, y termino su homilía subrayando la importancia del domingo, en un clima de fiesta, de celebración religiosa, de descanso y de vida familiar.