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El PSOE «salva» a Blanco en el Congreso

El PP le invita a dar explicaciones de forma voluntaria «si no tiene nada que ocultar»

M. CALLEJA

«Rajoy debe dar explicaciones convincentes sobre el “caso Gürtel”, porque la sociedad se lo reclama. No puede pasar ni un minuto más, cada minuto que tarda es tarde». Así de contundente se expresaba José Blanco en octubre de 2009. Dos años después, el ahora portavoz del Gobierno ha evitado comparecer en la Diputación Permanente del Congreso, por el «caso Campeón», gracias al veto impuesto en la Mesa por los representantes del PSOE a la petición del Grupo Popular.

El resultado de la votación de la Mesa de la Diputación Permanente estaba cantado desde el momento en que el PP registró su solicitud de comparecencia del ministro. Los tres miembros del PSOE (José Bono, Teresa Cunillera y Javier Barrero) impusieron su criterio negativo sobre los dos representantes del Grupo Popular (Ana Pastor e Ignacio Gil Lázaro), con el fin de «no enturbiar la campaña electoral». Pastor denunció después que el PSOE, con su voto en contra, ha primado el interés partidista en lugar del interés general y «ha vetado la transparencia y que Blanco diga la verdad, dé la cara y no se oculte». Los populares han exigido a Blanco que sea coherente con su discurso de los últimos años y comparezca de forma voluntaria y urgente «si no tiene nada que ocultar».

Desde 1982

La vicepresidenta primera de la Mesa, Teresa Cunillera, defendió que el PSOE se ha limitado a cumplir el Reglamento de la Cámara, que en su artículo 57 establece que «corresponde a la Diputación Permanente velar por los poderes de la Cámara cuando ésta no esté reunida y además» aprobar los decretos-leyes que envíe el Consejo de Ministros y ejercer las competencias que respecto de los estados de alarma, excepción y sitio atribuye la Constitución. Pese a la ambigüedad de la redacción literal de ese artículo 57, lo cierto es que desde el año 1982 se han rechazado las 24 peticiones de comparecencias presentadas entre legislaturas, excluidas las de ayer, según apuntó Cunillera. La última vez que se admitió una comparecencia en esas circunstancias fue el 11 de octubre de 1982, cuando el entonces ministro de Defensa, Alberto Oliart, acudió a petición propia para informar de las detenciones de mandos militates implicados en una supuesta intentona golpista.

La Mesa también rechazó ayer otra petición de comparecencia de Elena Salgado, cursada por IU y BNG.

Mientras tanto, el ministro Blanco reiteró su deseo de poder defenderse de las «falsedades» supuestamente denunciadas por el empresario imputado Jorge Dorribo e insistió en que forman parte de una estrategia que constituye «una golfería», según informa Efe. El secreto de sumario del «caso Campeón» ha sido prorrogado hasta el próximo 12 de noviembre, día en que la juez decidirá si se amplía de nuevo o se levanta.

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