El general David Petraeus cuelga el uniforme para dirigir la CIA

«La historia te recordará como uno de nuestros mayores capitanes de batalla», le ha dicho con motivo de su jubilación el ex secretario de Defensa Robert Gates. La ceremonia del adiós de quien ha recibido el comando seis veces en cuatro zonas de guerra se realizó ayer en el Pentágono, presidida por Leon Panetta, nuevo secretario de Defensa.

Panetta asumió ese puesto en junio, dejando a Petraeus el cargo de director de la CIA que él mismo había ocupado en los dos últimos años. El corrimiento de puestos forma parte de una amplia remodelación de los responsables en materia de seguridad ejecutada por Barack Obama. En el décimo aniversario del 11-S, con Osama bin Laden muerto y el comienzo de la retirada de Afganistán, el presidente ha decidido cerrar una etapa retirando al militar más identificado con las campañas militares que tienen su origen en 2001 .

Petraeus habría preferido alcanzar la cúspide de las Fuerzas Armadas, convirtiéndose en jefe del Estado Mayor conjunto, pero la sintonía con Obama en términos militares no es completa, por más que el presidente aplicó en Afganistán la estrategia de Petraeus de elevar el número de soldados sobre el terreno, que tan buenos resultados le dio al general en Irak entre 2007 y 2008. De hecho, Petraeus ha discrepado sobre la rapidez con la que Obama ha planteado la retirada de suelo afgano.

Los méritos de Petraeus, de 58 años, eran innegables y Obama le ha premiado poniéndole al frente de la CIA. Aunque en su nuevo puesto podría seguir llevando el uniforme, Petraeus ha preferido evitar que su nueva responsabilidad se interprete como una militarización de los servicios secretos.