Farmaindustria plantea dejar de financiar fármacos para problemas menores

No es la primera vez que se propone la salida de la financiación pública de los fármacos, de bajo coste, utilizados en el tratamiento de problemas menores. Algunas comunidades autónomas ya han pedido al Ministerio de Sanidad un «medicamentazo» para las medicinas que cuestan menos de tres euros , utilizadas en el tratamiento de síntomas catarrales o problemas digestivos de escasa importancia. Pero es la primera vez que la patronal de los laboratorios reconoce que «si se hace bien» sería una buena iniciativa para controlar el gasto. «Es una idea razonable y hay margen para que se pueda realizar , aunque no es una iniciativa nuestra», puntualizó.

La medida supondría también una merma en su cuenta de resultados, después de tres bajadas consecutivas de precio en los medicamentos impuestas por el anterior equipo de Gobierno. Pero garantizaría la financiación de los medicamentos más caros destinados a patologías más graves, donde la industria hace su mayor esfuerzo inversor.

Farmaindustria, la patronal de los laboratorios, estaría dispuesta a asumir este sacrificio o cambios en el actual copago farmacéutico que «probablemente» llevarían a consumir menos medicamentos. «A nosotros no nos toca decidir si un pensionista con renta alta puede pagar el 40 por ciento de un medicamento o si es injusto que un mileurista sí lo pague, pero creemos que hay margen de mejora», dijo Humberto Arnés. Lo que sí tiene claro es que «pondremos en riesgo la Sanidad pública si seguimos cubriéndolo todo».

Farmaindustria también pide a las comunidades autónomas una mayor eficiencia en el uso de los servicios públicos y prioridad absoluta a los presupuestos sanitarios de las comunidades autónomas. Estas «recetas» para salvar la sanidad se han incluido en una carta destinada al presidente del Gobierno en la que advierten a Mariano Rajoy del riesgo de mantener la actual deuda de los hospitales públicos, valorada entre los 12.000 y 15.000 millones de euros. Solo en fármacos de uso hospitalario las autonomías deben 6.500 millones.

Algunas comunidades acumulan facturas impagadas desde hace más de dos años, aunque la legislación obligaría a pagar antes de 40 días. La patronal farmacéutica reconoce que hay «un riesgo real» de desabastecimiento, que las compañías dejen de suministrar a los hospitales públicos medicamentos y material sanitario por impago.

La situación es «dramática» para las compañías, asegura Farmaindustria. Con empresas en suspensión de pagos y más de 5.000 puestos de trabajo en riesgo. «Es el peor momento de la industria farmacéutica. No es una queja, es una realidad», asegura el director de la patronal.

El primer paso para salvar a las empresas es normalizar la deuda sanitaria , piden. La fórmula que elija el Gobierno no importa. Ya sea con una línea de crédito IC o colocando la deuda a terceros. «Lo que necesitan las compañías es cobrar ya la deuda este año», señaló Javier Urzay, subdirector de Farmaindustria.