Hazte premium Hazte premium

Mijail Gorbachov pide la anulación de las elecciones rusas

Más de mil detenidos en una masiva redada policial

RAFAEL M. MAÑUECO

Tres días después de la celebración de unas elecciones que todas las fuerzas políticas rusas, salvo el partido del poder, han tachado de fraudulentas la situación en Rusia se deteriora de forma alarmante. Mientras desde dentro y fuera del país se reclama una investigación de las acusaciones de fraude, las protestas se producen a diario y se extienden a otros lugares de Rusia. En esta situación el ex líder soviético, Mijaíl Gorbachov, pidió ayer que se anulen los resultados de los comicios y se convoquen unos nuevos.

«Los dirigentes del país deben admitir que hubo muchas falsificaciones y fraudes y que los resultados no reflejan la voluntad de los electores», manifestó Gorbachov a la agencia rusa Interfax. Según el antiguo líder de la URSS, «la única decisión posible es anular los resultados de las elecciones y celebrar unas nuevas». Y es que, en su opinión, cada día que pasa, «aumenta el número de gente que consideran que los resultados de los comicios no han sido limpios». «Ignorar la opinión general mina la reputación de las autoridades y desestabiliza la situación», sentenció. Eso sí, con gran optimismo, se declaró convencido de que el jefe del Kremlin, Dmitri Medvédev, y el primer ministro, Vladímir Putin, convocarán nuevas elecciones para que «todo siga dentro del cauce democrático».

Después de dos días de manifestaciones de protesta en Moscú, San Petersburgo y otras ciudades rusas, ayer hubo nuevos intentos de continuar las movilizaciones en la capital rusa y surgieron por primera vez en el enclave de Kaliningrado, la antigua Koenigsberg. Pero la concentración convocada en Moscú en la plaza «Triumfálnaya» no se pudo llevar a cabo por que miles de policías, casi tantos como manifestantes, la acordonaron previamente y llenaron de vallas.

Desde el lunes se han practicado más de un millar de detenciones, entre ellos dirigentes de partidos y organizaciones opositoras. La mayoría no han sido puestos aún en libertad y algunos de ellos han sido condenados a penas de 15 días de prisión. Mijaíl Fedótov, asesor para derechos humanos de Medvédev, calificó ayer de «inquietante» la situación en Rusia.

Con casi todas las papeletas escrutadas, «Rusia Unida», el partido del Kremlin, obtiene el 49,3% de los votos, lo que supone 238 escaños, 77 menos que en la anterior legislatura, pero conserva la mayoría absoluta. Los analistas creen que ha recibido por lo menos un 10% de votos falsificados. El líder de la formación liberal Yábloko, Grigori Yavlinski, que no ha conseguido ni un diputado, llamó ayer a la oposición comunista y ultranacionalista a renunciar a sus escaños y forzar así unos nuevos comicios.

Esta funcionalidad es sólo para suscriptores

Suscribete
Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación