Profesionales se podrán formar para el transporte de animales vivos

Manzanares acoge por primera vez un curso para la obtención del certificado de competencia que permite realizar transporte de animales vivos, según estipula la normativa europea. La falta del mismo puede acarrear una sanción de más de 3.000 euros. Este curso, organizado por el Cesyra de Valdepeñas y en el que participan treinta profesionales, está financiado por la Unión Europea, el Ministerio de Medio Rural y la Junta de Comunidades, con la colaboración del Ayuntamiento de Manzanares.

Del 17 al 20 de octubre el curso se celebrará en el salón de actos del Centro Social por la tardes, de 16 a 21 horas.

El curso, que consta de 20 horas está regulado por el Reglamento 1/2005 de la Unión Europea, que exige esta acreditación y regula todo lo concerniente al transporte de animales vivos, para que se haga en las mejores condiciones posibles y sin ocasionar sufrimientos indebidos a los animales, según explicó Manuel García-Cervigón, coordinador del curso.

La legislación establece además cómo deben ser las características de los vehículos de transporte, sus superficies mínimas, condiciones de ventilación, etc. Y su acreditación es obligatoria para quienes realizan el transporte de animales vivos de forma profesional, como ganaderos o carniceros

Los contenidos del curso se basan en legislación y en normas de bienestar animal. Aranda explicó que los principales incumplimientos suelen ser en materia de documentación. Además del certificado de competencia, se precisan otros de limpieza y desinfección, guías de transporte, etc.

El Ayuntamiento de Manzanares colabora en el desarrollo de este curso con la cesión de las instalaciones del Centro Social Polivalente. Aranda confió en que haya más oportunidades de ofrecer este tipo de formación en próximas ediciones.

Y se incidió en la necesidad de que los profesionales que tengan que ofrecer este negocio recurran a la formación específica ya que si no tienen la documentación adecuada en el momento de una posible inspección, las multas pueden llegar a 3000 euros. El Ayuntamiento acogió la iniciativa por la novedad de un curso que mejora la regulación profesional.