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PARECE MENTIRA

Qué bueno que perdió Chacón

El nacionalismo respira tranquilo: una catalana, por ahora, no podrá ser Presidenta del Gobierno de España. Alguien que hablando en catalán manifestara su amor a España hubiera sido letal para el nacionalismo

joan lópez

USTED ya sabe, el PSC es un partido que nunca hará nada porque no es suficientemente catalán. Ese es el diagnóstico que repiten, hasta creérselo, todos los acreditadores oficiales de la ISO Cat, la acreditación oficial de catalanidad y buena conducta. Su teoría es absurda: cuando el PSC estaba más identificado con el PSOE, cuando en sus carteles se denominaban sin vergüenza alguna PSC-PSOE, les iba infinitamente mejor que ahora, que son un partido de izquierdas pero institucionalizado, al estilo PRI mejicano, y encima apátrida.

Quizás si Montilla en lugar de intentar encabezar manifas independentistas hubiera defendido la inequívoca españolidad de Catalunya, quizás, solo quizás, más de la mitad del electorado del PSC —que en su gran mayoría nació, vive y siente como la familia de Montilla, o sea, como ciudadanos españoles felices de vivir en Catalunya— no se hubiera quedado en casa el día de las elecciones y ni Montilla, ni Hereu ni Chacón hubieran sufrido sendos revolcones electorales. A la pobre Carme Chacón le ha sucedido algo parecido. Primero la criticaban por aspirar al liderazgo del PSOE. ¿Qué hace una catalana aspirando a liderar un partido no catalán?—, bramaban nuestros acreditadores de la ISO Cat. Y luego, una vez ha perdido, le dan la vuelta al argumento: la derrota de Chacón es la constatación de que el PSOE no quiere a Catalunya.

El nacionalismo respira tranquilo: una catalana, por ahora, no podrá ser Presidenta del Gobierno de España. Alguien que hablando en catalán manifestara su amor a España hubiera sido letal para el nacionalismo. ¿Y si unos cuantos cientos de miles descubren que no hay para tanto? Qué molestia. Tras demonizar a Vidal-Quadras, a los Fernández, a Borrell e incluso a Piqué, demonizar a Chacón hubiera sido una molestia.

España, y con ella Catalunya, no ha sobrevivido —económicamente hablando— al socialismo. El socialismo, y en concreto su aparato de partido, sí ha sobrevivido a sí mismo eligiendo al aparatik por excelencia: Rubalcaba. ¿Sobrevivirá el PSOE a Rubalcaba? Y lo que más importa a nuestros acreditadores de catalanidad ISO Cat: ¿sobrevivirá el PSC sin el PSOE? Yo creo que no.

Joan López es profesor de la Universitat Abat Oliba CEU.

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