Los plásticos amenazan la defensa de Contador

La tesis científica frente a la cuestión de fe en la segunda jornada del juicio en el Tribunal de Arbitraje del Deporte (TAS) contra Alberto Contador . La teoría de la transfusión sanguínea y el rastro de los plásticos amenazan la defensa del ciclista español, que hoy está citado a declarar a las 13:30. Contador presentó los resultados del detector de mentiras al que se sometió en el estudio del americano Louis Rovner.

La hipótesis de la Agencia Mundial Antidopaje (AMA) y la Unión Ciclista Internacional (UCI) persigue demostrar que Contador se practicó una transfusión de sangre el 21 de julio de 2010 en el hotel de Pau en el segundo día de descanso de aquel Tour . Y lo hace en base a los resultados del laboratorio de Colonia que analizó la orina del ciclista y detectó el clembuterol. Según la AMA y la UCI, la orina del español habría dejado secuelas de plastificantes que indicarían la presencia de bolsas especiales de conservación de sangre y que abonarían la tesis de una transfusión.

El laboratorio de Barcelona que dirige el doctor Jordi Segura ha desarrollado un método ( DEHP ) para detectar las transfusiones de sangre propia. Y la comunidad científica ha atendido con optimismo el análisis de residuos plásticos del tipo di(2-ethylhexyl) phthalato . Según el estudio, una persona sin transfusiones no pasa de los 50 nanogramos por mililitro en su organismo, mientras que cualquier individuo que se cambia la sangre alcanza los 200 ng/ml .

La investigación del doctor Segura midió los niveles de residuos de metabolitos de phthalatos en diferentes grupos: 35 pacientes de hospital sometidos a transfusiones, 25 con otros tratamientos y 127 deportistas. Los restos de phthalatos en las personas que recibieron alguna transfusión sanguínea fueron mucho más elevadas que en aquellas que trataron su enfermedad sin modificar su sangre.