Martin y Lowry pueden con Love y Rubio en séptimo triunfo de Rockets

Martin volvió a tener afinada su muñeca para anotar 31 puntos, incluidos 4 triples de 10 intentos, y superó constantemente a sus marcadores Wayne Ellington y Luke Ridnour . Lowry dirigió el juego de los Rockets al aportar 16 puntos, 10 rebotes y 10 asistencias, además de hacer una gran defensa sobre el base novato español Ricky Rubio, que al final no pudo ser factor ganador para los Timberwolves.

La gran labor de Martin y Lowry permitió al entrenador de los Rockets, Kevin McHale, volver por la puerta grande al Target Center, de Minneapolis, después que en la temporada del 2009 fue despedido de la organización de los Timberwolves que él ayudó a crear.

Además la victoria tuvo doble valor para McHale y los Rockets al ser la primera que logran fuera de su campo ante equipos de la Conferencia Oeste (1-5) y teniendo en el banquillo de los Timberwolves al veterano Rick Adelman, el entrenador del equipo de Houston durante las últimas cuatro temporadas. Adelman se enfrentó con la directiva de los Rockets en cuanto a la idea que tenía de reconstruir al equipo después de la retirada del pívot chino Yao Ming, y eso le costó su salida de la organización para luego fichar por los Timberwolves.

Mientras que McHale fue abucheado por los seguidores de los Timberwolves, al considerarlo como el causante de decisiones que le han costado al equipo ser uno de los peores de la NBA , los jugadores de los Rockets se dirigieron a Adelman para saludarlo antes del partido. Los Rockets (10-7), que tuvieron siempre el control del marcador para irse al descanso con la ventaja parcial de 47-54, así como la aportación bajo los aros del pívot haitiano Samuel Dalembert, que capturó 15 rebotes y dos tapones.

El ala-pívot argentino Luis Scola se convirtió en el tercer máximo encestador de los Rockets al aportar 15 puntos (7-12, 0-0, 1-1), capturó tres rebotes y dio una asistencia en los 28 minutos que jugó. Aunque los Rockets estuvieron la mayoría del partido por delante en el marcador, no habían podido distanciarse hasta la recta final del tercer periodo y el cuarto tras conseguir una racha de 19-1 que dejó sentenciada la séptima victoria del equipo de Houston.

El base esloveno Goran Dragic se convirtió en factor sorpresa al aportar 14 puntos, incluidos ocho conseguidos en la racha decisiva de los Rockets que lograron después que los Timberwolves se pusieron a sólo cinco puntos de empatar el marcador (65-70).

Esta vez no hubo reacción del base novato español Ricky Rubio, que volvió a fallar en los tiros a canasta, anotó solo seis puntos, aunque le salvaron las 12 asistencias que repartió en los 38 minutos que jugó. Rubio anotó 2 de 10 tiros de campo, falló los tres intentos de triple que hizo, estuvo perfecto desde la línea de personal (2-2), capturó tres rebotes y recuperó tres balones, pero perdió cinco, el que más del equipo que registró 20, incluidos 10 en el cuarto periodo, para ser una de las claves de la derrota.

Tampoco la aportación del ala-pívot Kevin Love que consiguió un doble-doble de 39 puntos -mejor marca de la temporada- y 12 rebotes impidieron la segunda derrota consecutiva de los Timberwolves (7-10). El alero novato Derrick Williams jugó su primer partido como titular con los Timberwolves para conseguir 11 puntos y siete rebotes, pero también registró cuatro pérdidas de balón.

Los Timberwolves siguieron con las bajas del ala-pívot Michael Beasley, que se perdió el décimo partido consecutivo por la lesión que sufre en el pie derecho y el base puertorriqueño José Barea, que se recupera de un esguince del tobillo izquierdo y no ha podido jugar en los últimos seis encuentros. El escolta titular Wesley Johnson también fue baja al estar afectado por la gripe.