Un policía español, desaparecido en Yemen
Sufre una enfermedad incurable y antes de tomar el taxi que debía conducirle al aeropuerto retiró una pistola de la embajada
abc.es
Un policía nacional español se encuentra en paradero desaparecido desde el pasado miércoles, cuando tomó un taxi en Yemen que le debía llevar de la embajada al aeropuerto para coger un avión con destino a España, donde tenía previsto pasar unos días de vacaciones.
Esa ... es la última pista del agente, según han informado fuentes conocedoras del caso. Se trata de Antonio Cejudo Ballesteros, de 38 años de edad y se encontraba en el país asiático desde 2010 adscrito al equipo de seguridad de la embajada española en Yemen.
Llevaba seis años y medio en el Cuerpo Nacional de Policía y antes había estado destinado en la Unidad de Intervención Policial (UIP) de Granada y en la Unidad Central de Intervención en Madrid.
Fuentes oficiales han informado a ABC de que el agente, al parecer, sufre una grave enfermedad, y su estado anímico se ha resentido en las últimas semanas.
Sin señal en el móvil
Su teléfono móvil dejó de dar señal entre la noche del viernes y la mañana del sábado. Su llegada a España estaba prevista para el jueves, pero según ha confirmado este domingo el Ministerio de Asuntos Exteriores y Cooperación, Antonio Cejudo ha sido declarado oficialmente desaparecido.
Tanto la Embajada de España en Saná, la capital, como los ministerios de Exteriores y de Interior trabajan en estrecho contacto para averiguar más detalles de esta desaparición.
El hermano del agente de la Policía Nacional, Javier Cejudo, ha asegurado que supone «un error» hablar de secuestro en este caso porque «todavía es prematuro» . En una entrada en su blog, ha detallado cómo se enteró de la noticia de la desaparición de su hermano, Antonio Cejudo.
Ha explicado que el pasado viernes 18 de mayo Antonio tenía previsto llegar a Madrid para pasar un periodo de vacaciones, si bien no llegó a la capital española. «Tras esperar con preocupación durante la tarde del viernes y la mañana del sábado, y ante la imposibilidad de contactar con él por teléfono porque estaba apagado, ayer sábado por la tarde di la señal de alarma y contacté con la Embajada en Yemen para preguntar. Ahora sé que desapareció el jueves por la tarde y las autoridades todavía no han dado con su paradero», ha señalado.
La familia pide discreción
Horas antes de escribir esta entrada en su blog, Javier se mostraba pesimista en su cuenta de Twitter, al afirmar que «la cosa pinta mal» y añadir que parecía un secuentro aunque matizaba que este extremo no estaba confirmado.
«Ayer fue el peor día de mi vida, y puedo decir lo mismo de hoy, y de mañana, y de pasado mañana. No me creo que esté pasando, estoy en estado de shock», ha señalado en su blog, al tiempo que ha pedido a los medios de comunicación que «no molesten» a su familia, puesto que «prefieren ser discretos y dejar trabajar a las autoridades».
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