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Los Anti-ATC de Guadalajara celebran que «no venga el cementerio»

Tienden la mano a los vecinos de Yebra favorables «para recuperar la unidad del pueblo»

Los Anti-ATC de Guadalajara celebran que «no venga el cementerio» L. REVENGA

ÓSCAR CUEVAS MORAL

La Plataforma Anticementerio Nuclear de Guadalajara mostró ayer públicamente su satisfacción, no tanto con la elección de Villar de Cañas como municipio sede para el ATC, como con el hecho de que el «peligro» haya desaparecido finalmente de Yebra. «Hemos conseguido nuestro objetivo, hemos logrado sacar el cementerio nuclear de Yebra gracias a la unidad que ha mostrado esta provincia», decía ayer Susana Atance, una de las portavoces de la Plataforma, quien no obstante aventuró que la asociación no se va a disolver en este primer momento. «Yo es que hasta que no lo vea publicado en el BOE, no me lo creo», añadía.

«Es un momento feliz, estamos muy contentos de que no nos pongan en el cementerio en nuestra provincia, y ahora lucharemos por el desarrollo de nuestra comarca», decía por su parte Javier Gómez, vecino de Yebra y también portavoz de la Plataforma Anti ATC.

Gómez lamentó la división que todo este proceso ha generado en el pueblo e incluso en el seno de algunas familias de Yebra, y en este sentido dijo que «tendían la mano» a los vecinos de la localidad que en estos años han estado a favor de la instalación, «para recuperar la unidad y la concordia» en el municipio.

Gómez recordó también que el alcalde popular de Yebra, Juan Pedro Sánchez, fue el único primer edil de los municipios candidatos «que perdió poder» en las últimas Elecciones Municipales con respecto a las anteriores. No obstante, hay que recordar que Juan Pedro Sánchez volvió a ganar por mayoría absoluta, una victoria que Gómez (que fue candidato por el PSOE) achaca a «manipulaciones» en un censo inflado.

Sabor agridulce

Por su parte, Francisco Castejón, de Ecologistas en Acción, dijo que le quedaba un «sabor agridulce» con la elección de Villar de Cañas: «Estamos contentos porque no venga a Guadalajara, pero lamentamos que lo pongan en un municipio hermano de Castilla-La Mancha», señaló. A juicio de Castejón, en la zona conquense de Villar no ha dado tiempo a articular un movimiento anti cementerio como el existente en Guadalajara, donde las movilizaciones han sido periódicas y constantes desde que la «amenaza» del ATC se planteó por primera vez en 1988.

Castejón sí fue muy crítico con el nuevo Gobierno central del PP, al que acusó de haber adoptado una decisión meramente política y no técnica, ya que recordó que Villar de Cañas no era precisamente uno de los candidatos mejor valorados por los expertos que realizaron el análisis de los distintos municipios que querían albergar la instalación.

Eso sí, el portavoz de Ecologistas dice que también fue únicamente política la intención del anterior Gobierno socialista de ubicarlo en Zarra. A juicio del veterano ecologista, la decisión final a favor de Villar de Cañas sólo ha sido posible ante la actitud cambiante del PP regional y de María Dolores de Cospedal, que en los últimos años ha pasado de decir que no lo quería en ningún municipio de la región, a señalar que «ni lo quería ni lo dejaba de querer», a finalmente felicitarse por la elección de la localidad conquense.

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