Audi A3, tecnología Premium

A veces, las diferencias en los precios de los automóviles parecen increíbles, pero en buena medida están determinadas por los materiales empleados y por la calidad de los procesos de fabricación y homologación. ABC Motor ha tenido oportunidad de comprobar en el centro de desarrollo y fabricación de Audi, en Ingolstadt (Alemania), algunos de los procedimientos que la compañía aplica en el diseño y homologación de los sistemas de fabricación y calidad de los componentes suministrados por los proveedores, al hilo de la nueva generación del compacto A3.

Los controles comienzan un año antes al lanzamiento de un nuevo vehículo; es decir, se producen componentes del exterior y del interior que desde un primer momento supervisa el departamento de calidad.

En una gran nave de unos 1000 metros cuadrados, a temperatura controlada de 22,5 ºC y humedad constante, se montan con ayuda de lo que se llama en Audi Meisterbock, una especie de plantilla gigante compuesta por multitud de piezas normalizadas y perfiles de aleación de aluminio que sujetan las piezas desde el interior para conformar la «piel de coche». El proceso permite ajustes con mediciones precisas, y emplea palpadores electrónicos de contacto suave o sistemas láser para piezas blandas en la medición de los componentes para que las tolerancias ajusten con una precisión de décima de milímetro (0,1 mm). Adicionalmente, y no menos importante, es que queden armonizadas ópticamente para que la apreciación subjetiva a la vista sea perfecta. En el habitáculo se utiliza otro Meisterbock que, sujetando desde el exterior los componentes de la carrocería, permite recrearlo, hasta con funcionalidades reales.

La estandarización del proceso define hasta el matiz de color exacto con diferentes tipos de luz, brillo y reflejo que deben tener las piezas metálicas y cromadas. Los componentes utilizados en el chasis son aluminio, en planchas y piezas forjadas en caliente, aceros de aleados de alta resistencia y aceros de alta calidad que permiten reducir el peso del conjunto logrando rigidez y resistencias máximas que aseguren la trayectoria de conducción y la protección del habitáculo (y por ende del pasaje) en caso de colisión.

Precisamente, los sistemas que incorpora el nuevo Audi A3 se encuentran entre los más avanzados del mercado en cuanto a seguridad, protección y entretenimiento. Por citar algunos, incorpora el nuevo MMI con nuevo procesador de doble núcleo actualizable, placa táctil en el mando rotativo para escritura de caracteres de forma natural, comandos por voz y sistema de navegación con pantalla retráctil de gran formato. Éste puede utilizar los servicios de Google, búsquedas por voz, Street View, información de tráfico avanzada, emisoras de noticias...

En asistentes a la conducción, incorpora recomendación de descanso, asistente de carril y seguimiento activo de carril, que permite circular en el centro del carril de forma automática, asistente de luces y limpiaparabrisas, lectura de señales de velocidad y representación en el cuadro, pantalla FIS y, en el navegador, asistente de ángulos muertos, de aparcamiento en línea o batería (con función de detección de recorrido y obstáculos para evitar las columnas móviles), programador de velocidad de crucero con Stop&Go, pre sense front (detector y mitigador de accidentes por alcance hasta 200 km/h) y frenada de emergencia en ciudad hasta 30 km/h.

La nueva generación del compacto de los aros se estrenará con dos motores de gasolina TFSI de inyección directa y un diesel TDI common rail, todos de nueva construcción, con Start&Stop y nuevos materiales, funcionalidad, componentes, tratamientos para disminuir rozamientos internos, gestión optimizada de la temperatura y bomba de aceite de caudal variable. La finalidad de todo ello es disminuir peso y mejorar la eficiencia aminorando emisiones. En gasolina partirá del 1.4TFSI (pesa 107 kg al aplicar un nuevo cárter de aleación de aluminio, y culata de nuevo diseño con colector de escape integrado para mejorar el rendimiento térmico). Equipado con turbocompresor, rinde 122 CV/200 Nm (desde 1.400 rpm), acelera en 9,3 segundos hasta 100 km/h y alcanza 203 km/h. Además, registra 5,2 l/100 km y 120 g/km. En el tiempo le seguirá un 1.4 TFSI de 140 CV/250 Nm con desconexión de cilindros para mejorar gasto y emisiones.

El segundo motor es el 1.8 TFSI, también downsizing, de 180 CV/250 Nm con Audi Valvelift en admisión y escape para mejorar el rendimiento en las diferentes condiciones de demanda de potencia y giro mecánico. Sprinta de 0 a 100 km/h en 7,2 segundos y logra 232 km/h, a cambio de un promedio homologado en 5,6 l/100 km.

En diésel de lanzamiento será un 2.0 TDI completamente revisado en su estructura para mejorar rendimiento y consumo. Libera 150 CV/350 Nm (a partir de 1.750 rpm), completa la progresión de 0 a 100 km/h en 8,6 segundos y llega a 216 km/h. Su consumo medio homologado se limita a 4,1 l/100 km (106 g/km), de modo que con 50 litros de tanque circula durante 1.200 km antes de parar a repostar.

Las transmisiones son auto secuencial de doble embrague DSG 7 para el 1.8 TFSI y manual de 6 relaciones en el resto de motorizaciones. Antes de finales de año se presentará una versión de cuatro ruedas motrices quattro con diferencial central de corona de reparto continuo, sin limitaciones en la entrega de potencia, que se comercializará a comienzos del 2013.

A todo ello, después del verano se presentará una versión con motor e-gas, 1.4 TCNG de 110 CV (en el vídeo sobre estas líneas en fase de ensayos sobre la base de un A3 Sportback de la anterior generación). Usa un gas similar al gas natural que se produce por descomposición del agua en oxígeno e hidrógeno, fruto de la energía eléctrica producida por aerogeneradores instalados en el Mar del Norte.