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baloncesto

España cambia de munición

Los hombres exteriores de la selección han perdido fuerza en la parcela ofensiva, protagonizada por el juego en la zona

España cambia de munición REUTERS

EMILIO V. ESCUDERO

El regreso de Pau Gasol y la llegada de Serge Ibaka ha cambiado los esquemas de la selección. Si hace un año, en el Mundial de Turquía, el peso ofensivo recaía en el perímetro, el renovado juego interior del equipo de Scariolo ha obligado al técnico italiano a variar sus sistemas.

Después de seis encuentros de preparación, ese nuevo reparto de roles ha quedado bastante claro. Es cierto que los minutos entre bases y aleros han estado más repartidos en esta primera fase de la concentración, pero los números reflejan ya un mayor peso de los pívots a la hora de mirar el aro. Así, más de la mitad de los puntos conseguidos hasta ahora por la selección —concretamente el 51,52 por ciento— han llegado de la mano de los hombres altos. Los hermanos Gasol han estado especialmente certeros, pero Felipe Reyes, Serge Ibaka y Víctor Claver también han aportado su granito de arena . Una de las causas para que se haya producido este vuelco respecto a otras temporadas es la fortaleza en el rebote ofensivo, donde la selección domina con claridad a todos sus rivales.

En ese sentido, Scariolo ha diseñado nuevos sistemas en los que el balón acaba cerca del aro, algo lógico si tienes en tu plantilla a una fuerza de la naturaleza como Serge Ibaka y a dos de los mejores pívots de la NBA, como Pau y Marc . El de los Lakers ha terminado con dobles dígitos en todos los amistosos disputados, una muestra más de las ganas con las que ha regresado a la selección.

Sin un pívot específico que juegue abierto, como acostumbraba a hacer Jorge Garbajosa, ese rol ha sido adoptado por todos ellos. De hecho, entre los cinco pívots han anotado ya ocho triples, una faceta en la que ha destacado especialmente el mayor de los Gasol, autor de cinco lanzamientos de tres, una especialidad en la que destacaba durante su época en el Barcelona, pero que en la NBA tiene prácticamente prohibida. Al cambio de planes de Scariolo está contribuyendo la preocupante falta de acierto del «frontcourt». Quitando algún partido de Navarro, demasiado irregular en el tiro, la puntería del perímetro español no ha brillado especialmente. Sólo Rudy (en una ocasión), el propio Navarro (2) y Llull (2), han superado la decena de puntos. Además, el porcentaje de acierto en el triple, rozando el 40 por ciento, no contribuye a fomentar el lanzamiento.

La enfermería se vacía

Mientras unos y otros afinan la puntería, los médicos de la selección siguen adelante con la recuperación de los lesionados. Ricky Rubio parece que podrá jugar ante Australia el jueves. Su tobillo ya está bien y ayer entrenó con normalidad con el resto del grupo. En el caso de Rudy Fernández, habrá que esperar. El golpe que recibió en el codo frente a Eslovenia obliga a ser prudentes y, en principio, no jugará ninguno de los dos amistosos frente a los australianos. Sin él en cancha, Suárez y Sada tendrán más minutos para demostrar a Scariolo quién se merece ocupar la última plaza libre para el Europeo.

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