«Teherán debe saber que la opción militar es posible»

El Gobierno israelí está presionando a Barack Obama para que envíe un mensaje claro a Irán, en el que se subraye que la república islámica será atacada si transgrede ciertas líneas rojas en su programa nuclear. Este será el principal objetivo de la visita del primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, a Washington, donde se entrevistará con el presidente norteamericano, Barack Obama, el próximo lunes. En este sentido, El viceprimer ministro y ministro de Servicios de Inteligencia, Dan Méridor, defendió un incremento de las sanciones para poner fin al programa nuclear de Irán, que además debe percibir que si no modifica su política un ataque militar «es una posibilidad real», informa Efe. «Los iraníes deben saber que va en serio, que si no modifican su política es una posibilidad real», señaló Mériodor en una entrevista publicada por el diario francés «Le Monde».

Así las cosas, Obama juega a la firmeza de sus amenazas, pero con considerables dosis de ambigüedad. Por un lado aseguró que no está lanzando ningún farol cuando advierte que nunca se permitirá a Irán que se dote de un arma nuclear y que no se descarta una opción militar si el régimen de los ayatolás hace caso omiso de la advertencia.

Pero al mismo tiempo, cuando fue interpelado durante un discurso en Nueva York por una de las asistentes al acto que le pidió que evitara una guerra con Irán, el presidente contestó: «Nadie ha anunciado una guerra, joven, se está precipitando un poco». Justo el discurso que Netanyahu no quisiera escuchar.