Ayuda de 400 euros para una hipoteca de 285.000

Una familia ecuatoriana logró ayer el aplazamiento del desahucio de su vivienda de Madrid durante 15 días después de que varios integrantes de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH) se concentraran en su domicilio junto al director del colegio de los menores afectados y el sacerdote del barrio.

La semana pasada, una vecina del barrio madrileño de San Blas, Patricia Tapia, ecuatoriana, de 28 años, y sus hijos de tres y un año, también consiguieron aplazar su desahucio hasta el 28 de marzo. Patricia vive en un piso de la calle Argenta y no puede pagar la hipoteca que firmó con Bankia, de 285.000 euros, porque únicamente cobra el subsidio del paro de 400 euros.

En el caso de ayer, y según ha confirmado el portavoz de la PAH, Vicente Pérez, los representantes del banco y la comisión judicial encargada de ejecutar este desahucio han accedido a un aplazamiento hasta el próximo 7 de marzo, tiempo durante el cual la familia intentará conseguir una dación en pago —que el banco se quede con el piso y condone la deuda—, o seguir en el mismo pagando un alquiler. Al domicilio, ubicado en la calle Castalia, en el distrito de Canillejas de la capital de España, acudieron ayer varias decenas de miembros de la PAH y vecinos para pedir que se paralizase el desahucio de Mónica, Javier y sus dos hijos de once y tres años, informa Efe.

Entre los concentrados estaban el director del colegio Marqués de Suances, Luis Alfonso Hernández, en el que estudian los dos menores, quien ha querido expresar su apoyo a la familia y demandar que los alumnos no se queden sin hogar.

También asistió el párroco del barrio, Rafael Rojo, quien relató que era la primera vez que acudía a un «stopdesahucios» y lo hacía porque la familia afectada suele acudir a su parroquia desde hace años y no considera justo que ahora pierdan su vivienda y queden en la calle.

El portavoz de la PAH, Vicente Pérez, destacó, por su parte, que la presión vecinal ha hecho que se impida, por el momento, que Bankia tome posesión de una vivienda que se quedó por el 50% de su valor de tasación en una subasta judicial desierta. Contó que Mónica y Javier se vieron obligados a dejar de pagar las cuotas de su hipoteca, que llegaron a los 1.650 euros, porque sus sueldos no suman 1.400, y el banco no ha aceptado la dación en pago ni que se queden en la vivienda en régimen de alquiler.

Pérez se felicitó por este aplazamiento, que se suma al conseguido ayer también en el barrio de Tetuán para otra familia ecuatoriana, y recordó que la semana pasada también se evitó el desahucio de una familia de Villaverde Alto con niños en edad escolar gracias al apoyo de los vecinos y de la directora del colegio de los menores.

Asimismo, se congratuló por el acuerdo alcanzado el martes con su banco por un vecino de Aluche, que tiene tres hijos menores, para continuar viviendo en el piso que ocupa actualmente pagando un alquiler de 500 euros.