«El fantasma de Hugo Chávez se ha desvanecido en Perú»

El ministro es periodista, sociólogo, profesor universitario y padre del escritor Santiago Roncagliolo quien, bromea el canciller, «ha dicho que con mi nombramiento ha vuelto a ser hijo de». Militante de izquierdas en su juventud, más adelante fundó la Asociación Civil Transparencia, un grupo independiente dedicado a la limpieza electoral que “documentó las irregularidades” de los comicios de Alberto Fujimori en el año 2000.

Durante su gira europea, que ha comenzado y terminará en España, se reunió este lunes con su homóloga española, Trinidad Jiménez; el presidente del Partido Popular y candidato a las elecciones, Mariano Rajoy, y el coordinador de Relaciones Internacionales del PP, Jorge Moragas. Así como con la comunidad peruana en España; el secretario general iberoamericano, Enrique Iglesias, y con empresarios y especialistas en el Real Instituto Elcano.

Aunque no está fijada la fecha, está previsto que Humala visite España a principios de 2012. De momento, según su canciller, espera reunirse con el Rey y con José Luis Rodríguez Zapatero la semana próxima durante la cumbre iberoamericana de Paraguay.

—¿Qué espera Perú de un próximo gobierno de centro-derecha en España, si se confirman las encuestas?

—Con cualquiera que gane las elecciones debemos mantener la mejor relación, que es muy buena. España es el primer inversor en Perú. También en términos de comercio exterior, cooperación y cultura. Compartimos un Premio Nobel, Mario Vargas Llosa. Y mantenemos una buena relación política para analizar problemas de la agenda mundial. En parte mi viaje trae ese planteamiento: queremos mantener la buena relación independientemente de quién gobierne.

—¿Teme que la crisis económica afecte a las inversiones españolas?

—Esta vez no se puede achacar la crisis a la irresponsabilidad del sur. Nos la están exportando desde el norte y tenemos que defendernos. Podría afectarnos, pero también es posible que busquen países con economías menos vulnerables. Paradójicamente, en este momento invertir en América Latina, en Perú, puede ser una manera de protegerse. Nuestro mensaje es que vale la pena invertir en Perú por las condiciones de su economía. Es más seguro que en algunos de los países más afectados.

—¿Qué balance hace de los casi tres meses de gobierno de Humala?

—Muy positivo. Hemos aprobado la ley de consulta previa, llegado a un acuerdo con las empresas mineras para aumentar su contribución al Estado y lanzado programas sociales muy importantes. Un señal de confianza de estos días es que la calificación de la deuda peruana ha mejorado, cuando decrece la de España o EE.UU.

—¿Se ha acallado la inquietud que despertaba en algunos sectores una proximidad de Humala a Chávez?

—Ese fantasma se ha desvanecido, un fantasma creado para perjudicar a Ollanta Humala, como que la economía iba a sufrir un descalabro... Todas estas cosas han quedado atrás porque se entiende cuál es la verdadera naturaleza de nuestro Gobierno, que significa excelentes relaciones con todos los países de la región, incluido Venezuela, pero no la participación en ningún tipo de bloque ideológico.

—¿Es posible combinar políticas a favor de los más pobres y de los inversores?

—Demostramos que es posible, estamos logrando un flujo de inversiones importante y, al mismo tiempo, desarrollando una política de inclusión social. Estamos fortaleciendo el papel del Estado, pero no es un Estado privatizado al servicio de pocos, sino al de todos.

—El Brasil de Rousseff y Lula es entonces más el modelo peruano?

—Son países distintos. Pero es cierto que Perú, al igual que Brasil, quiere mantener el crecimiento económico con políticas sociales efectivas. En ese aspecto sí hay una coincidencia, no un modelo.