Passio cierra sus puertas como la muestra más vista del año

«Passio», la XVI edición de la serie de exposiciones Las Edades del Hombre, cerró ayer sur puertas en las dos medinas, con un balance de 448.229 visitantes en siete meses y de los que 226.106 acudieron a Medina del Campo y 222.133 a Medina de Rioseco. «Era un reto importante; por primera vez se celebraba en dos sedes, se cobraba por la entrada, y no se celebraba en sede catedralicia, y hoy podemos decir que esta exposición ha sido un rotundo éxito. Un gran éxito de todos y para todos», subrayó la consejera de Cultura y Turismo, Alicia García.

Para la consejera, «Passio» ha cubierto las expectativas y las esperanzas que se habían depositado en la muestra, y «el número de visitantes ha sido mayor de lo esperado», situando esta exposición en el primer lugar a nivel nacional en cuanto a número de visitantes. Además, recordó que la próxima edición, ya en 2012, tendrá lugar en Oña (Burgos), y auguró que «va a ser un nuevo éxito». Cuestionada sobre la posibilidad de repetir la fórmula de una doble sede en el futuro, García apuntó que desde el Gobierno regional se valorará, en colaboración con la Fundación Las Edades del Hombre, «si en Oña es conveniente tener dos sedes o una única sede como en Soria, con templos de gran valor que también se puedan visitar para dinamizar las zonas de alrededor».

Entre las razones del éxito aludidas por la consejera, apuntó que «los empresarios y agentes sociales de las dos medinas han emprendido acciones conjuntas para comercializar sus productos y sus servicios», algo que calificó como «un éxito en sí mismo». Además, resaltó que el público ha acogido «de manera satisfactoria» otra novedad como ha sido la inclusión de de artistas castellanos y leoneses contemporáneos. «Esta edición ha sido importante en la dinamización turística y económica de ambas zonas, porque se ha celebrado en un contexto de crisis importante, donde el consumo interno no atraviesa su mejor momento, pero los ciudadanos han vuelto a respaldar este proyecto cultural», afirmó.

En la valoración de la edición coincidieron con la consejera el alcalde de Medina de Rioseco, Artemio Domínguez, y el concejal de Juventud y Turismo de Medina del Campo, José María Magro. Según explicó Domínguez, «el sentimiento general de los riosecanos es de pena porque se terminan Las Edades, pero también de satisfacción, porque las personas y visitantes que se han acercado a las dos medinas yo creo que han encontrado la necesidad de volver». Magro, por su parte, redundó en el «balance positivo» de la muestra, que en su opinión «ha demostrado que las dos medinas pueden organizar grandes eventos y hacerlo muy bien». Sin embargo, sí quiso destacar un «hándicap» a esta edición, al referirse a la sede elegida, la Iglesia de Santiago el Real. «Tanto la alcaldesa, Teresa López, como miembros de la propia Fundación, se han dado cuenta de que no era el lugar adecuado».

También asistió a la clausura de la exposición el presidente de la Fundación de las Edades del Hombre, Carlos López, que apuntó que «no es por vanidad, pero ya estamos acostumbrados a que todas las exposiciones de Las Edades del Hombre tengan un nivel de calidad y de respuesta en cuanto a visitantes muy positivo».