Siete detenidos por tráfico de drogas en la Cañada Real Galiana

El clan contaba con dos salas habilitadas para el consumo de los mismos estupefacientes que suministraban. En cada una había un timbre con el que se comunicaban con los vendedores que residían dentro de la casa. A dichas estancias, explican desde Policía Nacional, se accedía desde una pequeña entrada entre escombros. La droga y otros útiles para su consumo se despachaban a través de un ventanuco que comunicaba ambas habitaciones.

La investigación p0licial que ha desembocado en la operación del pasado jueves y las siete detenciones se inició en enero. Agentes de la Policía Nacional interceptaron entonces a varios narcotraficantes a pequeña y mediana escala que se habían desplazado hasta la Cañada Real para comprar cantidades significativas de drogas. En enero se detuvo a tres personas que regresaban a Pamplona tras comprar 153 gramos de heroína. En marzo se interceptó a un sujeto que transportaba 200 gramos de opiáceos y cinco bulbos de planta seca de adormidera —la amapola con la que se hace la heroína—. En abril se capturó a dos individuos que llevaban consigo más de 260 gramos de cocaína repartida en varios paquetes. A partir de estas operaciones se pudo ubicar las parcelas concretas desde las que se les había abastecido, y poner en marcha el operativo.

Además de las siete detenciones practicadas, durante la operación se ha procedido al desmantelamiento y derribo de 13 infraviviendas. En ellas se intervinieron distintas cantidades de droga, útiles para su venta y distribución, armas de fuego —una pistola semiautomática, una de fogueo y una carabina con sus respectivas municiones—, teléfonos móviles, dinero en efectivo y joyas .

La Policía Nacional también ha informado de que un matrimonio del mismo clan que ya cumple una condena por delitos similares, aprovechaba los días de permiso para seguir con la venta de estupefacientes en la Cañada Real.